De Prostituta A CEO. Las Vueltas Que Da La Vida. Con Una Horrible Portada

🗨️ Los niños llegaron cansados después de jugar todo el día en la playa, Cameron lleva a Guillermo, yo llevo a Frank. Lo estoy dejando en su cama cuando me dice entre dormido.

— Mamá, ahora que llego papá, podemos tener una hermanita, mejor dicho, dos hermanitas.

—Si mi vida, lo hablaré con tu padre.

—Él estará feliz mamá, con Guillermo lo convenceremos.

—Duerme de una vez.

🗨️ Salgo del cuarto, estoy enfadada, voy renegando, bajo las escaleras y voy a la cocina, tomo un vaso de agua y sigo renegando, estoy tan concentrada que no veo a Cameron en la sala jugando con su celular.

—¿Qué tanto reniegas, que te tiene disgustada?

🗨️ Intenta tomarme de la mano y lo esquivo.

—¡Huy! Estás furiosa, te ves hermosa cuando te enojas.

—¿Qué le dijiste a mis hijos?

—¿Así que es conmigo el enojo? A ver siéntate vamos a dialogar.

¿Qué pasó? Pero antes de contestarme, respira y cuenta hasta diez o hasta cien, cuando te calmes me cuentas.

🗨️Se acuesta en mis piernas y continúa con su juego. No sé por qué le hago caso, empiezo a contar. Me siento como una idiota me doy por vencida y sonrió

—Ahora si cuéntame que fue lo que pasó.

—Frank me dijo que si ahora que tú llegaste, podemos darle no una sino dos hermanitas y que tú estabas de acuerdo.

🗨️ Respiro profundo, estoy seguro de que está será una larga charla.

—Bueno primero, los de la idea fueron ellos, segundo yo estoy de acuerdo, claro solo si tú quiere, yo no veo ningún inconveniente, eso sí, les dije que primero tenía que hablar contigo y sería después de que nos casemos.

🗨️ Esto último me tomo de sorpresa.

— ¿Casarnos?

—Sí, no me digas que no lo has pensado.

— En algún momento, pero ahora no sé qué creer.

—Creíste que nunca más nuestros caminos se cruzarían, lo entiendo, pero ahora estoy aquí.

—Eso tendremos que hablarlo, tú no sabes nada de mí, yo no se nada de ti, no te niego que siento algo por ti, pero aún no le puedo dar un nombre.

Tú te irás en unos días y aún tenemos mucho por asimilar, no creo que estés dispuesto a dejar de ser un playboy, así de repente y lo que menos quiero es que te sientas obligado por los niños.

—Sé más de ti de lo que crees, tu madre me ha contado algunas cosas, mi tío otro tanto y tú eres lo que reflejas, para mí sería un honor si decides ser mi compañera de vida.

Te quiero desde esa noche, no sabes cuanto te busque.

En cuanto a mí, pues si he sido un hombre deseado y estuve con muchas mujeres después de ti, pero ninguna me dio la satisfacción que me diste tú.

Mi mundo cambió esa mañana que nos despedimos, me arrepentí muchas veces de haberte dejado ir.

—Solo quiero saber algo.

—Dime.

—Tú llegaste a sentir algo por mi tío.

—Sí.

🗨️ La expresión de su rostro cambió y se volvió a internar en el celular.

Le quité el celular de la mano y le dije con calma

—¿Me dejas terminar?

🗨️ Él se sentó y me miró a los ojos.

—Te escucho.

—Tu tío fue mi primer caballero, desde que entres la habitación fue muy amable conmigo, hablamos de muchas cosas, para él, yo era una chiquilla, una niña, estuve como su acompañante por diez días, pero únicamente tuvimos sexo el primer día en el momento en que nos conocimos y en la noche, él pagó por su atención y me dio muchos regalos, después de eso no volvió a tocarme.

Me decía que se sentía mal, que me veía como una hija, se convirtió en mi protector, cada que estaba a su lado recordaba a mi padre, la forma como me aconsejaba y me apoyaba. Yo adoro a tu tío, es más que un amigo, es un padre que estuvo conmigo cada vez que caía para levantarme.

Él pagó el trasplante de mi madre, aunque de su boca nunca salió una palabra para que dejara ese trabajo, sabía que anhelaba que me retirara de eso, cuando lo hice note la felicidad en sus ojos, cuando supo de quién era hija, casi me ahorca por no darle mi nombre verdadero, pero ahora que lo pienso, sí lo hubiera hecho no te hubiera conocido.

Él me apoyo cuando se enteró de que estaba embarazada, aunque ganas de matarme no le faltaron, supuso que no me había cuidado mientras trabajaba, tuve que contarle lo que pasó contigo y que después que los periodistas salieron, las cosas se dieron y nos ganó la pasión, después de burlarse de mí, me brindó su apoyo y espero ansioso el nacimiento de ellos, se convirtió en un tío, un padre y un abuelo para mis hijos, me apoyo mucho y cuando fue necesario me regaño.

Durante mi carrera fue mi tutor y revisaba mis escritos, pasaba las noches en vela ayudándome a estudiar, durante todos estos años ha sido mi sostén, el que me para sí me caigo y me corrige si me equivoco, como no sentir algo por alguien que ha hecho tanto por mí.

Ahora quisiera que él y mi madre se dieran una oportunidad sé que ella lo quiere, pero el miedo no la deja, yo sería muy feliz si ellos están juntos y sé que mi padre estaría satisfecho, de que mi madre tenga quien la cuide.

¿Eso responde a tu pregunta?

—Perdóname a veces soy un idiota.

—¿Puedo preguntar algo más?

—Solo si me prometes que me dejaras responder antes de enloquecer.

—Está bien, lo prometo.

—Pregunta.

—¿Mi tío fue tu primer hombre?

🗨️ Guarde silencio por un tiempo, no quería recordar ese suceso, pero quería aclarar sus dudas. Respire profundo y conteste.

—No.

🗨️ Sentí su tristeza y supe que no quería hablar, algo malo le había pasado y quería saber que era.

—¿Me quieres contar?

— Fue cuando tenía diecisiete años, mi madre estaba internada en la clínica y necesitaba un trabajo para costear su atención, una señora me ofreció trabajar en su casa acompañando a su nieta...

Le conté toda la historia, no me interrumpió, únicamente apretó sus puños cuando le conté el triste momento, cuando termine la historia me abrazo, sin decir nada, me acostó y mi cabeza quedó en sus piernas y empezó a acariciar mi cabello.

Me sentí bien, un sentimiento nuevo afloró en mí.

— Ya puedes estar tranquila, estoy aquí para cuidar de ti y de mis hijos, solo te pido que me des una oportunidad, prometo no defraudarte.