Capitulo 9- primer encuentro

-señor rusco habla Toribio

-espero que tu jefe haya disfrutado mi dulce sorpresa.

-de eso quería hablarle señor y creo que no le gustara lo que le diré.

-a que te refieres Toribio y habla de una puta vez.

-cuando el ceo se enteró que no podía adquirir ninguno de los terrenos casi pierde los estribos y arremetió contra todos nosotros, hasta ese punto todo iba como usted lo planeo, hasta.......

-hasta que Toribio

-hasta que la estúpida y metiche de Clara entro con la información de los terrenos de las viejas bodegas.

-y eso de que le sirve Toribio, ni yo siendo quien soy he podido dar con esas ratas de alcantarilla para terminar lo que empecé hace más de diez años y hacerme de esas tierras, Crees que un impertinente mocoso lo hará?

-es que ese es el punto, la muy perra de clara no sé a quién recurrió, pero le suministró al ceo un número de teléfono y le pidieron explícitamente que debía ser el quien se comunicara con ellos.

-pero qué demonios me estás diciendo, esto no puede ser, l Vladimir Rusco prevzoshel zhenshinu(yo Vladimir Rusco superado por una mujer)Jajajaja desde que tengo uso de razón nunca me había pasado tal desfachatez.

De un momento a otro se hizo el silencio en la línea y luego se escucharon los gritos de rusco acompañados de sonidos de objetos romperse al ser lanzados, al desahogar su enojo regreso a la línea.

-y que paso después.

-por órdenes del presidente estamos en receso, mientras él hace la llamada.

-avísame de lo que acontezca después, no omitas ningún detalle y otra cosa Toribio mándame toda la información de la zorra que se atrevió a desafiarme.

- como ordene señor Rusco.

En la habitación Lissy ya había engullido toda la comida que le llevo la camarera y salió por los alrededores a conocer un poco más el espléndido hotel donde estaba hospedada como ella estaba en el cuarto piso quiso empezar por ahí, mientras estaba en su pequeño tour por uno de los grandes ventanales que daban a la callé, pero en otro punto diferente observo una minivan igual a la que vio horas antes y los sujetos con la misma vestidura.

-hasta pareciese que fueran mercenarios, a quién esperaran?

-y eso a ti que te importa, se reprendió en su mente.

Luego dejo ese tema atrás para seguir explorando, pero esta vez bajo en el ascensor hasta el área del restaurante, camino varios metros hasta encontrase con una visión maravillosa, el lugar era muy espacioso, el techo de mármol decorado con gigantes lámparas arañas de cristal, en las paredes colgaban cuadros que se imaginaba ella, debían ser pinturas de artistas muy famosos, aunque el arte no era lo de ella algo podía comprender; las mesas hechas en huanghuali una madera muy fina cultivada en los Alpes chinos, nada a su paso dejo de ser admirado por la chica. Cansada de ver tantas maravillas decidió regresar a su habitación, pero en una esquina del pasillo que llevaba al ascensor también la lleno de curiosidad, se acercó de sigilo para curiosear más de cerca y miro a dos hombres casi hablando en susurros, uno vestía con traje de negocios y el otro tenía la misma vestimenta de los tipos de la calle.

-y yo que pensé que eran un par de amantes dándose cariñitos

Cuando esta por dar la vuelta, escuchó algo claro y audible que le hizo saltar a cien el corazón y una punzada de dolor llego a su cabeza y extrañamente y como si sus pies se mandaran solos salió corriendo con su mente solo reproduciendo.

-Rusco, Rusco, Rusco, Rusco......

En ese instante la puerta del ascensor se abrió y Lissy la vio como su única salvación, era tanto su apuro por entrar que choco con una pared humana que al sentir el impacto arrugo el entrecejo y al mirar hacia abajo observo una pequeña figura sin moverse, Angus exasperado por ver a la mujercita arrojarse a sus brazos y sin querer moverse la tomo fuertemente por los hombros y la zarandeó mientras le hablaba.

-crees que, arrojándote a mis brazos de esa forma, conseguirías algo de mí?, tan estúpida y crédula como todas las que se quieren acercarseme

Le decía mordiéndose los dientes al ella no decir nada, por ende, la apretó con más fuerza y la siguió zarandeando, en ese instante el dolor que sintió la hizo reaccionar y es ahí donde cae en cuenta que tropezó con alguien y que fue completamente su culpa, aunque no le gusto la manera en que el hombre la estaba tratando, decidió disculparse, Lissy levanto la cabeza para mirar a la cara aquel hombre que la sacudía y le decía que sabe que cosas.

-señor primero que todo me disculpo, sé que fue mi error y segundo me puede soltar que me lastima.

Ahora fue el turno de Angus de quedar paralizado, dejo de sacudirla y palabra ya no pudo salir de su boca. Cuando la chica levanto la cara y sus miradas se cruzaron, él pudo ver esos ojos grisáceos que por tantos años había extrañado y que el tiempo no pudo borrar de su memoria, su mirada tan pura que le penetraba el alma, misma alma que murió en aquel fatídico día y se convirtió en una tumba congelada sin que el mínimo rayo de sol la derritiera, de pronto se sintió levantando la mano y dirigirla a su lacio cabello rojo como fuego tomando un mechón entre sus largos y delgados dedos para llevarlo detrás de sus pequeñas orejas luego de manera delicada con el dorso de su mano acaricio su rosada mejilla y por el contacto sintió cuan suave era su delicada piel, pero al tocarla también pudo sentir una corriente eléctrica que le recorrió cada fibra de su cuerpo deteniéndose en su frio corazón haciendo que este diera un salto, mientras Angus estaba sumergido en un estado de inconciencia, Lissy empezó a entrar en pánico por la extraña actitud del desconocido.

No entendía, que primero la insultaba y luego de la nada le da esa mirada que transmitía tantas emociones indescriptibles y para colmo le acaricio el cabello y de paso las mejillas y cuando estaba por darle una merecida paliza por manosearla, su cuerpo fue arrojado hacia atrás cayendo de nalgas en la dura y fría baldosa. Al momento de Angus sentir ese salto en su corazón lo hizo reaccionar y en su mente no hacía más que maldecirse.

-maldita seas Angus Li, en que carajos estabas pensando, como pudisteis confundir a esta estúpida mocosa con la bella Aurora, mancillas su recuerdo. Deja de mirarla como si estuviera viva, porque no lo está, está muerta.

Se reprendía Angus internamente, pero no podía negar que algo en lo más profundo de su ser anhelaba abrazarla y le pedía a gritos que no la soltara, pero la razón pudo más, y termino por empujarla haciendo que esta cayera al suelo. Que tan arrepentido se sentiría él, tiempo después por no dejarse llevar por sus sentimientos y tratarla en la forma en que lo hizo.

Mientras eso pasaba entre esas dos almas que estaban conectadas sin ellos saberlo, el asistente que presenciaba todo desde la primera fila, estaba en un mar de confusión. Primero ve al señor Li tratar a la chiquilla fríamente y era normal que el ceo reaccionara así, no era la primera vez que trataba mal a una mujer por hacer tal acción, luego y sin poder creerlo que hasta se quitó los lentes y los limpio vio el lado tierno y delicado del ceo.

-Dabir Tan qué es lo que ven mis ojos esto no puede ser cierto, debo de estar soñando; espera, espera, veo en los ojos del jefe ¡amor y anhelo!

Abre los ojos como platos ante tal descubrimiento, pero aún tratando de descubrir si era cierto lo que vio en los ojos de Angus este sin más arrojó a la chica al suelo.

-ya sabía yo que mis ojos me traicionaban.

Termino por concluir Dabir.

Lissy con el trasero adolorido por el repentino impacto se levantó de un salto y camino a pasos firmes hacia Angus cuando estuvo cara a cara le reprochó el comportamiento anterior

-maldita escoria, pedazo de animal, pervertido, miserable, inhumano .

Y con eso un inesperado derechazo aterrizó en el hermoso rostro de Angus, que ante el hecho, su rostro se le oscureció y la sujeto por la mano que aún estaba en el aire, arrinconándola con la pared y sujetando la otra mano con la que intento defenderse

-te arrojas a mis brazos, me insultas y te atreviste a golpearme mocosa insolente, sabes lo que le pasó al último que intento hacer lo mismo.

-no y ni me interesa saberlo y suéltame si no quiere que le vaya peor.

-y para colmo me amenazas, escuchaste Dabir.

-si señor.

-que debería hacer con ella Dabir

-lo que usted quiera señor

-ahora sí que está enfurecido el jefe pobre señorita no sabe con quién se metió, que lástima tan hermosa y no podrá disfrutar la vida.

Pensaba Dabir del final tan lamentablemente que le esperaba a Lissy, lo que no sabían es que la chica no era fácil de tratar.

-te cortaré la mano con la que me golpeaste.

Lissy sabía que el hombre en frente era muy superior en tamaño y fuerza y que un combate directo la pondría en desventaja y no se iba a arriesgar, por eso se acordó lo que le enseñó Shara.

-cuando te enfrentes cuerpo a cuerpo con un oponente superior a ti, analízalo, nunca le demuestres miedo y descubre su punto débil y cuando lo hayas hecho sin más atácalo y derribalo antes que el lo haga contigo.

La chica empezó a poner en práctica las enseñanzas de su tía y lo miro desafiante a los ojos.

-no me temes, pues debería..ay

Justo en las huevas le propinó un rodillazo con todas las fuerzas que su pierna le permitió.

Ante tal acto Dabir quedó en shock viendo cómo su jefe caía de rodillas al suelo sosteniendo a su amigo golpeado y la cara arrugada pero de dolor; nunca en todos los años de trabajar con Angus lo vio derrotado y por si fuera poco lo hizo una chiquilla, los gritos ensordecedores del joven lo trajeron de vuelta.

-atrápala Dabir y mándala a un burdel en Bangladesh, que esperas síguela.

Ordenó el adolorido Angus al asistente quien miro a la chica correr por la entrada de las escaleras y al llegar al pie de estas se detuvo y les saco la lengua a manera de burla.

-carajos Dabir atrápala y no la dejes escapar o reduciré tu bono.

Dabir corrió detrás de Lissy y aunque era un buen corredor, Lissy tenía pies de gacela y por mas que quiso no pudo alcanzarla y se le perdió de vista. Estando en el piso tres tomo el ascensor para enfrentarse con la ira del jefe por fallar.

-ves despidiéndote de tú merecido bono, si solo el jefe hubiese aceptado las sinceras disculpa de la señorita yo no estaría pagando las consecuencias y él, apunto de quedarse sin herederos.