Capítulo 16 – ¿Qué te pasa Angus?

Angus veía la escena con envidia, quería ser él quien estuviera consolándola y el no entender el sentimiento que brotaba de su interior al ver que otro la tocaba le irritaba, solo podía seguir escuchándolos hablar como si nadie más existiera.

-cierto que lo hice bien.

-eres la mejor de eso no hay dudas

-querían separarme de ti y eso no lo podía permitir, no no no, por eso los mate a todos, no me culpas verdad .

-no te culpo.

Norris hablo con la voz quebrantada y las lágrimas quisieron salir de sus ojos, pero sabía que debía dejar que ella se desahogara aunque otros estuvieran viendo su fragilidad, siempre guardo sus emociones para si y sólo las exponía delante de él, pero esta vez fue diferente.

-en verdad no me culpas, no vas a dejar de quererme.

-jamás lo haría .

Angus vio que la chiquilla comenzó a temblar y aunque no sabía si era por el frío, se quitó la gabardina y camino con elegancia hacia ellos y de manera delicada se la puso en los hombros, ella al sentir el calor de la gabardina levantó la mirada encontrándose con la de él y le sonrió de manera amable. Esa sonrisa tan hermosa que le formó unos hoyuelos en las mejillas le sacudió el corazón violentamente.

-carajos Angus que es lo que te pasa, cuando tienes a esta chiquilla en frente.

Se preguntaba el CEO internamente.

Mientras que el asistente pensaba

-nunca he visto que el señor Li fuese tan amable con una mujer y menos con la que casi lo deja sin hijos.

Sin dejar de mirarse la chica le hablo como si su voz fuera la de una musa.

-gracias.

Lissy desvío la mirada hacia Norris y lo miro con ternura, igual hizo él.

-Norris estoy cansada, ya podemos irnos a casa?

-Si pequeña pronto estaremos en casa.

Norris se levantó de la posición en la que estaba y la tomo entre sus musculosos brazos cargándola en posición de princesa como si ella fuese una muñequita de porcelana.

Lissy al sentirse segura en los brazos de Norris, se acomodó para acucurrucarse en su escultural pecho y al instante su respiración antes agitada se estabilizó cayendo en los brazos de Morfeo.

-celoso, no conozco esa palabra; entonces porque mis entrañas se revuelven como un torbellino en agua salada. porque?, no entiendo. Debe ser porque me recuerda a ella, si eso debe ser, no hay otra explicación.

-pobre señor Li por primera vez hay una mujer que le llama la atención y le ganan la delantera.

Los pensamientos de los hombres fueron interrumpidos por el sonido de llantas frenando en seco, todos los sobrevivientes levantaron la guardia creyendo que era el enemigo, menos Norris que supo por las insignias en las camionetas que eran de los suyos.

-comandante lamento llegar tarde pero deliberadamente bloquearon el camino.

-yo no pedí refuerzos, como es que están aquí

-comandante solo sé que el sargento me llamo a la base y nos ordenó que viniéramos a reforzarlo porque la misión se había complicado.

-entiendo, hay muchos heridos en el edificio del frente, envié a alguien que apoye al mayor que está con ellos y mande al lado este a otro grupo por los hombres caídos.

La tristeza se hacía notar en la voz de Norris, aún no podía creer que la misión de proteger a alguien, se convirtiera en un sepulcro de muerte donde perdió a casi la mitad de su tropa, y una de las mujeres que más amaba en la vida estaba manchada con sangre maldita por salvarlo a él, por no ver la tristeza de unos padres al perder un hijo. Cuan decidida había sido que en la lucha perdió su alma.

Norris acostó a la durmiente joven en la parte trasera de uno de los autos blindados, para luego correr hacia un montón de escombros y patear un objeto que salió volando, acto seguido soltó a todo pulmón un grito que había estado ahogando desde que vio el estado tan deplorable de su pequeña.

-aaaaaah Norris Lan eres un maldito miserable inservible.

Luego de expresar a gritos su frustración se dejó caer de rodillas en el suelo dando golpes a este.

Nunca antes en la fortaleza hubo ojo alguno que viera a Norris de esa manera, ni con todo el duro entrenamiento siquiera se quejó, ni con las palizas que Shara le daba lloraba. Todos los presentes conocían a un comandante muy tranquilo hasta en situaciones peligrosas, pero esa noche solo observaban a un joven desasosegado, pero nadie dijo nada, solo Micaela tuvo el valor de acercársele y darle un fuerte apretón en el hombro y adicional le suministro una botella de agua, la cual el joven tomo entre sus manos para abrirla y beber un gran sorbo de ella, colocándose en pie después de hacerlo.

-Mike, ¿cuantos hombres perdimos?

-del grupo A dos, hay uno mal herido y los otros dos vivirán, gracias a la intervención oportuna de Lissy.

-como pudo atreverse a tanto.

-eso es lo de menos comandante, lo importante es que siga su vida con normalidad y sin secuelas.

-tienes razón hay que mirar hacia el mañana. Continúa.

-de los hombres que estaban con usted, perecieron tres, él sobreviviente en unos meses estará como nuevo.

-hay quedar aviso a la fortaleza para que se encarguen de informarle a las familias del deceso. Y los hombres que custodiaban al pez?

-el guardaespaldas murió y el soldado tiene pronóstico reservado, en estos momentos estamos esperando los helicópteros para trasladar a los heridos.

-Mike solicita helicópteros de rescate, partiremos en ellos hasta la fortaleza

-y que hay del pez.

-solicita un MD, que lo lleve directamente al país Drost, prometimos protegerlo y enviarlo a salvo; y eso es justo lo que haremos.

-comandante puedo hacerle una pregunta y disculpe mi intromisión, porque Lissy se comportó de esa manera, eso solo lo hacen las personas con algún tipo de trauma y que son vengativas.

-es una larga historia, que cuando todo esto pase te contaré.

-entiendo señor, iré hacer lo que me ordeno.

La rubia se comunicó con la fortaleza y le informo de los hechos, omitiendo el estado de la chica, cuando los esposos Lan preguntaron por sus hijos, ella solo les dijo que estaban bien. De la fortaleza autorizaron el pedido de Norris sin ningún inconveniente.

Por otro lado Angus por un impulso del corazón, aprovechando que Norris se apartó de la chiquilla se acerco al auto donde estaba durmiendo la chica, abrió la puerta con sumo cuidado y se sentó del lado de la cabeza, saco un fino pañuelo de seda y lo empapó de agua y delicadamente limpio la sangre de la cara y manos de Lissy, La chica dormía tan profundamente que no sintió el proceso de limpieza, pero si se movió para ajustar la postura, quedando boca arriba, tal movimiento provocó que la gabardina se abriera y dejara su dorso expuesto al frío.

Angus contempló la figura de la durmiente y su mente reprodujo la imagen de una redonda carita, que si la comparaba con la que tenía frente a él, encontraría muchas similitudes; empezando por el color peculiar de su cabello y de sus ojos. Sacudiendo esas absurdas ideas de su cabeza decidió abrocharle la gabardina y justo su mirada se posó en el lado derecho de su ombligo y lo que vio lo dejo petrificado.