Alex, un joven con una apariencia ruda pero un corazón amable, sacrifica su vida para salvar a unos gatitos abandonados. Como recompensa, reencarna en un mundo mágico en el cuerpo de una ardilla hembra de color blanco. En este nuevo mundo, Alex, ahora conocida como Lucía, descubre habilidades mágicas y forma alianzas con otros animales del bosque. Juntos, enfrentan amenazas tanto de depredadores como de humanos que quieren destruir su hogar. Con la ayuda del sistema Gran Oyama, Lucía lidera a sus amigos en una batalla épica para proteger el bosque y encuentra un nuevo propósito en su vida como ardilla mágica.
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capitulo 2
Capítulo 2: Explorando Más Allá del Bosque
Después de haber hecho nuevos amigos y haberse acostumbrado a su vida como ardilla, Nieve se sentía más segura y curiosa sobre el mundo que la rodeaba. El bosque había sido su hogar y refugio, pero sabía que había mucho más por descubrir. Decidida a explorar, Nieve comenzó a saltar de árbol en árbol, disfrutando de la libertad y la agilidad que su nuevo cuerpo le proporcionaba.
Mientras avanzaba, Nieve se maravillaba con la diversidad de la flora y fauna del bosque. Cada rincón parecía esconder un nuevo secreto, y cada criatura tenía una historia que contar. Sin embargo, su curiosidad la llevó a seguir adelante, más allá de los límites conocidos del bosque.
Después de un largo recorrido, Nieve llegó a un claro desde donde podía ver una gran ciudad en la distancia. Sus ojos se abrieron con asombro al contemplar las altas torres y las murallas que rodeaban el lugar. Era un reino majestuoso, lleno de vida y actividad. Intrigada, Nieve decidió preguntar al sistema Gran Oyama sobre la ciudad que veía.
“Gran Oyama, ¿cómo se llama esa ciudad?” preguntó Nieve, con la esperanza de obtener alguna información.
El sistema respondió con su voz calmada y sabia: “Esa ciudad es conocida como el Reino Eterno de Ofdragon. Fue fundada hace siglos por un antiguo dragón negro, cuyo poder y sabiduría aún resuenan en sus tierras.”
Nieve se quedó maravillada por la historia del reino. Un dragón negro antiguo, pensó, debía ser una criatura de inmenso poder y misterio. La idea de explorar un lugar con una historia tan rica y mágica la emocionaba. Decidió que debía acercarse más y aprender todo lo que pudiera sobre el Reino Eterno de Ofdragon.
Con renovada determinación, Nieve continuó su viaje, acercándose cada vez más a la ciudad. Mientras avanzaba, se encontró con varios desafíos, desde depredadores naturales hasta terrenos difíciles. Sin embargo, con la ayuda del sistema Gran Oyama y sus habilidades recién descubiertas, logró superar cada obstáculo.
A medida que se acercaba a las murallas del reino, Nieve comenzó a notar la presencia de otros seres mágicos. Había hadas revoloteando entre las flores, duendes trabajando en pequeños talleres y criaturas que nunca había visto antes. El Reino Eterno de Ofdragon era un lugar donde la magia y la naturaleza coexistían en perfecta armonía.
Finalmente, Nieve llegó a las puertas del reino. Desde su posición, podía ver a los guardias vigilando la entrada y a los ciudadanos yendo y viniendo con sus quehaceres diarios. Sabía que debía ser cautelosa, pero también estaba decidida a descubrir más sobre este fascinante lugar.
“Gran Oyama, ¿qué debo hacer ahora?” preguntó Nieve, buscando orientación.
“Debes encontrar una manera de entrar al reino sin llamar la atención. Observa y aprende de los habitantes, y busca aliados que puedan ayudarte en tu misión,” respondió el sistema.
Nieve asintió, comprendiendo la importancia de la discreción. Con su pequeño tamaño y su pelaje blanco, sabía que podía moverse sin ser vista si era cuidadosa. Decidida a seguir adelante, Nieve comenzó a planear su entrada al Reino Eterno de Ofdragon, lista para enfrentar cualquier desafío que se presentara y descubrir los secretos que este antiguo reino guardaba.