Capítulo Nº20

Katarina en sueños duerme en su pensión abrazada con Kreto, su cuerpo se relaja completamente y su mente se despeja. Desde que él apareció en su vida, la paz que siente al estar entre sus brazos no la sintió con nadie, ni siquiera con Bruno.

Mientras tanto, esa misma noche en un restaurante muy prestigioso a las afueras de la ciudad, una pareja discute por todo y el hombre no deja de pedir más vino, ante las miradas de varios curiosos que están cerca de su mesa.

⎯ Bruno, amor.⎯ Naomi intenta calmar un poco a su esposo que la mira furioso y con la mirada perdida.⎯  Mi vida.

⎯ No soy tu amor, no me gusta que me digas así y mucho menos que trates de manipularte con tus palabras de cariño.⎯ él mueve su mano de arriba de la mesa y evita que ella lo acaricie.⎯ Y no me toques, no te soporto, me das asco.

⎯ Dime ¿por qué no me quieres? Hace un año que eres mi esposo y te comportas como un patán. Hoy es nuestro aniversario, se supone que es un día especial y tú como si nada, ni me registras. Tuve que fingir que me envías flores al trabajo, para no parecer una tonta frente a mis empleados.

⎯ Yo nunca quise casarme contigo y lo sabes. Yo amaba a mi mujer.⎯ él aprieta la servilleta y contiene sus ganas de acabar con la vida de Naomi en ese mismo instante.⎯ Nunca debí ayudarte en ese evento.

⎯ Yo no te obligue a estar conmigo, tú solito te entregaste a mi.

⎯ Lo hice porque esa noche me sedujiste y habíamos tomado demasiado. Nada más; pero tu obsesión hacia mi te cegó por completo.

⎯ Yo te amo.

⎯ Esto no es amor. Amor es otra cosa, es lo que yo tenía con Katy y por tú culpa lo arruine.

⎯ Tu mujer es historia y yo soy tu presente. Dame una oportunidad para conocernos.⎯ súplica una vez más con sus ojos llorosos.⎯ Solo confía en mi, yo no hice nada. Te lo juro.

⎯ Nunca voy a confiar en ti, me arrebataste lo único que me daba felicidad.

Bruno le arroja la servilleta a la cara y ella la agarra en el aire ante que golpee su rostro, él se levanta tambaleante de la mesa y su silla se cae contra el piso, hace tal estruendo que llama la atención de los demás comensales.

⎯ Bruno, siéntate por favor.⎯ ella mira para todos lados.⎯ No hagas un escándalo.

⎯ Tú querías dar la primicia de nuestra boda, muy bien hazlo. Yo me voy a casa, a mi casa.

⎯ No puedes irte así. Estás ebrio.⎯ Naomi le habla en voz baja.⎯ Deja que te lleve.

⎯ No te necesito y puedo irme solo y así lo haré.

Bruno sale del restaurante y en la esquina toma un taxi, necesita volver a su casa y dormir abrazado a la almohada con el perfume de Katy.

Naomi paga la cuenta del restaurante y sale del lugar ante la atenta mirada de varias personas que la reconocen. Ella es fotografiada al subir a su auto por un paparazzi y se sorprende al ver a la joven llorar aferrada a su volante. Es la primicia del momento; pero al ver a la modelo número uno del país tan vulnerable borra las imágenes de su cámara y sale en su moto hasta su hogar.

Naomi llega a la suite presidencial, se recuesta en la cama y llora desesperadamente, su vida amorosa es un desastre y sin querer le está afectando a su carrera. A mitad de la noche se levanta y busca en el bolso sus antidepresivos y se toma varios de una sola vez, se duerme tan tranquila y desea no despertar; pero su plan falla cuando a la mañana temprano ingresa la mucama a la habitación y la encuentra inconsciente, entonces llama a emergencias.

⎯ Señorita despierte, despierte.⎯ alguien la mueve lentamente del brazo.⎯ Señorita ¿puede oírme?

⎯ Si, ¿dónde estoy?⎯  pregunta al ver las paredes blancas y al sentir un leve olor a desinfectante.⎯ ¿Qué me pasó?¿ Quién es usted?⎯ se incorpora en la cama y mira para todos lados.

⎯ Señorita esta en una clínica, al parecer se desmayó por tomar varios antidepresivos y la mucama del hotel llamó a emergencias. Yo soy su doctor y necesito comprobar que entiende lo que le acabo de explicar.

⎯Sí, entiendo pero ahora quiero ir a casa, no puedo estar en este lugar.

⎯ Tendrá que quedarse por lo menos hasta la tarde, le hemos realizado un procedimiento para eliminar las pastillas de su estomago y tengo que controlar que todo esté bien.

⎯ Me siento bien.⎯ ella comienza a llorar.⎯ Solo quiero estar en casa.

El doctor se sienta en la cama toma su mano y muy suavemente le habla, le explica que él sabe lo que intento hacer y le recomienda que vea a un especialista que la ayude a controlar su estado de ánimo.

⎯ Yo no estoy loca.

⎯ Lo sé, pero igualmente necesitas ayuda. Eres una mujer muy hermosa y no mereces sufrir así.⎯ él le entrega un pañuelo y ella limpia su nariz.⎯ Nada, ni nadie puede hacer que pienses en suicidarte. Tienes muchas cosas buenas en tu vida y mereces seguir adelante.

⎯ Tiene razón, pero es que me siento muy presionada, el trabajo, mis padres, mi esposo, mi  manager todos esperan que haga cosas que no quiero. Es mucha presión la que soporto y ahora esta ese maldito viaje a Milán que no deseo realizar pero es imposible, no me puedo negar o la compañía perderá millones .⎯ ella al fin habla sin controlar su lengua y se desahoga. El médico solo la escucha atentamente y al fin le indica que descanse.

Naomi duerme todo el día en la clínica y por la tarde un taxi la lleva a su casa, se ve fatal y solo desea volver a dormir, así que se da un baño de espuma, se coloca su pijama y se recuesta en su enorme cama, la que compró con tanto esmero para compartir con su esposo.

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