Camino A La Felicidad
Maycol, mi padre me cuido desde el primer momento que me tuvo entre sus brazos e incluso me puso mi nombre ya que mi madre no estaba; era un gran hombre, bueno y bondadoso, de carácter fuerte pero con una sonrisa sin igual.
Me educó según sus principios, aunque no estuvo solo, fue ayudado por varias personas como mi tío y mi tía, aunque principalmente fue apoyado por los sirvientes de su casa.
El ser educada por un hombre no me hizo precisamente una persona muy femenina pero me dio la libertad y las herramientas necesarias para caminar por la vida, para encontrar a grandes amigos y también para convertirme en una mujer de caracter
Durante mi infancia mi padre estuvo escasos momentos conmigo ya que era padre soltero y pasaba mucho tiempo en sus trabajos (era corredor de autos profesional y uno de los mejores arquitectos del país además era propietario de varias empresas automotrices y constructoras tanto nacional como internacionalmente), aunque no teníamos mucho tiempo juntos eramos muy unidos, solo nos teníamos el uno al otro y para alargar esos momentos comenzó a llevarme a sus conferencias y reuniones, donde aprendí diferentes estrategias de ventas entre otras cosas, también me llevaba a los circuitos de carreras, allí me enseñaba sobre mecánica y ademas lo ayudaba a arreglar su auto. Poco a poco comencé a amar todo lo que mi padre hacía y soñaba con ser igual a él.
Cuando cumpli cinco años me llevo a ver una de sus carreras, era como un niño que solo iba a divertirse, pues sus verdaderas profesiones eran empresario y arquitecto. Si ganaba una carrera me hacia subír al podio con el y me dedicaba todos sus triunfos ademas donaba el dinero que ganaba a obras de caridad o para los desafortunados.
Con el paso del tiempo nos volvimos inseparables, me enseño muchas cosas como las cinco reglas de oro que eran como se debia vivir, al cumplír catorce años mi padre me llevo el desayuno a la cama y luego tomó su Buick Lineup color blanco descapotable que guardaba en su garaje personal al cual no dejaba entrar a nadie excepto a Beatriz, mi nana, que solo entraba para asear y nunca me decía que había ahí
Ese dia se subio al auto y me pidio que hiciera lo mismo, al hacerlo lo mire como preguntando si algun dia me iba a mostrar que habia dentro y el solo me sonrio para despues decirme
- Algún día te enseñaré lo que hay dentro- me respondio
- ¿a dónde vamos?- pregunté curiosa y cambiando de tema
- Es una sorpresa- dijo con la sonrisa dibujada en el rostro- ponte el cinturón, por favor- hablo nuevamente y arranco el auto
comenzamos con nuestro viaje y estaba muy emocionada por saber que sorpresa era mientras el conducia miraba el paisaje que pasabamos y me di cuenta que nos ibamos de la ciudad, veinte minutos despues llegamos
- Esto es ...- dije confundida mirando a mi alrededor- ... es un campo ¿que... hacemos aquí?
- Veo que Beatriz te ha enseñado muy bien a hablar sin insultos- dijo el ya que desde pequeña decia muchas groserias entonces le encomendo a mi nana la tarea de enseñarme a comportarme como alguien elegante y educado- Pero como es tu cumpleaños dejemos los modales de lado, hoy te voy a enseñar a conducir
- ¿de verdad?- dije sorprendida al oirlo ya que el me lo habia prometido
- Si- dijo riendo al ver mi expresión
Comenzó a enseñarme poco a poco, con toda su paciencia me explicaba cada paso, luego de un mes ya había aprendido a conducir correctamente pero después de enseñarme lo básico me enseñó a conducir a mayor velocidad él ya había dejado de ayudarme y conducia a mi lado con otro de sus autos, era muy estimulante el verlo a mi lado, la adrenalina se apoderaba de mí, me divertía muchísimo compartiendo tiempo con mi padre, eran momentos de alegria que iba a atesorar por siempre. Ese año paso con prisa y en vísperas de Navidad me regaló un subaru impresa pero no era para conducirlo sino para arreglarlo, aquella noche cuando lo vi por primera vez, él me dijo:
- lo repararas y cuando funcione lo conducirás - me miro a los ojos - sé que puedes lograrlo
- gracias papa - sonreí
Al día siguiente me levante, desyune y cuando acabe fui directamente al garaje, examine el auto y el pobre necesitaba de mucho trabajo y amor; empecé a revisarlo para ver qué le pasaba o que le faltaba, cuando termine hice unas cuantas llamadas a diferentes tiendas de refacciones para conseguir las partes necesarias, pero al ver que no podía conseguirlas rápidamente, decidí contactar con una persona que sabía que me las podría conseguir. Marque su número y espere
Llamada
- hola- atendió una voz femenina
- Hola- dije amablemente y con una sonrisa- ¿todavía te encuentras en la ciudad? Necesito tu ayuda
- Si, mis asuntos se alargaron un poco ¿que necesitas?- dijo la voz del otro lado de la línea
- preciso partes de un auto, un modelo un poco viejo ¿podes conseguirlas?
- ¿de qué modelo estamos hablando?- preguntó interesada, ella amaba los retos
- Un subaru impreza, debo reconstruir el motor y el sistema de frenos hidráulicos, lo demás está bien
-¿el motor completo?
- Sí, también necesito un tanque de nitro y una nueva batería
- Va a ser un poco difícil de conseguirlo pero...- escuche que platico con alguien y luego volvio a hablarme- Muy bien en tres días lo tendré todo, Vladimir te lo llevará- Vladimir era un gran amigo mio de la infancia pero por culpa de una pelea con sus padres estos lo echaron y le consegui un trabajo con ella, sus asuntos no eran muy legales pero ella lo acepto con rapidez
- Está bien, gracias- colgué
fin de la llamada
Los tres días pasaron con rapidez, en la mañana del tercer día mientras desayunaba el timbre sonó y mi nana fue a abrir
- ¡Mina!- grito - ¡es una entrega para ti!
Me levanté de la silla tan rápido como pude, corrí hasta la puerta y frente a mi estaba Vladimir con unas tres o cuatro cajas a sus espaldas
- Hola, buen día Vlad- le sonreí - ¿como te ha ido en el trabajo?
- buen día Mina, traje lo que pediste- mire las cajas que tenía detrás suyo
- Muchas gracias- dije sonriente - ahora traigo el dinero, ¿podrías llevar las cajas al garage por favor?
- Sí- dijo dándose la vuelta
Entre a buscar el dinero y fui al garage, ahí estaba Vlad colocando las cajas en un espacio vacío que había. Me acerque le entregué el dinero, me dio las gracias y salió, un tanto apresurado; una vez sola me puse mi ropa de mecánico, saque las refacciones, desmonte el auto y comencé a trabajar.
Poco a poco lo reconstrui, estaba tan emocionada por tener mi propio auto que lo termine en tan solo tres días; por la tarde del 31 de diciembre se lo mostré a mi padre, él lo probó y me felicito
- bien hecho princesa, ahora ve a ducharte y vestirte para la cena de año
Entre en la casa, subí a mi habitación me duche, me puse un vestido blanco junto con inos zapatos beige y al hacerse la hora baje al comedor.
imagen
Durante la cena estábamos todos en el gran comedor celebrando el año nuevo. Mi padre, mi nana y mis tíos tomaban vino y charlaban de diferentes temas mientras que mis primos y yo hablábamos de nosotros y que haríamos una vez que regresaramos a la escuela. Al hacerse medianoche todos nos levantamos de las sillas, brindamos y luego salimos al patio a ver los fuegos artificiales que comenzaron cuando el reloj sono la media noche, después de que terminaron mi padre se acercó a mí
- Feliz año nuevo princesa- dijo abrazandome para despues separarse
- Gracias, feliz año nuevo, papa - me dio un beso en la frente junto con una dirección y un número de teléfono, no entendí por que me lo daba pero quise saber de quién se trataba así que llame
Llamada
- Hola Maycol - dijo una voz masculina muy amigable del otro lado de la línea - ¿por que llamas siempre a esta hora? Estoy muy ocupado- dijo en tono burlón - además es año nuevo
- Hola - saludé tímidamente- ¿quien habla?
- Tú no eres Maycol - dijo confundido
- No, soy su hija. Él me dio este número pero no me dijo nada más ¿quien eres?
- Así que eres la pequeña Mina - dijo alegre y un tanto nostálgico - Maycol te dio mi número y seguramente también te dio una dirección ¿no?
- Si, así es
- Ven a esa dirección ¿puedes ahora?- parecía una persona agradable por su manera de hablar y mi padre jamás me daría el número de alguien que no sea de su absoluta confianza - es a las afueras de los suburbios
- Está bien, en unos veinte minutos estoy ahí
- Muy bien, te espero - colgué la llamada
fin de la llamada
Estaba muy nerviosa, me iba a encontrar con alguien que desconocía y no sabía cómo iba a llegar; en ese momento pensé
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Después de haber pensado eso subí a mi recamara busque en el armario y me puse a ver lo que tenía. Saque un lindo vestido color azul marino con escote en V muy sexy que llegaba a la mitad de mi muslo, me miré en el espejo y me solté el cabello dejándolo caer hasta llegar a mi cintura, el vestido me quedaba perfectamente ya que mi cuerpo no parecía el de una chica de 14 años, debido a mi busto desarrollado, tome mi maquillaje y comencé, me puse un Lapiz labial color rojo pasión y me pinte los ojos con una sombra. Volví a mirarme y era otra persona, me puse unos zapatos negros de tacón, agarre un par de Vans y salí dejando una nota para que no se preocuparan.
Subí al auto lo encendí y conduje rápidamente al lugar del encuentro, cuando llegue me sorprendí al ver a tantas personas, me estacione y un hombre se acercó a mí, y me hizo una seña para que bajara
- ¿Eres Mina?- preguntó amablemente cuando baje
- Sí - respondí al reconocer esa voz. Lo miré y era un joven de unos 27 años de cabellos castaños oscuros y ojos negros además de su tez oscura
- Ven, alejémonos de la gente para hablar más tranquilos- dijo con una sonrisa
- Está bien- respondí y me llevó hasta un pequeño café que apesar de ser año nuevo se encontraba abierto; cuando llegamos nos sentamos en una mesa al lado de la ventana
- Así que eres la pequeña Mina - sonrió - creciste mucho desde la última vez que te vi
- ¿Me conoces?- pregunté confundida
- Si, desde que eras una bebé
- ¿Ah, sí?
- Si, pero eso no viene al caso, tu padre me ha contado que quieres ser corredora - me sorprendí al oír esas palabras salir de su boca
- ¿Qué? - fruncí el ceño en señal de confusión
- Si, Maycol dijo que querías ser corredora ¿es cierto?
- Así es- sonreí
- ¿Sabes cómo empezó él? - preguntó con una sonrisa nostálgica
- No
- Bueno, él empezó aquí...- señalo hacia fuera- en las calles, como lo hacen estas personas; yo organizo cada una de las carreras y antes mi padre lo hacía, él vio a Maycol ascender
- Así que mi papá comenzó aquí- dije pensativa y mirando hacia afuera
- Si, pero es una pena... - se detuvo- ... Ya nadie corre, solo se juntan aquí a presumir sus autos y sus mujeres
- ¿Ellas no corren? - cuestione
- No, nunca vi a una mujer en el asiento del conductor
- Yo, voy a correr - dije decidida- pero solo si lo mantenemos en secreto
- ¡¿Que?! ¿Quieres correr? - exclamó sorprendido
- Si
- Esta bien, pero ¿porque quieres mantenerlo en secreto?
- Primero porque soy menor de edad y no tengo permiso de conducir, segundo porque creo que a ellos no les va a caer muy bien que les gane una mujer- dije señalando a un par de hombres muy fuertes y con cara de pocos amigos- y tercero por que te haré ganar mucho dinero ¿quieres o no?- él lo pensó por un rato
- Querida, tienes un trato - dijo dándome la mano - puedes llamarme Jack- sonrió
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Updated 114 Episodes
Comments
Salomé Páez
*papá *
2024-07-29
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