CADA QUIEN LABRA SU DESTINO

Leda se detuvo y le dijo que el era el que sabía de discoteca, donde la llevara estaría bien, pero el quería que ella viera el ambiente y la música.

Finalmente, llegaron a tres discotecas, a Leda le gustaron todas, pero decidió quedarse en la segunda que habían ido, se ubicaron en la zona VIP, Leda estaba emocionada porque estaba viviendo algo diferente, estaban acistumbrados a estar juntos en casa viendo películas, Leda miraba a la gente a su alrededor, Leonardo la miraba a ella y le dijo en su oído.

LEONARDO: Te voy a sacar más seguido a estos lugares, veo que estás encantada.

LEDA: Si, me ha gustado el ambiente

Ellos se hablaban fuerte al oído por la música, él pidió bebidas, para él vodka y para ella piña colada porque era la primera vez que iba a probar licor, y para ella sería una forma deliciosa y sofisticada para disfrutar de la noche. A Leda le gustó la piña colada, pero Leonardo le dijo que tomara suave porque se podía marear rápido.

Él la saco a bailar y aprovechaba para besarla, ella rodeaba por el cuello con sus brazos y profundizaba el beso apasionado, dejaron de bailar para besarse, cuando terminó la música ellos salieron para su lugar, en el trayecto una mujer tropezó con Leda; la mujer intento pegarle a Leda culpándola por lo sucedido, pero Leonardo se lo impidió.

En otra mesa estaban dos jóvenes y una mujer, ellos se dieron cuenta de lo que estaba sucediendo, era acompañante de uno de ellos, los tres llegaron y encontraron a la mujer muy enojada, los hombres se dieron cuenta que era Leonardo el que sostenía a la acompañante de ellos, la otra mujer la aparto de las manos de Leonardo y la puso a un lado, Leonardo se dio cuenta quienes eran los dos hombres y sonrió, eran sus dos amigos, tenían dos años que no se veían y habían perdido comunicación porque estaban en otro país.

Los hombres se saludaron con un abrazo y pidieron disculpas por lo sucedido, Leonardo presentó a sus dos amigos a Leda, Victor y Didier, ellos se disculparon con ella porque fue la perjudicada, ellos intercambiaron números de teléfono para estar en contacto.

Ellos eran empresarios, sus empresas eran los números uno en el país, tenían dos empresas de mensajería y una de textil, no competían con la de Leonardo porque la de el era de construcción y también era la número uno en su oficio.

Victor y Didier decidieron sentarse con Leonardo y Leda, a ellos se les sumó las acompañantes, Leonardo le dijo a Leda que son sus amigos de infancia, estudiaron junto siempre y se separaron cuando iban para la universidad, pero mantuvieron contacto y se reunían.

Estando todos en la mesa las dos mujeres miraban mal a Leda, ellas sabían de las andanzas de Leonardo, sabían que no era hombre de una sola mujer, pero, sin embargo, se ha mantenido junto a Leda.

las seis personas compartieron animadamente, más los hombres por el reencuentro, todos tomaban son control alguno, pero Leda dejaba pasar porque se sentía mareada, a las 11 de la noche ella le dijo a Leonardo que estaba muy mareada, el le dijo que no tomara mas para que se sintiera mejor, asi pasaron las horas y Leda cuando se sintió mejor volvió a tomar su piña colada.

Leonardo se dio cuenta como las mujeres miraban a Leda, el le preguntó a Victor sobre ellas y le dijo que no eran nada serio, solo era para pasar el tiempo, que las habían conocido en ese lugar cuando recién llegaron a la ciudad, tenían dos semanas de haber llegado. El le dijo que estaba pendiente con su hermano de ir a buscarlo en la empresa el lunes.

Después de una hora Leda se volvió a sentir mal, eran las 2 de la mañana, Leonardo tuvo que irse con Leda porque ya estaba bastante ebria, él llamó a una empresa y le mandaron un conductor. Al llegar a casa Leonardo cargo a Leda hasta la habitación, ella no despertó por mucho que la llamara, la acostó y después la cambió de ropa poniéndole la de dormir; Leonardo la miró y se sentó a su lado, beso suave su frente y le dijo cuanto la amaba.

LEONARDO: Te amo, no sabes cuanto te amo Leda, pero me da miedo decírtelo, aunque siento que tú me amas también, pero no sé si de la misma forma que lo hago yo.

Él le expresaba su amor mientras dormía, lo hacía de una forma tierna, él era sincero y auténtico en su expresión de amor, le dio un beso en los labios y quitó su ropa para dormir a su lado.

Por la mañana Leda se levantó con mucho dolor de cabeza, Leonardo ya estaba preparado para eso y le dio una pastilla para que se sintiera mejor, le mando a preparar sopa, pero cuando comió vomitó todo, ella en medio de su malestar le decía a Leonardo que le había gustado mucho la piña colada, pero no la tomaría más; Leonardo sonrió porque la mayoría de las personas decían lo mismo cuando estaban mal con el guayabo, pero después se les olvidaba y volvían a tomar, el sabía que ella no era la excepción porque probaría otras debidas y quizás otra no la ponga tan mal.

Después de dos semanas del encuentro de Leonardo con sus amigos en la discoteca, se volvieron a reunir los tres un sábado para hablar un poco de sus vidas, Victor le preguntó a Leonardo por su novia y él le dijo que estaba en casa, no corrigió cuando el le dijo su novia, porque era lo que el más quería, los dos hermanos no tenían novias, solo mujeres para pasar el rato, Victor era mayor que su hermano por un año, tenia 26 años, Didier y Leonardo tenían 25, habían estudiado juntos porque Victor nunca quiso estar en un salón diferente al de su hermano y sus padres decidieron que estuvieran juntos.