CAP 14

Bebía sentado en uno de los lujosos sofás de la mansión donde había vivido con su madre y hermano menor toda la vida prácticamente...

- ¿Hijo? - se extrañó su madre al verlo - ¿Por qué no me avisaron que estabas aquí?

- No quería molestarte - bebió un sorbo de whisky - Pasaré aquí la noche

- ¿Tienes algún problema? - quiso saber si madre quien se sentó rápidamente al lado de él

- No... Solo quiero quedarme aquí.

Su instituto materno no fallaba, a su hijo le sucedía algo,, pero era mejor a esperar que él le contara... Terminaría haciéndolo cuando estuviera listo.

...****************...

Un detective y un fiscal acompañado por dos oficiales llegaron a la casa de los Monterrey.

- Buenas noches, señores - le saludó el detective

- Buenas noches ¿Pasa algo? - preguntó el padre de Roberto al ver a los oficiales

- Señor Monterrey queda usted detenido por evadir impuestos federales y malversación de fondos.

-¿Qué dices imbécil? - se defendía Roberto delante de sus padres

- Hijo... - susurró su madre con apenas un hilo de voz dejándose caer en el sofá que antes ocupaba

- ¡Son mentiras esas acusaciones! - seguía gritando

- Me temo que no señor Monterrey - le extendió un documento con mucha paciencia - Queda usted arrestado

Entonces el fiscal hizo un gesto y los oficiales se dirigieron a ponerle las esposas, pero Roberto comenzó a gritar y golpear a los oficiales

- ¡Quiten sus manos de encima! - gritaba tratando de soltarse cuando al fin lo agarraron

- Lamento decirle que acaba de anexar un cargo delictivo más, agresión a los oficiales de la ley

El padre de Roberto se llevó la mano al pecho tras el escándalo y se dejó caer al suelo mientras conducían a su hijo

- Amor... - gritaba su esposa al verlo - ¡Una ambulancia!

Rápidamente, la empleada doméstica que se encontraba cerca llamó al nueve once y el señor Monterrey padre fue traslado al hospital mientras que su hijo era puesto tras rejas.

...****************...

Ella lo esperó toda la noche, pero él no llegó, como había prometido ... No sabía a ciencias ciertas a qué hora se había quedado dormida... Pero lo había hecho...

Se levantó y alistó para ir a trabajar, este era su primer día y no quería llegar tarde... Se puso un juego de pantalón de color blanco y se dirigió a su nuevo empleo... Aunque iba contenta por la oportunidad de empleo, su corazón estaba angustiado...

- ¡Llegaste! - le saludó aquella chica que había conocido en la entrevista dejándola un poco sacada - ¡Te dije que lo lograría y aquí estoy! ¿A qué estás asombrada?

Era una chica muy sociable y carismática... Se llevaría bien con ella.

- Sí, pero también estoy contenta... Es mejor conocer a alguien... por cierto me llamo Nikki - le extendió una mano

- Soy Susan - la estrecho - ¡Vaya eres casada! - le dijo al ver la alianza.

Nikki asintió sonriendo algo nerviosa... ¿Seguiría casada después del día vivido?

- ¿Vienen a socializar o a trabajar? - les sorprendió la señorita Cobas

- Disculpe - se excusaron ambas y se dirigieron a su puesto en la oficina.

- ¡Tú! - señaló a Nikki - ¡Ven a mi oficina!

Su comportamiento no era el más indicado, pero Nikki fue hasta allí tras ella.

- ¿Si señora?

La señorita Cobas se sentó tras su buró cruzando una pierna sobre la otra... miró a Nikki despectivamente

- Todas las mañanas traeras mi café, me gusta descafeinado y con dos de azúcar...

- ¿Esa no es la función de su secretaria? - preguntó Nikki algo inocente.

- ¿Estás cuestionando mis órdenes? - se enojó

- ¡Oh no señorita! Solo quería saber cuáles eran mis funciones aquí...

- Tus funciones serán las que yo desee... ¿Entendiste?

Nikki asintió... sería una batalla dura de ganar

Ella era diseñadora... Pero debía ganarse el puesto...

- Si señorita...

- Ahora ve por mi café... Lo compro en la cafetería de la esquina de la empresa

Y sin decir más se puso a trabajar.

Nikki salió del despacho y Susan enseguida le abordó

- ¿Qué quería?

- Un café

- ¿Qué? - la detuvo - ¡Eso es trabajo de su secretaria, no tuyo!

- Da igual, sé que me hará la vida imposible un tiempo... pero se le pasará.

Entonces Nikki salió a cumplir con su encargo.

...****************...

Salía de la cafetería cuando tropezó con otra chica

- Disculpe, no le vi

- ¿Nikki? - al parecer la conocía

Nikki la miró, no la recordaba... ¿Quién era ella?

- ¿No me recuerdas verdad?

- La verdad es que no - sonrió - al parecer hay muchas cosas que no recuerdo

- ¿Pero como vas a olvidarme después de lo que hiciste por mí?

Nikki abrió grande los ojos... estaba muy confundida

- ¿Hice algo por tí? - extrañada

- ¡Sí! ¿Cómo has olvidado? ¡Salvaste mi moral y mi noviazgo! Gracias a ti estoy felizmente casada hace tres años.

Nikki llevó una mano a la cabeza... Un bar... unos gritos...

- No me estoy sintiendo bien - murmuró - Debo irme

- Está bien... pero toma - le dio su tarjeta - llámame cuando quieras para tomar un café

Nikki asintió al tomar la tarjeta y se marchó de allí a toda prisa.

¿Salvó la vida de aquella chica?

¿Trabajaba en un bar?

¿No era virgen?

¿Al parecer sufrió un aborto?

¡Eran demasiadas preguntas sin respuestas!

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