Encuentros del destino

Mailyn: Cuando escuché esa voz mi corazón comenzó a latir con fuerza, no quería abrir los ojos, no quería verlo, solo deseaba escuchar su hermosa voz, el hombre que me hablaba me pedía que abriera mis ojos, pero me negaba a hacerlo.

X: Mujer por Dios no hagas una tontería, la vida es dura, pero hermosa, bueno si no abres tus ojos y me vuelves a ver me subiré contigo, si te tiras tendrás que hacerlo conmigo y no solo cometerás suicidio sino también asesinato.

Cuando al momento siento unos brazos que me rodearon, por Dios, está corriente, no para, seguía con mis ojos cerrados, el hombre al momento me volvió a hablar.

X: ¡Por favor bájate sí!, no vez, que si no lo haces soy yo quien caerá al vacío es que padezco de acrofobia.

En ese momento abrí los ojos y vi al hombre más guapo del mundo, en su barbilla tenía un hermoso hoyuelo, sus ojos eran color cielo, pero lo que me mato en ese momento fue su sonrisa, por Dios eran tan seductora.

Ambos nos quedamos viendo a los ojos muy fijamente. Luego la magia se deshizo, ya que ese bombón estuvo a punto de caer.

X: Por favor preciosa bajemos mejor de aquí.

Como negarse a la petición de ese bombón. Cuando estaba en el suelo de la azotea él me volvió a abrazar.

X: Mujer por qué te querías tirar de ahí me pegaste un susto, pensé que no llegaría a tiempo.

Luego él miró mis ojos, ¡mira como los tienes hinchados de tanto llorar!, vamos al cuarto que tengo aquí para prepararte un té.

Mailyn: no te preocupes, yo me puedo marchar.

X: Ni se te ocurra salir de aquí menos así cómo estás primero te vas conmigo, te tomas el té, descansas y cuando yo te vea más tranquila te prometo que te dejo ir.

Mailyn lo observó y le hizo una mirada de desconfianza, pero él a ver su reacción dijo.

X: Y no te preocupes, ¡conmigo estás a salvo! No pretendo aprovecharme de ti.

Mailyn: no es eso, es que en esta ciudad he encontrado personas muy buenas.

X: ¡A si se podría saber de dónde vienes!.

Mailyn: prefiero no hablar de eso.

X: Toma este té te hará muy bien y podrás descansar. No te preocupes, yo estaré aquí velando por tu sueño.

Mailyn: gracias.

Al rato Mailyn se durmió, pero aun en sus sueños lloraba mucho, X no se aguantó las ganas y fue donde estaba ella, con su dedo quito esas lágrimas que tenía en su mejilla, ella sollozaba como un bebé, él la miró y sintió como su corazón se partía, siempre le ha dolido ver a las mujeres llorar, pero con ella ese sentimiento era aún más extraño. No comprendió, pero su instinto le decía que se acostara con ella y la abrazara y así lo hizo, jamás imaginó que él también se quedaría dormido, ambos se sentían tranquilos así como estaban, sus cuerpos eran como ese remedio que te tomas para el dolor y alivia todos tus males.

Ambos durmieron tres horas abrazados, ¡quién se despertó primero fue ella!, pero en vez de asustarse estaba hipnotizada con este hombre, sus labios perfectos y ese hoyuelo en su barbilla, lo hacían verse tan varonil. Su control no pudo más cerro sus ojos y rozó sus labios con los de él, pero él se despertó en ese momento y antes de que Ella alejara sus labios, él le sujetó su cara para poder profundizar su beso notó que ella no tenía experiencia, como dos almas que se encuentran no podían, detenerse sus besos eran tranquilos, pero con mucho deseo, sin darse cuenta Mailyn, ya sé encontraba desnuda, mientras él besaba cada parte de su grueso cuerpo, ella sentía la sensación más maravillosa era la primera vez que su cuerpo era acariciado por un hombre, pero este no era un hombre normal, más bien parecía a un dios griego.

X:  Entre besos y abrazos le susurró, ¡hermosa que me has hecho, creo que llegaste para confundirme!.

Mailyn al escucharlo se detuvo y con su voz toda agitada le pregunto: ¡dime qué no eres casado!.

X: ¡No hermosa!, no soy casado y si lo estuviera tenlo por seguro que no estaría en esta situación contigo.

Mailyn: si perder el tiempo lo volvió a besar, le encantaba oír de los labios de él la palabra hermosa, tenía muchos años de no escuchar a nadie llamarla así, de repente se detuvo y comenzó de nuevo a llorar.

X: Hermosa por qué lloras, ya te dije que no estoy casado, ¡hice algo que te molesto!.

Mailyn: Perdona es que tengo como veinte años de que nadie me llama así.

X: ¡Así cómo!

Mailyn: ¡hermosa!- la única persona que me llamaba así era mi madrina y ella falleció cuando tenía nueve años.

X: No entiendo, yo te veo que eres una mujer muy bella.

Mailyn: creo que tú y mi amigo el cura están ciegos a caso no vez lo gorda que estoy peso como el doble que tú.

-X antes de que ella siguiera hablando, la volvió a besar, pero cuando se detenía le iba diciendo, yo lo que veo... al frente de mí... es una hermosa mujer que con todos estos rollitos que tienes me enciende como nunca antes nadie lo había hecho.

Mailyn lo miraba, la verdad él le producía seguridad, deseo y podría decirse que amor, pero era muy pronto para hablar de eso.

Ambos no se detuvieron, él ya la tenía desnuda, con sus yemas tocaba todo su cuerpo, si ella tenía mucho sobrepeso, pero a él eso no le importó más bien eso le encantaba.

Luego él se fue despojando de su ropa, quedando totalmente desnudo, ambos parecían dos adolescentes explorando su cuerpo por primera vez, claro que estaban como si fueran adolescentes, ya que esa era la primera vez de ambos, ninguno de los dos había estado nunca con nadie a pesar de ser tan adultos. C

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Hola amigas disculpen por no usar el nombre del personaje y referirme a él como “X” pero lo hago con el fin de que quiero que me digan cuál de todos los personajes de la gordita virgen 2 me hago referencia, espero sus comentarios y pronto sabrán a quién me refiero. BESOS Y ABRAZOS 😘😘😘

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