capitulo 13

Unos días después, ya Alejandro no veía a nadie quejarse de su hijo, Oriana sabía cómo entretenerlo y hacerlo feliz a la vez, paciencia le sobraba para con él, su nana se moldeó a las comidas, jugos, postres y medicamentos del niño, sus ejercicios diarios, al ver todo eso y la sonrisa que tenía su hijo, sintió que él, era el culpable de no verlo reír todos estos años, olvido hasta como divertirse, como amar, solo por esperar algo que tal vez no en serio lo mismo si sucediera.

¿_ Señor, disculpe que lo moleste, podría llevar usted a Axel al colegio? El chófer salió hacer unos mandados y la señorita Oriana no llegará a tiempo.

_No hay problema nana, llévalo al auto, ya salgo para allá._

Alejandro terminó de organizar unas cosas en su maletín y salió.

_¿Cómo estás, hijo?_

_Bien._

Su respuesta fue rápida y volvió a poner su vista en su tablet, estaba jugando a algo muy importante para él.

_¿Puedo ver lo que haces?_

El chico Volteo, la tablet, Alejandro tenía mucha curiosidad de saber, que lo tenía tan entretenido, no cualquier cosa lograba su atención, y no verlo inquieto en el auto era sorpresa.

_¿Sopas de letras?_

_Si, Ori quiere que encuentre, Ori, Ale, Axel, nana, luc, si las encuentro antes de salir del colegio, me lleva al parque._

Ingeniosa, buscaba maneras de tenerlo quieto, sin amenazas, sin meterle miedo, solo enseñarle deberes antes de la diversión.

_Pero no debes usar eso en clases._

_Lo sé, debo esperar al receso._

_¿Te faltan muchas?_

_Solo me falta, Ori._

Ale sonrió, se la puso difícil, sabía que no se rendiría hasta encontrar la más importante para él en ese momento, ella llegó para darle alegría a su hijo y él seguía sin entender la importancia de eso.

_Lo lograrás, hijo._

El chico sonrió, la misma sonrisa de él cuando chico, esa conversación, la primera que tenía con su hijo, lleno el alma del hombre, lo dejo deseoso de conocer más de él y compre ser más su condición.

Dos horas después, por el tráfico y las paradas, Alejandro llegó a su oficina feliz y lleno de energía, tanto que sus empleados lo veían asombrados, estaba casi seguros, que tenía casi una sonrisa, su cara no estaba fruncida, cuando entró ya sus socios estaban sentados y con la misma alegría.

_¿En esta oficina, radia la alegría y felicidad, pueden compartir el Motivo?_

Robert era feliz y pleno al tener a Aurora, solo necesitaban extrañarse y un mensaje bastaba.

_Mili y yo somos novios._

Un suspiro profundo salió de Albert, una noticia esperada por mil décadas.

_ Dios, mil años después, pero gracias.

Sus manos estaban unidas dirigidas al cielo.

_¿Quién es Mili.?_

_Mi Sobrina, la Presidenta de la empresa organizadora de eventos, pero ese es un cuento largo, un amor de décadas atrás._

_¿Un momento, como que sobrina? ¿Son primos?_

Su cuerpo se acomodó en la silla, los escuchaba hablar normal y eran primos.

_No, lucca es sobrino de cariño, sus padres son buenos amigos de mi hermana y cuñado, así que le decimos sobrinos a sus hijos desde niños._

Eso quitó las dudas de Alejandro, quien volvió a poner su cuerpo hacia atrás.

_¿Aja, pero ustedes qué? ¿Cuál es la felicidad?_

Lucca no sabía quién hacía feliz a su tío y menos a su socio.

_Yo tengo una amiga, una mujer espectacular, pero no diré más nada._

Ambos vieron a Alejandro, saco una porta retrato que encontró en su auto, lo había dejado Axel, atrás tenía escrito unas palabras muy bonitas encerradas en un corazón.

♥️ Una sonrisa... Cura el alma.♥️

_¿Una sonrisa, puede curar el alma?_

_Si es de la persona que amas, que te llena un vacío, que quieres para toda la vida, es seguro que sí._

Lucca hablaba imaginándose a su madre, hermana y Milagros, tres mujeres que llenaban su alma y corazón.

_Yo tengo muchas sonrisas que me completan y limpian mi alma, esas son todas las mujeres de mi familia y... mi amiga._

Sin duda Aurora sabía cómo llenar el alma de Robert, no sentía que solo podía ser su amiga, sin embargo, sentía que podían cambiar muchas cosas.

_Mi hijo, cada vez que lo veo sonreír, le pone más color a mi vida, me dan deseos de seguir viéndolo sonreír... Creo que nunca me detuve a verlo o nunca hice nada para verlo sonreír._

_Y no es malo, disfrútalo que está chico, esos crecen y los extrañamos después._

Una sonrisa salió de sus labios, era muy difícil verlo sonreír.

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_Primaaa._

_Uju, hueles a noche de locura_

_Me duele el cuerpo, un maratón es poco, pero valió la pena._

_Desvergonzada, llamaré a mi tía._

_No, espera que me coma unas cuantas veces más a mi hombre, cuando se enteren, me exigirán que regrese._

Oriana no podía con el descaro de su prima, pero verla por fin feliz, también era feliz ella.

_¿Ya desayunaste?_

_Sí, ¿cómo vas con tu niño?_

_Súper, va mejorando, eso no tiene cura, pero lo ayudará para su crecimiento, solo espero no incomode a nadie nunca._

Tomaba su café y pensaba en su futuro, quería saber más de la vida de Alejandro, de la madre de Axel, pero no se atrevía a preguntar.

_Conozco esa mirada, algo te pasa._

_¿El día que me quedé a dormir en casa del padre de Axel, él llegó ebrio y lo escuché decir Lucero, crees que sea la madre de Axel?_

_Ori, te conozco, no quiero que salgas sufriendo, eres de las que prefiere que los demás estén bien, procurar ser feliz tú, sin lástimas a nadie._

Oriana solo sonrió, Mili, más que prima, era como una hermana, siempre estaba para ella.

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Venezuela

_Se dan cuenta de que Lucca ahora sube fotos a su Instagram?._

Olga, Ofelia, Pris y Orella estaban reunidas en el jardín de la nueva casa de windy, y Priscila cómo siempre informada de todo lo que hacía su hija.

_Y Yo pensando que era la única que sacaba conclusiones, no vieron la última historia?._

Ofelia veía las historias de su hijo y ya no era el seco y escondido lucca.

_Ja, ja,ja, ya decía yo._

_¿Nos creen viejas, anticuadas, acaso creen que no fuimos como ellos?_

No te rías Orella, que nos creen viejas y anticuadas.

_Son dos décadas después, la tecnología no estaba tan metida hasta los huesos._

Windy reía de esas mujeres cincuentonas, viendo las señales de ese par que ya tenían algo.

_Mis tíos ya son novios mamá, encontré tres señales que lo confirman._

Mía Isabella no se quedó atrás en notar las nuevas y sacar de dudas a sus abuelas, quienes se acercaron más a su niña.

_Cuéntalas mi amor_

_ Una: Mi Tío Robert, colocó "Décadas después, son felices.

Dos:" Mi tía Oriana "Y el amor triunfo."

Tres: Suben fotos sonriendo más y la misma historia de un emoji de ojos de corazón.

_Hija, no le envenenes la mente a esas viejas, no dejarán que sean felices._

Mateo veía como estaban acorralando a su hija.

_Están lejos papá, no podrán molestarlos._

_¿Qué no? Ya voy a llamar a Brais, si van a hacer las cosas, que las hagan bien._

_Quien se decía a tu cómo hacer las cosas locas, deja que disfruten un poco, conociendo a Brais, los separa hasta verlos casados._

Orella le quitó el teléfono de las manos y lo volvió a poner en la mesita, seguían viendo las señales hasta aburrirse y cambiar la conversación.

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