Soldado avisado, no muere en guerra...

___ Amigo,tienes que tratar de controlar, tu de sosiego por acostarte con una diferente cada sábado, te vas a meter en un lío, un día de éstos. _ Ese era mi amigo César quien me estaba sermoneando el domingo bien Temprano, después de ayudarme a sacar a un par de chicas del apartamento.

___ Que va, la vida hay que disfrutarla, querido amigo, deja de regañarme por favor y tráeme un par de Aspirinas para este dolor de cabeza, que me está matando.

___ Después no digas que no te lo advertí, ¿Sabes quién es esa chica, con la que estuviste anoche en la discoteca?

____ creo que se llama Kimberly, lo demás no me interesa. _ respondí tajante, pero mi querido César seguía insistiendo con la cantaleta.

___ Pues debería interesarte, y yo como buen amigo tuyo que soy, te lo diré, esa hermosa chica, es nada más y nada menos que la hija de un peligroso y temido mafioso.

___ ¿Estás seguro hermano? _ pregunté un poco asustado, creó que hasta el dolor de cabeza se me fue por el susto. ___ Menos mal que esto es una cosas de una sola noche y ya, no la volveré a ver más, así que relájate.

___ Estás advertido, su familia es peligrosa, ella sola grita peligro a simple vista, soldado avisado, no muere en guerra....

Pero el siguiente sábado hay estaba yo, otra vez con esa chica peligrosa, enrrollados en un sofá de la discoteca, luego ni corto ni perezoso, me la llevé a una habitación de un motel, para volver hacerle el favorcito, que conste, yo le dije que no, y ella dijo que si, le volví a dejar claras las cosas, pero ella me dijo tranqui...

Así paso un mes, cada fin de semana me encontraba con Kimberly, la hija de aquel peligroso mafioso.

___ Está vez, si será la última vez que nos acostamos tu y yo, no quiero líos, ni nada, así que adiós, si nos vimos, no nos acordamos, ¿ok? _ le dije a ella mientras me vestía.

_

__ ¿ Pero, por qué Alexander, que a caso ya no te gusto? _ me dijo haciendo un puchero.

___ No es eso, tu estás muy buena y todo, pero siento que esto se está saliendo de control, yo no meto sentimientos en estás cosas, nunca me he enamorado y no creo hacerlo jamás, así que te pido por favor que no me busques más, te deseo suerte. _ le dije con mucha sinceridad, ella casi se enojo y empezó a discutir y a decir barbaridades.

___ ¡No!!! tu no puedes deshacerte de mi, así tan fácil, como si yo fuera un trapo viejo, no, no, Alexander yo si me enamoré de tí desde que te vi, te llevo seis meses observando , sabes lo que luché, para que al fin tu te fijaras en mi, no me vas a dejar, tu me gustas mucho, y tienes que ser mío!!

___ por favor Kimberly, déjate de niñerias, yo te deje todo bien claro cuando todo esto empezó, y tu aceptaste mis condiciones, te dije que esto era solo sexo y diversión, nada más, yo no prometí amarte, ni te jure nada, yo no soy de nadie, ni lo seré, yo soy libre como el viento, así que por favor ahora no quieras dártela de viva.

____ Está bien, como tú quieras, ¿vamos a ver qué dice mi papá cuando se entere de todo ésto? cuando le cuente que me utilizaste, me enamoraste y luego jugaste conmigo y ahora no me quieres responder como hombre. _ cuando ella dijo eso la sangre se me heló, creo que por primera vez sentí miedo, pero no se lo di a demostrar. ___ ¿ sabes quién es mi padre, verdad? estoy segura que a mí hermano le encantará jugar un buen rato con el hombre, que mancillo mi honor. _ jajaja, ¿ cuál honor? de verdad esta mujer estaba loca.

___ ¿Cuál honor, Kimberly? si tú ni siquiera eras virgen. _ le grite.

___ Será tu palabra contra la mía, tienes una semana, para pensarlo y decidirte, o te casas conmigo, o atente a las consecuencias, le diré a mi padre y a mi hermano, que me seducistes, y cuando obtuviste lo que querías, me desechaste.

___ Maldita sea la hora en la que me enrede contigo, " cuanta razón tenía César" _ pensé.

___ Mira Alexander, yo hoy te juro, que como me llamo Kimberly castillo Sotomayor, que tú te casarás conmigo, quieras o no, por las buenas o por las malas, tú decides. _ esa fue la advertencia de esa loca antes de salir de la habitación, dejándome en un grave y peligroso dilema....

Tomé mi carro, y me fui a mi apartamento, y cuando abrí ahí estaba mi amigo César, uff eras más puntual que la señora del servicio, ahora me imagino el gran sermón que me va a dar, y bien merecido que lo tengo.

___ Recuerdas que te lo dije? no una si no cien veces, te dije Alexander, alejate de esa mujer, pero como tú solo piensas con la cabeza de abajo,no me hiciste caso, ¿ ahora dime que vas hacer.? _ el tenía razón, me lo advirtió tantas veces y no escuché, es que la chica está tan buena, que cuando la veía se me olvidaba la advertencia de mi amigo, ja, eso me pasa por tonto.

___ No se, no tengo ni idea de cómo salir de este lío, por eso te lo estoy contando a tí, para que tú me ayudas a pensar, y a encontrar una solución, ya no me regañes más César, pareces mi mamá.

___ ojalá y yo fuera tu mamá, para darte unos cuantos cinturonazos, que bien que te hicieron falta de pequeño. que tal si hablas con tu papá, seguro el te ayuda.

__ Tocará. _ fue lo único que dije, y me avente al sofá más cercano para descansar.

Al día siguiente me fui a casa de mis padres, pero al llegar, mi madre me dice, que papá se fue ayer por la tarde a un viaje de negocios y no sabe cuándo regresa,. ya que más da estoy perdido. sin más me regreso a mi apartamento a hablar con mi gato que será el único que me escucha sin regañarme, pero ese día hasta el gato estaba enojado conmigo, mientras le contaba lo sucedido, me miró feo, y luego de un momento a otro, me mordió y se dió a la fuga por la ventana.

___ Hasta el gato me odia, esto es terrible, ahora que haré soy muy joven para casarme, y esa familia es muy peligrosa, y justo pasa ésto, ahora que mi padre iba a ponerme a cargo de la empresa, bueno que ponga a mi hermano, el seguro estará feliz, los negocios son su pasión, será lo mejor, no quiero trabajar en algo que no me apasiona.

Intenté comunicarme con mi padre, pero fue imposible, al final obte por no molestar más, con todo ese lío en mente, me quedé dormido .

pero mis sueños fueron perturbados por montones de pesadillas en las cuales el padre de Kimberly me obligaba a casarme con ella, en otras me golpeaban hasta la muerte y en otras me tiraban en una jaula grande con leones para que me devoraran y que Kimberly me decía.

___ acepta casarte conmigo o te comerán los leones!!

___ no quiero casarme contigo.

___ bueno lo decidiste !! soldado avisado no muere en guerra.

Aquellos leones hambrientos se me lanzaron encima y comenzaron a morderme cuando uno iba a arrancarme la cabeza di un grito desesperado el cual me hizo despertar de aquella horrible pesadilla cuando abrí los ojos estaba empapado de sudor tuve que levantarme e ir al baño y lavarme la cara con agua fría luego fui a la cocina para preparar un poco de café pues no me atrevería a pegar el ojo por lo que restaba de la noche no quería volver a tener esas horribles pesadillas...

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