Estas embarazada

Sarah se quedó sola con Mailyn. No podía esperar más y la despertó.

Sarah: hermosa, como te sientes hoy.

Mailyn: bien gracias. Tengo mucha pena con usted por lo que dije de su esposo. Puedo garantizar que no fue con mala intención.

Sarah: tranquila, hermosa, yo sé el bombón que tengo por esposo, no me lo tienes que decir. Dime Mailyn, qué edad tienes.

Mailyn: yo treinta y uno.

Sarah: por qué una mujer como tú viniste a Chicago.

Mailyn: no se tome el primer tren que vi y subí, no sabía a donde me llevaría.

Sarah: Mailyn tienes que confiar en mí y contarme todo te prometo que si no quieres Aarón no sabrá de lo que hablamos aquí.

Mailyn asintió con la cabeza, luego le dijo: que quieres saber.

Sarah: quiero que me cuentes cómo fue tu vida desde niña.

Mailyn le comenzó a redactar toda su vida paso a paso los maltratos que vivió, la forma como le pegaban, que ella siempre fue un estorbo para la familia, que nunca fueron o la llevaron a sus graduaciones, que después en su adolescencia le tocó ir sola a todas sus actividades. Que incluso las maestras le hacían bullying, por qué siempre la escogían de animales y objetos grandes, que solo sintió amor de parte de su madrina, pero que ella murió y desde ese entonces quedo sola.

Sarah: sentía un nudo en la garganta, luego le pregunto: ¿y tu adolescencia?.

Ella le contó, todo el sufrimiento que vivió le contó sobre su amiga y que ella desde la adolescencia ha tratado de acabar con su vida, que nunca la habían llevado con un especialista, que en la universidad, lo intento muchas veces más, que hasta consumió drogas, para poder olvidar, aunque no le ayudaron en nada, que ella luego las dejo, qué sola logro superar todas sus adicciones, que estudio y fue la mejor de la universidad, aunque sus padres nunca valoraron su esfuerzo.

Sarah: Le pidió disculpas a la chica y salió un momento de la habitación y se puso a llorar, como era posible que Maylin, haya sufrido tanto maltrato y que nadie le ayudará, se sentía frustrada de pensar, que aún se dé ese tipo de cosas en la sociedad, luego se limpió sus lágrimas, saco de su bolso polvos para la cara y así tapo el rastro de lágrimas que habían manchado su cara. Sarah ingresó de nuevo al cuarto, perdón me entro una llamada dime Mailyn, si viviste tanto maltrato por qué no te fuiste de ese lugar.

Mailyn: creí que eso era amor, cuando terminé la universidad cambiaron un tiempo, creí que ya me querían; sin embargo, resulta que era para casarme con un viejo asqueroso, tenía más de ochenta años y se notaba que era un morboso, desde ese día comencé a decir que no, sabe que se siente que un anciano asqueroso se acaricie esa parte de ahí y te saque la lengua según él para excitarme, no solo lo hacía conmigo más de una vez lo vi hacer lo mismo con niñas de once años. Desde ese día todo cambio, para mal mi padre empezó a llegar tarde, mi madre siempre me culpaba, cuando iba a consolarla me pegaba muy fuerte. Así estuve un año. En las últimas ocasiones, cuando mi madre lloraba, yo simulaba estar dormida y no salí a verla, ya no quería que me pegara más, el último día que estuve con ellos, mi mamá me achacó que todo era por mi culpa, que mi padre había cambiado porque yo no accedía casarme con ese viejo asqueroso. Salí de mi casa antes que me pegara de nuevo me fui y los dejé solos. Llegué tan temprano al trabajo que aún no había salido el sol, pero cuando llegue a la oficina de mi padre lo encontré acariciando el miembro de otro hombre y se besaban, No estaban solos, ya que había mujeres acompañándolos, lo que parecía una especie de orgía. Me dio tanto asco que salí corriendo, tomé un tren que me trajo hasta aquí.

Sabe aquí he encontrado gente muy buena, primero conocí a Aarón, luego a mi ángel y por último a todos ustedes que se han convertido en una especie de familia para mí. Aunque creo que ustedes ya no querrán tener una loca suicida en su casa.

Sarah: Mailyn lo que hiciste es muy grave, es, obvió que ya no podrás ser la cuidadora de los abuelos, ni tampoco te tiraremos a la calle, Mailyn lo que hiciste no solo te puso a ti en riesgo. Ahora hay alguien más que también se encuentra en peligro.

Mailyn, no me digas que los abuelos se pusieron mal al verme, comenzó a llorar y a decir, perdóname, yo no quería lastimar a nadie, mi madre me vio, me dijo que ella no era mi mamá, que era hija de una drogadicta, que regaló a mi hermana gemela, que me debería de morir, perdón no aguante más, no pensé mis consecuencias yo no quería hacerles daño, soy una mala persona que no debería de existir.

Sarah: ya hermosa, tranquila, los abuelos no vieron nada, gracias a Dios, mi hermana Eva, los había llevado de paseo, los únicos que estaban en la casa eran mis padres, aunque el que te encontró fue Aarón.

Mailyn aún con lágrimas en los ojos, dijo: me dijiste que puse en riesgo a alguien más.

Sarah: Mailyn le prometí a Aarón que esperaría a que llegará para decirte esto, pero tú no puedes esperar, tomó aire y le dijo: Estás embarazada y tú niveles en la sangre dicen que son más de uno y como me acabas de contar que eres gemela sospecho que tú tienes dos bebés en esa pancita.

Mailyn abrió muy grandes los ojos y con voz de asombro le dijo: embarazada de mi ángel y pueden ser gemelos.

Sarah: Mailyn porque le dijiste a mi hermano que nunca habías tenido novio y ahora resulta que estás embarazada.

Mailyn: el día que conocí a Aarón, luego conocí a mi ángel, él me salvó de tirarme de la azotea.

Sarah: y el muy hijo de su madre se aprovechó de ti.

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