—¿Me engañaste con otra y quieres que actúe como si nada? —Miré a los dos, incrédula, mientras intentaba permanecer tranquila y soportar el dolor desgarrador que sentía—. ¿Cuándo empezaron a salir?
Ivan dudó por unos segundos antes de responderme.
—No tiene sentido contártelo; ya sabes lo que pasó. Por más que haya pensado en cómo decírtelo, ahora que sabes la verdad, no quiero dar explicaciones. Quiero divorciarme. El niño y el dinero son tuyos, pero la empresa es mía.
La crueldad de sus palabras se sintió como otra puñalada al corazón. No podía creer que hubiera cambiado de opinión así como así.
—Pero hace una semana dijiste que podía quedarme con la mitad de las acciones de la empresa. Ahora solo tengo el trece por ciento y tú, el treinta y uno por ciento. Si me quedara con la mitad, deberías darme el nueve por ciento de tus acciones —recriminé con los ojos llenos de lágrimas. Sin embargo, intenté contenerme, puesto que no quería llorar en ese momento, sobre todo enfrente de Morley.
—Durante la semana hablé con alguien para que hiciera una valoración de los bienes. Cuando fundamos la empresa, yo era el que desarrollaba la tecnología mientras que tú la administrabas y buscabas el capital de riesgo. La agencia evaluadora dijo que puedo quedarme con el setenta por ciento de las acciones y tú, con el treinta por ciento. Como nos vamos a divorciar, quiero recuperar tus acciones y darte las ganancias en retroactivo. No tendrás ningún problema con la comida y vivirás una vida acaudalada —explicó él. Lo que dijo me sorprendió muchísimo. Yo no había hecho nada por una semana para darle tiempo, pues estaba esperando que se disculpara conmigo después de que lo pensara con detenimiento; además, no quería divorciarme por el bien de Jesse. Pero, por el contrario, Ivan se había ocupado de la división de bienes—. Aquí están los papeles de divorcio. Échales un vistazo y, si no tienes objeciones, fírmalos. —Luego, le pidió a Morley que sacara los documentos de su bolso y me los pasara.
—Ella fue quien escribió los papeles en tu lugar, ¿no? ¿También fue la que averiguó sobre nuestros bienes? —Tomé los documentos sin mirarlos y los arrojé sobre la mesa. Dándole un golpe a la silla, Ivan me pidió que leyera el acuerdo de divorcio. Aunque ansiaba irme, también quería saber qué tan cruel podía ser mi esposo, así que contuve las lágrimas y recogí los papeles. Estaba detallado que podía quedarme con la custodia de Jesse, al igual que con el dinero y la casa, pero quedaba desligada del resto de las cosas. Él había planeado el resto de mi vida: me había dado un hijo al que nunca iba a renunciar y un poco de dinero para mantenernos a ambos—. No quiero divorciarme. Si ustedes dos quieren estar juntos, entonces pueden hacerlo. —Guardé la documentación y miré a Morley—. Pero, mientras sigamos casados, tú siempre serás la mujer que me está robando a mi marido. Nunca serás reconocida por los demás y tu bebito siempre será un pequeño bastardo.
El rostro de la chica se transformó de inmediato.
—¿Cómo sabe que estoy embarazada?
—No solo sé eso, sino que también tengo el número de teléfono de tu padre y ya le conté todo sobre este asunto. No sé si estará tan enfurecido como para que lo envíen al hospital debido a su hipertensión después de haber recibido esa fotografía. Me gustaría saber si él estuviera internado o hubiera muerto, ¿te sentirías culpable? —Dicho eso, abrí la puerta de la sala de conferencias y me fui. Desde el pasillo, escuché a Morley maldecir, seguido del ruido de una taza rompiéndose en mil pedazos.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 115 Episodes
Comments
esterlaveglia
qué pedazo de hdlgp.....ni siquiera le interesa el hijo que tienen 😳😱😨👿
2024-09-04
1
Deicy Ramirez
asi me gusta que no dejes como una idiota a la mujer que sea fuerte como lo somos todas a la hora de afrontar las cosas
2023-07-25
3
mimar silva
jojojo!!! increíble
2023-07-10
0