Él es como Lucifer.

Gael y Heloá miran a Francine y dicen juntos;

- ¿10 días?

- ¿10 días?

¡La diferencia es que él está diciendo con una sonrisa demoníaca en los labios y ojos, ya Heloá con desesperación y angustia!

- ¿Mamá, puede ser dentro de un mes o hasta seis?

- ¡Por mí podemos casarnos mañana mismo!

Gael mira a Heloá y aprovecha que su mano está en su cintura y aprieta... Pero ella saca su mano de allí y va hacia su madrina. ¡Gael está amando inverniza Heloá! ¡Es muy divertido para él!

- ¡Heloá, mi hija! ¡Usted ya sabía que la boda iba a suceder! ¡Será de aquí a 10 días!

- ¡Gael, tenemos que decorar su mansión! ¡Eso no es adecuado para una pareja!

- Haz lo que quieras... ¡Mamá!

- ¡Quiero irme! ¿Mamá, papá, podemos irnos ya?

- Mi ángel... ¡Dormirán aquí esta noche!

- ¡No!!! ¿Por favor, vámonos?

- ¡Ya oíste a tu madrina! ¡No seas grosera!

Heloá mira a Gael y ve una sonrisa de shershire abrirse en su rostro...

- ¡Él no va a entrar en mi cuarto! ¿Madrina, estoy un poco cansada, puedes acompañarme hasta el cuarto que iré a dormir?

- ¡Gael, lleva a Heloá a la habitación que le preparé!

- ¡Por supuesto, mamá!

- ¡Le pido a Dios y quien me atiende es el diablo! Qué odio.

Él pone su mano ligeramente en la espalda de Heloá para conducirla como si fuera su bien más preciado y él fuera un caballero. ¡Todo es mentira! Cuando llegan a la habitación, Gael la empuja hacia adentro...

- ¡Eres un idiota!

- ¡Tengo algo importante que resolver ahora, no cierres la puerta de tu cuarto! ¡Quiero jugar contigo esta noche!

- ¡Vete a soñar!

Él sale riendo... ¡Heloá busca por todo el cuarto hasta encontrar una llave y cuando la pone en la cerradura no cree que cerró! Ella es feliz y decide tomar un baño.

Ella busca por el cuarto una ropa para dormir y solo encuentra una blusa grande. ¡Heloá, tuvo que lavar su prenda íntima y pensó que iba a encontrar ropa aquí, ya que su madrina preparó el cuarto para ella, pero solo tiene esa blusa!

- Olvídalo... - Heloá, renuncia a buscar algo mejor.

Se pone la blusa y se acuesta en la cama, está tan cansada que pronto duerme. ¡Ella despierta, no sabe exactamente cuánto tiempo después, pero allá abajo está todo silencioso, menos por el ruido que viene de la puerta de su cuarto! Hasta que él dice y su corazón se hiela cuando Gael dice:

- ¡Te dije que no cerraras la puerta!

Heloá se queda en silencio con la esperanza de que piense que está dormida, pero cuando escucha el clic de la llave en la puerta, ¡su corazón se congela! Ella tira de las almohadas al ver la puerta abrirse y él, usando solo un pantalón de chándal, entra en el cuarto... Heloá lo ve cerrar la puerta y encerrarla tirando la llave encima de un mueble que parece un armario. Ella mira donde dejó la llave, pero él la coge antes que Heloá y la arroja allí también.

- ¡Sal de aquí! ¡Voy a gritar para que todos escuchen!

- ¡Puedes gritar! ¡Estás en mi cuarto y él aprueba el sonido! ¡Puedes gritar hasta perder la voz! ¡Te dije que quería jugar contigo!

- ¿Por qué eres tan idiota conmigo? ¡Te conozco desde hace menos de 24 horas y te odio como nunca he odiado a nadie!

- ¿Por qué? ¡Por tu culpa no puedo vivir mi vida de la manera que quiero! ¿Y ahora me dices quién debería pagar?

- ¡También estoy en esto por obligación! ¡Ya dije que no quiero casarme contigo!

Heloá se levanta e intenta correr hasta la puerta, pero él la sostiene y la tira a la cama con una facilidad, haciendo que parezca hecha de papel... Gael ve que Heloá está desnuda por debajo de la blusa y se fascina una vez más al ver su intimidad.

— ¿Estás lista para mí, cariño? ¡Mira, te diré algo, no me caes bien, pero tengo que admitir que estás muy buena! ¡Quiero saber a qué sabe!

Gael va al armario y coge una cuerda y Heloá habla;

- ¿Qué vas a hacer?

Sostiene sus dos manos y las ata, sujetándolo sobre la cabeza de Heloá en la cabecera de la cama... Ella comienza a temblar y él sujeta sus piernas abiertas firmemente y dice;

- ¡Disfruta de la muestra gratis que te voy a dar, ya que esto no volverá a suceder!

Gael pasa su lengua en la intimidad de ella que se retuerce con el tacto y él la instiga;

- Despertaste ese interés en mí, solo no se lo digas a mi novia... ¡Ella es celosa!

Gael besa y chupa la intimidad de Heloá, ella no quería tener su placer, pero se hizo imposible con lo que Gael estaba haciendo... Para no darle el placer de oírla gemir, se muerde el brazo.

- ¿Por qué no me dejaste oír tu gemido? ¡Ahora voy a tener que castigarte! ¡Zorra!

Él se retira, se expone erecto a Heloá, pero no entra en ella... Heloá acaba dejando su cuerpo sentir todas las sensaciones, al recordar lo que Cat dijo. Ella tiene su placer de nuevo, pero él también, y termina esparciendo algo por toda su barriga... Heloá mira a Gael y habla;

- ¿Satisfecho?

- ¡Lo estaré cuando tome lo que me fue prometido! ¡Tu vida no será feliz a mi lado, pero será un placer tomar su virginidad!

Gael va al baño a tomar un baño y Heloá se queda en la cama. Cuando él finalmente sale del baño, ella corre hacia allá y cierra la puerta, toma su baño y sale de allí pensando que él ya fue, pero él está allí en la cama acostado y ella pregunta;

- ¿No te vas?

- ¡Ve tú! ¡Ese es mi cuarto, te lo dije!

- ¡Voy a ir!

Heloá camina hacia la puerta, pero cuando intenta abrirla está cerrada...

- ¡Está cerrada y el lugar donde tiraste la llave no alcanzo!

- Está cerrada... ¡Y no tengo ganas de abrirla!

- ¡Entonces quédate con esa cama idiota! ¡Me voy a acostar en ese sofá!

Ella va al armario y coge una manta, pero él la agarra por detrás y la lleva a la cama...

- ¿Qué estás haciendo?

- ¡Vas a dormir conmigo! ¡Yo mando y tú obedeces!

- ¡Eres un gran idiota!

¡Ella se acuesta de espaldas a él y casi apoyándose contra la pared, pero él la tira pegándola en su cuerpo y apretándola allí! Lo único que piensa es:

- "¡Amanece pronto, por favor!"...

Sin mirar a Gael, ella habla;

- ¡No quiero ver tu cara hasta el día de esta maldita boda!

- ¡Voy a pensar en tu caso! Estoy disfrutando mucho la forma en que reaccionas a mí... ¡Es interesante!

Ella no responde y cierra los ojos... ¡Cuando amanece, Heloá se asusta con la situación! ¡Ella está acostada en su pecho y él está abrazado con ella! ¡Parecen una pareja! Y cuando ella intenta salir, él la tira y dice;

- Quédate amor, quiero dormir un poco más... ¡Sabine!

Heloá empuja a Gael con fuerza y él abre los ojos, la ve resentida por haberla llamado Sabine.

- ¡Vete! ¡Te abriré la puerta!

¡Heloá corre hacia el baño y recoge sus cosas, cuando sale del baño e intenta pasar por él el mismo la sostiene por los brazos bien firmes y la coloca en punta de los pies dándole un beso, ella acaba mordiéndolo para que la suelte y él se ríe! ¡Heloá lo odio, pero también odio a sus padres por obligarla a casarse con él!

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