Al otro día, temprano a la mañana Katy desayuna un café con tostadas, mientras su novio duerme muy plácidamente, recoge su cartera y verifica que lleva dinero suficiente para el micro, su documentación y el pase para el museo, una vez que tiene todo en orden sale de su departamento. Katy suspira y camina a toda prisa entre las personas; pero una vez más está retrasada y sabe que va a perder su bono de asistencia perfecta, que tanta falta le hace. Cuando al fin se sienta en el segundo autobús que debe tomar todos los días y está a solo unas cuadras de llegar a su destino, este se tuvo que desviar por un accidente y cambia de ruta, ahora tardará un rato más en llegar.
⎯ ¡Maldición! Esto no puede estar pasando justo hoy.⎯ murmura mientras que con manos temblorosas busca en su bolso el celular y llama a su compañera de trabajo.⎯ Hola Marcela.
⎯ Katy ¿Dónde estás? Los niños ya están esperando por ti y los padres no están muy contentos con tu retraso.
⎯ En el colectivo, hubo un accidente y se desviaron. Necesito tu ayuda con los pequeños.
⎯ Descuida, yo me ocupo.
⎯ Gracias, eres un ángel.
⎯ Será mejor que te apures o te perderás la excursión.
⎯ Lo sé, ya estoy a unas cuadras. No falta mucho.
⎯ Muy bien, te esperaremos cinco minutos y sino llegas nos iremos sin ti.
⎯ Gracias. Adiós.
Ella guarda su teléfono, apoya su cabeza en la ventana y piensa en cómo su vida cambió en estos meses solo por complacer a Bruno. Antes caminaba al colegio y solo tardaba diez minutos en llegar y le sobraba tiempo para organizar su día, solamente tenía que llegar a su aula, instalarse y esperar tranquila a sus pequeños; pero ahora al vivir tan lejos, tiene que tomar dos colectivos antes de llegar a la escuela y cuando llega está muy cansada porque no descansa lo suficiente y va improvisando a medida que pasan las horas. Su rendimiento cada vez es peor y ella lo sabe. Esta mañana en particular se sentía destrozada, la noche anterior durmió muy poco pensando en que tendrá todo un mes para estar sola y no le gusta para nada tener que separarse de su amor.
Al fin llega a la escuela, después de caminar por dos cuadras y ve al autobús escolar de color naranja que está estacionado esperando por los alumnos y las maestras. Marcela, su compañera de trabajo y única amiga, está con los dos grupos haciendo la fila para ingresar al colectivo.
⎯ Hola niños.⎯ saludó ella con su habitual sonrisa.⎯ ¡Ya estoy aquí!
⎯ ¡Hola señoooo!⎯ gritan todos a la vez.
⎯ Hola Marce. Gracias por acomodarlos. Tuve una noche complicada y una mañana horrible.
⎯ Hola. ¿No me digas que hay problemas en el paraíso?
⎯ Algo así.
⎯ Ya sé… Al fin te diste cuenta que es un idiota.
⎯ Marcela, ese idiota va a ser mi esposo y no me gusta que hables así de él.
⎯ Disculpa, pero no me agrada y lo sabes.
⎯ Lo sé.
⎯ Dime ¿Sí al fin él piensa salir de su burbuja de cristal?
⎯ Algo así.⎯ Katy suspira y le comenta con tristeza.⎯ Consiguió trabajo.
⎯ ¡Eso es maravilloso!⎯ comenta Marcela, mientras van tocando las cabezas de los niños para contar que estén todos los alumnos.⎯ ¿Cuál es el problema?
⎯ El problema es que está en Milán. ¡“El mes de la moda”! ⎯ dice haciendo comillas en el aire.
⎯ ¡No puede ser, es un caradura! A ti no te deja hacer publicidad, ni desfilar y él se va de viaje con modelos.
⎯ Yo pensé lo mismo, pero al final cedí y mañana se va.
⎯ Bueno amiga, lo bueno es que al fin va a hacer algo. Eso de ser fotógrafo profesional y solo quiera eventos grandes, me parece una tontería. Sabes que varias veces le ofrecí el puesto de fotógrafo en la escuela y lo rechazó .
⎯ Lo sé y te he agradecido siempre por el ofrecimiento.
⎯ Bueno, solo faltamos nosotras. Tengo veintitrés cabezas.⎯ afirma mirando a los niños que se van sentando.
⎯ Yo dieciocho. Están todos, vamos.⎯ suben al colectivo y todos saludan a los padres desde sus ventanillas.
El viaje al museo fue divertido, van cantando varias canciones y haciendo adivinanzas. Cuando están estacionados frente a la puerta, les dan las últimas indicaciones.
⎯ Bueno, ya saben no pueden soltar la soga por nada del mundo y si alguno tiene ganas de ir al baño levanta la mano y una de nosotras lo va a llevar.
⎯ ¡Sí seño Marcela!.
⎯ Odio cuando todos gritan.⎯ susurra Marcela en el oído de su compañera.⎯ Por suerte este es mi último año como maestra.
⎯ Yo lo adoro.⎯ contesta Katy con su habitual sonrisa.⎯ No veo la hora de tener a un niño y ver a mi pequeño en el jardín.
⎯ Primero debes embarazarte.
⎯ Lo sé y te juro que hago la tarea a diario; pero Bruno se cuida, dice que hasta no tener nuestra casa no quiere hijos.
⎯ Jajajaja. Creo que es lo único sensato que hace, ese tonto.
⎯ Marcela ¿no sé por que lo odias tanto?
⎯ Vamos, ahí está nuestro guía.⎯ contesta ignorando su pregunta, ella no puede creer que su amiga sea tan ciega y no se de cuenta que ese hombre es un payaso.
El guía se presentó e ingresaron al museo, lo primero que vieron fue una exposición de Los Mayas habían jarrones, pinturas, armas, vestimentas hasta una tribu jugando un juego muy parecido al fútbol. Los niños estaban sorprendidos por todo lo que veían.
Luego entraron a una exposición más contemporánea donde se veía el progreso de los automóviles desde el año 1920 hasta la actualidad, sus maquetas eran tan impresionantes que algunos niños querían jugar con ellas.
Rebeca, una niña pecosa de grandes ojos celestes y muy tierna, levantó la mano junto a Manuela, una niña morena que se había integrado hace poco al grado, ambas necesitaban ir al baño, entonces Katy se ofreció a llevarlas. Luego se integrarían nuevamente al grupo en la próxima sala, el pasillo que debía cruzar para llegar a los sanitarios estaba decorado con varias pinturas, eran murales muy realistas. Las niñas entraron solas al baño y ella se quedó observando una imagen que llamó poderosamente su atención, ese hombre tenía una mirada penetrante y sus ojos eran de un color tan peculiar que traspasaba el alma.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 51 Episodes
Comments
Patricia Salazar
Estará en paz Katy por el mes que estará en Milán, ella no se da cuenta pero Bruno sólo piensa en él ( es un narcisista)
2024-08-11
2
Omirsa Benites
Ese hombre de la pintura es Kreto
2024-07-14
3
Francisca Miranda Garcia
en esa pintura vió al que se va a encontrar después de su muerte
2024-06-11
1