LA NIÑERA DE MIS HIJAS CONTRATO

CONTRATO

Una firma es la perdición de cualquier empleado.

Y en este caso era la perdición de Sara.

Valentino

Firma aquí, aquí y aquí. *señalando*

Al pasar la hoja, Sara firmaba.

Habían algunas cosas que ella comprendía en el contrato, pero otras que no.

Cosas que estaban...

¡Confusas!

¡Innecesarias!

¡Equivocadas!

Sara

Es-esto...

Valentino

Podrás leerlo completamente cuando termines de firmarlo.

Valentino

Recuerda que debes seguir cada una de las reglas.

Valentino

O tu trabajo finalizará.

Sara no comprendía el porqué Valentino era tan estricto.

Y ahora no solo era con sus hijas, sino también con ella.

Se cuestionaba si estaba tomando la decisión correcta, pero....

Sara

*suspiro* Bien, lo eh firmado por completo.

¡No tenía otra opción!

Ese trabajo... Ese salario... Esa vida

Era la que necesitaba darle a su madre, que con sudor y esfuerzo pudo sacarla adelante desde la muerte de su padre.

Valentino

*sonríe* Perfecto, espero pueda acatar cada regla.

Sin ninguna palabra más, él tomó su chaqueta de la silla y caminó para la puerta.

Valentino

El día de hoy Vera te enseñará la mansión y te mostrará las tareas que deben realizar Romina y Martina.

Srta. Vera

Buenos días señorita. *sonríe*

Valentino

Secretario Fu, aliste el carro.

Valentino dejó el estudio, mientras que Sara miraba el contrato.

Srta. Vera

Debes ser Sara... ¿Verdad? *sonríe*

Sara

¡Oh, claro! *sonríe*

Sara

Mucho gusto.

Srta. Vera

El gusto es mío, mi nombre es Vera.

Srta. Vera

En esta casa soy la cocinera principal y también la mano derecha de Fu.

Sara se presentó amablemente, tomó los papeles y siguió a Vera.

Mientras caminaba por los pasillos de la casa, más se perdía.

No comprendía el porqué un familia necesitaba una mansión de éste tamaño.

¡Era extraño!

Srta. Vera

Espero puedas recordar cada habitación.

Sara

*ríe* En realidad me eh perdió desde que comenzamos.

Srta. Vera

*ríe* No te preocupes, conocerás la casa poco a poco.

Sara

*sonríe* Gracias.

Srta. Vera

Debo advertirte, jamás debes entrar en la habitación del amo o al estudio principal.

Sara

Perdona, pero puedo preguntar.. ¿Porqué?

Srta. Vera

Son las reglas del amo.

Srta. Vera

*sonríe*

Sara

Cla-claro.. *sonríe*

Al terminar el tour, Vera tuvo que retirarse.

Dejó a Sara para que pueda acomodarse en la casa.

Pero no era tan simple, Sara no paraba de pensar en las tontas regla del contrato.

Sara

¡Madre santa!... Creo que esto es exagerado.

~ CONTRATO ~ 43. - - - - - - 44. Nunca cuestionar al jefe. 45. Nunca gritar al jefe. 46. Nunca pegar al jefe. 47. - - - - -

Sara

*molesta* ¿Ese cretino se cree Dios?

Sara

Porque ni el tenía tantos puntos en su vida.

Sara

Tantas reglas y órdenes.

Sara

*molesta*

Leyendo cada regla del contrato, Sara llegó a un hermoso jardín.

A la distancia vio como su madre ayudaba a un jardinero a regar agua en las plantas.

Decidió preguntarle el porqué la amabilidad de hace unos momentos en el desayuno con Valentino.

¿Acaso ellos ya se conocían?



