Capítulo 8

Los sirvientes notaron que desperté decidieron llamar a Angie para que se encargue mí, lo cual no tenía sentido porque no me había sentido tan bien por la mañana en mucho tiempo, no solo fue por el hada, dormir hasta tarde y en una cama elegante siempre va a hacerle bien a cualquiera.

No estaba dispuesta a quedarme recostada más tiempo puesto que lo había hecho todo el día de ayer, gracias a eso tenía mucha más energía de lo normal, mientras nadie me veía me cambié de ropa y me puse el equipo que había preparado para el viaje el cual se había quedado cerca ya que se lo pedí a mi maestra antes de que se fuera ayer.

Cuando Angie llego a la habitación me encontró poniéndome las botas que eran lo único que me faltaba para completar mi equipo, por ello me regaño un poco diciéndome:

"Pero que crees que haces Matoi, debes descansar después de todo lo que te pasó ayer, ahora quítate todo ese equipo y vuelve a la cama"

Realmente no estaba dispuesta a hacerle caso porque estaba harta de estar recostada todo el día y aunque sus palabras hacían ver que se preocupaba bastante le respondí de inmediato.

"Angie la verdad es que estoy cansada de estar en cama al igual que ayer, además ahora mismo me siento con mucha energía y pienso que es algo malo no dejarla salir un poco"

"Bueno si tú dices que te encuentras mejor deberé creerte, pero de todas formas ¿A dónde planeabas ir al acabar de vestirte?"

La pregunta me agarro desprevenida porque realmente no sabía a donde iba ni que iba a hacer después de eso así que le respondí la verdad.

"Veras el caso es que simplemente quería salir de la habitación, no quería estar encerrada más tiempo y a donde quisiera ir, pues la verdad quisiera continuar el viaje, eso me recuerda ¿Cuándo volvemos a viajar?"

Parece que mi pregunta también la dejo desprevenida, aun con eso se las arregló para responder rápidamente.

"Veras la princesa dijo que quería partir de inmediato cuando supiésemos que estuvieras mejor así que básicamente sería ahora, pero la verdad no tengo completa confianza en que estés recuperada del todo por eso quería pedirte que te quedaras descansando un poco más de tiempo ¿podrías?"

Cuando formulo su petición puso cara de perrito mientras rogaba, lo cual fue bastante convincente no lo dudo, aun así, no estaba dispuesta a quedarme en esa cama ni un minuto más sin importar quien fuese el que me lo pidiera, le pedí de favor que le dijera a la princesa que me encontraba mejor y aunque aceptó de mala gana fue a avisarle.

Ya que la princesa se enteró de mi situación pidió al conde que nos ayudara con las preparaciones para el viaje ya que quería salir antes del mediodía, de inmediato la gente comenzó a realizar los preparativos y en menos de 30 minutos la carreta estaba lista para partir nuevamente

Nada interesante pasó en los siguientes 2 pueblos así que son cosas que se pueden dejar de lado y justo cuando había comenzado a sentir el viaje se asomó sobre la colina la ciudad capital del reino.

Desde esa distancia ya se podía notar que la capital era mucho más grande que los pueblos y ciudades que habíamos visitado, ciertamente digna de ser llamada la capital, aunque quedaba opacada por el palacio que parecía alzarse en el centro de ella, aunque debo decir que es una cosa demasiado grande para mi gusto.

Cuando la princesa notó que la capital era visible se cubrió con un manto para que nadie supiese quien era ella, no la culpo, ya que solo algunas personas sabían que la princesa estaba fuera de la ciudad y debía ser lo más discreta que le fuese posible, luego de esto llegamos a una gran puerta que controlaba el ingreso a la ciudad, los muros que rodeaban a la misma eran realmente grandes e impresionantes al punto de preguntarme como construyeron eso en esta época.

Según el mapa que habíamos conseguido la capital se llama Delus, pero como teníamos un mapa continental no servía dentro de la ciudad, pedir ayuda a la princesa me pareció una pérdida de tiempo ya que la realeza solo suele salir durante los viajes y las usuales celebraciones de cada lugar así que pregunté a un guardia donde conseguir un mapa de la ciudad.

En lugar de responderme, el guardia dijo de debíamos pagar un impuesto para entrar, pero de inmediato la princesa sacó una tarjeta grabada, al verla el guardia se quedó helado y ordeno que abriesen la puerta, no me dijo dónde encontrar un mapa, pero ya veré a quién le pregunto una vez me esté dentro.

Si algo sale bien hay que admitirlo, ver una tienda con un gran letrero que dice MAPAS en él es una de esas cosas, realmente llevar a la princesa al palacio no era un problema, simplemente había que ir a la cosa más grande de la ciudad.

Llevar un mapa era solo para poder ubicarse después de haber cumplido el objetivo ya que entre mis planes estaba incluido dar un paseo turístico, aprovechar de hacer a las tiendas una visita de aprovisionamiento y para vaciar un poco mis problemas, igual encontramos algo útil para el camino de vuelta.

Mi dinero era 5 de oro, antes era más, pero mis pequeños caprichos del viaje me costaron una cantidad de mis fondos, aun así, no creo que haya gastado demasiado y cobrar por la escolta de la princesa traería una buena cantidad a la bolsa.

Ahora que recuerdo no creo haberles dicho nunca al resto cuál era la recompensa de la misión, creo que mis amigos están un poco locos ya que vinieron todo el camino hasta acá sin saber que beneficio traería, bien pude cobrar y darles un pan duro sin que pudieran reclamar nada.

Con un detalle como ese solo se puede esperar la confianza absoluta o el mismo nivel de ingenuidad, supondré que es confianza y mantendré la que pusieron en mí.

Cuando paramos en la tienda del mapa les conté acerca del pago por la misión, el cual era de 10 platinos, como esa moneda equivalía a 100 de oro cada una básicamente eran 250 monedas de oro por persona, que era una recompensa muy buena, ya que supieron todo nos pusimos de acuerdo en comprar el mapa, como su costo era de 5 oros aportamos una moneda de oro y 25 de plata cada uno y nos dirigimos al palacio.

A diferencia de la primera ciudad que conocí en este mundo el problema de la esclavitud era algo bastante grave y se podía notar la diferencia solo con la vista, mientras la carreta avanzaba podíamos ver como las personas eran subastadas en callejones, y al ver salir a alguien en su mayoría traían casi arrastrando a otro encadenado, ver esas cosas me dejan la piel de gallina y me hacen preguntar si los que usan a la gente de esa forma nunca han intentado ponerse en los zapatos de otros.

Según nos íbamos internando en la ciudad se podía apreciar el cambio de ambiente, a diferencia de nuestra ciudad las zonas con asfaltado de piedra eran mucho más grandes y parecían cubrir media ciudad, también dejaron de verse tantos negocios informales y se daba paso a tiendas lujosas, hasta los que parecían ser esclavos no eran tan numerosos como los vistos en las zonas cercanas al muro.

No debían faltar más de 15 minutos antes que llegáramos al palacio, por eso decidí arreglar un poco mi desordenada ropa, la princesa decidió quitarse la capa ya que habíamos llegado a la zona lujosa de la ciudad y cualquier peligro era casi nulo, ya que hay un gran número de guardias custodiando las calles.

Llegar de invitada al lugar más lujoso de todo el reino debía ser la cosa más increíble, o al menos yo debía sentirme así, solo por eso decidí sacar el reproductor y ponerme a escuchar una de las canciones que más ambiente me provocan, me siento mal por haberme aprendido el título, pero escuchar "la cabalgata de las valquirias" hace que se me olvide de inmediato.

La música de amiente ya estaba lista y como dura como 5 minutos debería ser suficiente para llegar a pasar por el portón y quitarme los auriculares antes de que alguien además de la princesa sepa de la existencia de mi música, que bueno que decidí pedirle que guardara el secreto antes.

Tengo una gran envidia de las personas que tienen esa absurda suerte de nacer en una familia real, como el mundo siempre suele estar en mi contra, el destino se distancio hasta tal punto de que un jabalí gigante se pusiera a perseguirme a los 10 minutos de llegar acá y ahora parece que quieren molestarme aún más haciéndome venir a un palacio lujoso para burlarse en mi cara, si todo fue parte de ese dios juro que me las pagará algún día.

Una vez pare de compadecerme de mi misma me di en cuenta que ya nos encontrábamos en el portón principal y que la carreta se había detenido, incluso cuando todos habían salido de la carreta me había quedado absorta en mis pensamientos, como consecuencia llame bastante la atención, pero decidí que no me volvería a sonrojar por todo así que saque fuerza de donde no había y evite que se subiera la sangre se pasara a las mejillas, terminó en mis orejas pero gracias a mi cabello no se notó demasiado.

Al igual que en la mansión del conde, un mayordomo se encontraba escoltándonos por un camino que creo lleva a la sala de audiencias, pude asumir esto gracias a que también venían con nosotros 4 guardias que hacían escolta a la princesa, sea como sea no tomó mucho tiempo llegar y antes de notarlo nos hallábamos frente a otro gran portón.

Cuando la puerta se abrió dio paso a una enorme sala con una silla exageradamente alta coronándola en la otra punta de la misma, a los lados había grandes pilares y en frente de cada uno había una armadura vacía a fin de ser usada como un adorno, lo que se esperaría de un salón real.

Junto a la gran silla se encontraba una de la mitad de altura que imagino pertenece a la reina, y a los lados de ambas sillas se encontraban un par un poco más pequeñas, pero del mismo tamaño entre sí, que deberían pertenecer a los príncipes, todas las sillas con excepción de una estaban ocupadas, la que estaba libre debería ser el lugar de la princesa Sonia la cual llevamos de viaje durante un rato.

El mayordomo había continuado su marcha después de anunciarnos, nosotros caminamos tras el cómo nos habían pedido en la entrada, al llegar a una distancia en la que el dialogo sin levantar la voz era posible el rey le hizo una seña al mayordomo para detenerse y nosotros nos detuvimos con él.

Ante nosotros se encontraba un hombre viejo con gran barba y una corona (el rey), junto a él estaba la reina, quien parecía ser menor a él con al menos 20 años y en la última silla que debía estar ocupada estaba quien supuse que sería la otra princesa de este reino, aun así, es un poco extraño ver a un país con 2 princesas y sin príncipe, pero aún parecen tener tiempo.

Después de lo que pareció un minuto de análisis parece que ya era hora que el rey se pronunciase, supe esto ya que se aclaró la garganta como si fuera una señal para los presentes de que debían poner atención a su discurso, de inmediato su voz resonó por toda la sala.

"Nobles aventureros presentes en la sala, yo soy el Rey de este país Homeless Rusk Heinzterld XII, habéis cumplido con la tarea que os fue encomendada gracias a sus acciones en el ataque que había sucedido hace ya un par de semanas y trajisteis a mi hija a salvo hasta el castillo, os debo mi gratitud, por ello pido que nos acompañen en el banquete de bienvenida a la princesa para celebrar su éxito en las negociaciones que se llevaron a cabo con el país vecino"

Mientras el rey recitaba su discurso tuve que suprimir unas increíbles ganas de reír a carcajadas que iniciaron justo cuando él dijo su primer nombre, esto paso gracias a que si traducimos Homeless del inglés termina siendo o básicamente lo que conoceríamos como un indigente en otras palabras, mi maestra comenzó a sospechar de mi actitud y me dio un golpe suave con su codo para que me tranquilizase, aun así, era difícil.

Parece que nadie aparte de mi maestra notó mi situación durante el discurso y eso fue de mucha ayuda ya que si me veían reírme frente al rey sin razón pudo haber sido tomado como una burla descarada a la autoridad, no quiero pensar que hubiese sido de mi si eso llegaba a ocurrir en la sala del trono.

Al final el rey anuncio que el banquete iba a ser llevado a cabo en unas horas y en ese tiempo éramos libres de pasear con libertad por las cercanías del castillo y por los jardines del lugar, cuando nos informaron que podíamos retirarnos el primer lugar que decidí buscar fue como la última vez, el jardín trasero del palacio, no era tan variado como el jardín del conde, pero aun así era algo bonito de ver.

Cuando encontré una fuente cercana me senté en el filo de roca para poder ver el paisaje desde una mejor perspectiva, pero al alzar la mirada en medio de una gran zona se hallaba una niña con una ropa como las que usaban los esclavos, debía haber tenido unos 11 años según mis cálculos.

Por su apariencia saltaba a la vista que era de la raza de semi humanos ya que se podían ver unas orejas de animal sobre su cabeza, ella parecía ser como un zorro debido a la forma que tenían sus orejas y cola, lo extraño es que su cabello no tenía el color de un zorro, en su lugar tenía un color blanco que parecía estar mesclado con un rosa claro, realmente era muy bonito de ver.

Al principio creí que ella estaba jugando con las flores que había en el campo, pero cuando me fijé bien parecía estar hablando con alguien y como soy una persona curiosa me acerque de inmediato a la niña para ver con quien conversaba.

Mientras me acercaba aún mientras me acercaba por su espalda ella se volteó como si alguien le hubiese avisado de mi presencia, como ya me descubrieron no tuve más opción que hablarle directamente.

"Hola"

No me respondió, pero de todas formas continué hablando.

"Perdón por acercarme sin avisarte, pero parecía que estabas hablando con alguien y me dio curiosidad"

Seguía ignorándome como si hubiese algo en las flores que no quiere que vea, no sabía que decirle así que use una de mis últimas experiencias.

"¿No será que estabas conversando con un hada?"

"NO, yo no... sé de qué me hablas"

Cuando dije esto ella se sobresaltó como cuando a una persona que está cómoda en un lugar caliente le ponen un hielo en el cuello y por fin se puso a hablar, aun así, que reaccionara por decir hada era sospechoso así que tenía planeado afondar en el tema.

Justo cuando iba a seguir preguntándole, se apareció un hada como la del otro día desde las flores que estaban frente a la niña, no parece ser que las hadas sean muy comunes, pero para encontrar 2 en el mismo viaje creo que tengo mucha suerte, al verme ella comenzó a hablar.

"Tu... pareces tener la bendición de un hada, es extraño ver a un humano en el que un hada haya confiado, no te preocupes Mika ella es de confianza"

Con lo que dijo el hada la niña bajó totalmente la guardia, incluso hasta le brillaron los ojos debido a lo que había dicho el hada, pero aun así me sigue pareciendo raro, la niña parecía haber comenzado a hablar.

"Disculpa, ¿realmente conoces a un hada?"

"De hecho la conocí antes de venir a esta ciudad, la salve de una gigantesca araña venenosa"

Le dije eso y la niña se emocionó aún más que cuando el hada dijo que era de confianza, después me bombardeo de preguntas.

"¿De verdad? ¿Qué tan grande era la araña? ¿Cómo la salvaste? ¿Alguien más te vio con ella? ¿Cómo era el hada que encontraste"

La emoción de esta niña no parecía tener límites así que la detuve antes que dijera tantas preguntas que yo no fuese capaz de responder.

"Espera un poco, te llamabas Mika ¿verdad?, déjame responderte a lo que me has preguntado hasta ahora y después continuamos"

"¿Lo primero es el tamaño de la araña verdad?, creo que podría ser del tamaño de mi brazo fácilmente, el cómo lo salve es un truco que me invente ese momento por la situación, no creo que nadie más haya visto la araña y el hada que encontré se parecía mucho a tu amiga que está ahí, solo que en lugar de ser cubierta por follaje morado como ella la mía tenía uno verde"

"¿No te dio miedo luchar contra una araña de ese tamaño?"

"De hecho estaba aterrada hasta el punto que no me podía mover porque no me respondían las piernas, por eso fue necesario que me inventara ese pequeño truco"

"Eres... increíble"

Realmente creí que no podía emocionarse más por nuestra conversación, pero me equivoqué, de inmediato ella preguntó.

"Llevas un rato hablando sobre un truco, ¿podrías enseñarme?"

Realmente no creo que haga ningún mal mostrarle así que repetí lo que hice las últimas veces y envié el maná a la punta de mis dedos para poder atraer agua, lo único malo de esto es que cuando lo hago pareciera que yo fuera E.T. pero hasta que logre hacerlo sin iluminar mi dedo deberé aguantarme eso.

Cuando las puntas de mis dedos comenzaron a brillar se comenzó a brillar se comenzó a acumular un poco de agua frente a mis dedos nuevamente, Mika parecía hipnotizada mientras veía mi habilidad, cuando tuve una cantidad relativamente grande acumulada le dije.

"Bueno es más o menos eso, pero en una mayor cantidad, ¿Qué te parece?"

Ella realmente se había quedado con la boca abierta después de verme, me pregunto si no debí mostrarle.

"¿Cómo hiciste eso? parecía magia, pero es diferente, tus dedos comenzaron a brillar y, y se formó un globo de agua que se hacía más grande, ¿eres una maga?, nunca vi a alguien hacer algo así, enséñame como por favor"

Parece que realmente no debí de mostrarle nada, pero lo hecho, hecho está, debería decirle que guarde el secreto de lo que hice o podría volverse un problema mientras esté en la capital, en especial teniendo en cuenta que siendo esclava ella tiene un amo el cual podría causarme problemas si existe una palabra fuera de lugar.

"Tratare de enseñarte como lo hice, pero debes prometerme que no le contaras a nadie sin importar si logras hacerlo o no"

"Está bien"

Realmente no sabía si estaba bien, pero confiare en su palabra de momento.

"Para empezar confirmemos algo, ¿sabes usar magia de algún tipo?"

Si Mika sabe usar magia me ayudará un poco a la hora de enseñarle ya que no tendré que darle ninguna base.

"No, el maestro nunca me ha dejado intentar aprender a hacerlo"

"Bueno ese parece ser un problema, ¿segura que está bien que quieras aprender esto?"

"Aunque esté mal aun quiero aprender"

Por lo menos tiene determinación, eso es algo bueno.

"Si es tu decisión entonces comencemos, primero quiero que cierres los ojos y respires profundamente, necesito que sientas tu propio maná, sin eso no haremos ningún progreso"

Según mis instrucciones ella comenzó a meditar de la forma que le dije.

"El maná es como sentir la sangre en el cuerpo, se mueve como una corriente y recorre todo desde los pies hasta la cabeza, debes imaginar como esa energía recorre tu cuerpo y tratar de sentirla"

"Si comienzas a sentir un cosquilleo significa que has comenzado a sentir tu propia energía, mantente haciéndolo hasta que lo sientas"

Seguimos con la meditación unos 20 minutos antes que ella pronunciara palabra, pero cuando pareció sentir algo dijo.

"Creo que siento algo, me hormiguea un poco, pero creo que si me muevo se va a perder"

Parecía que habíamos progresado un poco, pero algo me parecía mal en que fuese un hormigueo en lugar de un cosquilleo.

"Mika, tengo que comprobar algo, ¿te puedes poner de pie?"

Como le había pedido ella intento ponerse de pie, pero de inmediato.

"Me duele, no me puedo levantar, ¿Qué pasa? Siento como un montón de agujas en donde me hormigueaba"

Es exactamente lo que me imaginaba, pero aún tenía que comprobar algo.

"Mika, ¿exactamente dónde sentías el hormigueo?"

Ella señalo su trasero, no había otra conclusión posible, se le durmió el trasero de pasar tanto tiempo en la misma posición.

"Siento romper tus ilusiones, pero parece que solo se te entumeció esa zona por haber pasado tanto tiempo sentada en la misma posición"

Toda la emoción que ella había sentido antes se esfumó en ese mismo instante y me miro con ojos llorosos.

"Yo... creí que estaba progresando, quería ser más fuerte para poder defenderme algún día"

Mika dijo algo que me dejo un nudo en la garganta, no quería verla llorar así que le dije.

"Mika, no te preocupes, hay algunas cosas que simplemente no se logran en el primer intento, si llegas a aprender magia algún día será mucho más fácil que ahora, no te desanimes, podemos seguir intentando en otro momento"

Parece haberse calmado un poco con lo que dije ya que se limpió las lágrimas, el hada había desaparecido hace ya un rato por lo que solo estábamos las dos en ese campo de flores, ella dijo que ya era hora de irse y se despidió con una pequeña reverencia lo cual me hizo sonrojar un poco, parecía que me gane su respeto en poco tiempo.

Antes de volver a entrar al castillo ella se dio la vuelta y volvió corriendo donde mí.

"Disculpa, pero me olvide de preguntar tu nombre"

"Yo soy Matoi, fue un placer haber pasado un rato contigo Mika, espero que podamos vernos en otro momento"

"Gracias por acompañarme, no olvidare tu nombre, nos vemos"

Después de eso salió corriendo hacia el castillo y entro por una puerta de madera que se hallaba cerca.

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