Capitulo 14

Emily y Andrew estaban emocionados por descubrir el sexo de su bebé. Decidieron ir juntos a la cita del ultrasonido para recibir la noticia. Emily estaba tan emocionada que apenas podía contener su alegría mientras esperaban en la sala de espera.

Finalmente, llegó el momento de la cita y Emily se acostó en la camilla mientras el técnico comenzaba el examen. Andrew estaba a su lado, sosteniendo su mano y mirando fijamente la pantalla del ultrasonido.

Después de unos minutos, el técnico anunció: "¡Es un niño!" Emily y Andrew se miraron y sonrieron, felices de tener un hijo varón en camino. Emily se emocionó tanto que comenzó a llorar de felicidad. Andrew la abrazó y le susurró al oído que todo estaría bien.

Después de la cita, Emily y Andrew decidieron ir de compras para comprar ropa para su hijo. Visitaron varias tiendas de ropa para bebés y se emocionaron al ver toda la ropa adorable y los juguetes.

Finalmente, encontraron una pequeña boutique de ropa para bebés y entraron emocionados. Había ropa hermosa en todos los colores y diseños imaginables. Emily se detuvo en una sección con trajes de animales y se enamoró de un conjunto de león.

"¡Mira esto!", dijo emocionada, sosteniendo el conjunto hacia Andrew. "Es perfecto para nuestro pequeño león". Andrew sonrió y estuvo de acuerdo en que era una compra perfecta.

Continuaron comprando, eligiendo ropa suave y cómoda para su bebé. Emily estaba encantada de imaginar a su pequeño usando todo lo que habían comprado.

Finalmente, terminaron de comprar y se dirigieron a casa con sus nuevas compras. Emily estaba cansada después de un día lleno de emociones y decidió tomar una siesta. Andrew la cubrió con una manta y la besó en la frente antes de salir de la habitación.

Mientras Emily dormía, Andrew decidió comenzar a armar la cuna para su hijo. Siguió las instrucciones cuidadosamente y montó cada pieza con esmero. Finalmente, la cuna estuvo lista y Andrew sonrió satisfecho con su trabajo.

Cuando Emily despertó, encontró la cuna lista y se emocionó de ver que su esposo había trabajado tanto en ella. Le agradeció y ambos se sentaron en la habitación, imaginando cómo se vería su bebé durmiendo en la cuna.

Esa noche, Emily y Andrew se acurrucaron juntos en la cama, hablando sobre su futuro y su hijo en camino. Estaban emocionados por todo lo que vendría y decidieron que trabajarían juntos para asegurarse de que su hijo tuviera todo lo que necesitaba.

Con esa sensación de seguridad, ambos se durmieron profundamente, abrazados y felices por la vida que estaban construyendo juntos.

Emily se despertó a las 3 de la mañana sintiendo un dolor punzante en la parte inferior de su abdomen. No estaba segura de lo que estaba sucediendo al principio, pero cuando el dolor persistió, se dio cuenta de que podría ser el momento de dar a luz.

Despertó a Andrew de inmediato y juntos prepararon las cosas que habían empacado para el hospital. Llamaron a un taxi y Emily se sentó en el asiento trasero, tratando de controlar el dolor mientras su esposo la tranquilizaba.

Llegaron al hospital y Emily fue llevada a la sala de parto. La enfermera le preguntó si había tomado una clase de parto y Emily negó con la cabeza. "No te preocupes", dijo la enfermera, "te guiaremos a través de todo".

Las contracciones se hicieron más fuertes y Emily comenzó a sentir una gran presión. La enfermera la ayudó a empujar y, finalmente, después de lo que pareció una eternidad, el bebé nació.

"¡Es un niño!", anunció la enfermera, colocando al recién nacido en los brazos de Emily. Andrew estaba emocionado y tomó fotos del bebé mientras la enfermera lo limpiaba.

Emily estaba agotada, pero no podía dejar de mirar a su hijo. Era hermoso, con la piel suave y los ojos cerrados, parecía tan pacífico.

Andrew le preguntó a Emily cómo quería llamar al bebé y ella supo de inmediato cuál era su nombre: William. Era un nombre que siempre había amado y que sonaba perfecto para su hijo.

Los médicos dieron a Emily y William un chequeo rápido y confirmaron que estaban ambos saludables. La enfermera ayudó a Emily a dar el primer baño de su hijo y lo vistió con la ropa que habían comprado juntos.

Finalmente, la familia fue trasladada a una habitación en el hospital donde Emily y William podrían descansar y recuperarse juntos. Andrew estaba emocionado de comenzar esta nueva etapa de su vida y no podía esperar a llevar a su hijo a casa.

Emily estaba enamorada de su hijo y no podía creer que finalmente estaba aquí. Se sintió agradecida por tener a Andrew a su lado durante todo el proceso y por el amor y apoyo que le había brindado.

Se sintió abrumada por la responsabilidad de ser madre, pero sabía que tenía a su esposo y a su familia para ayudarla en el camino. Miró a su pequeño hijo durmiendo en sus brazos y supo que no importaba cuánto trabajo y sacrificio fuera necesario, ella siempre estaría allí para él.

Continuara...

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