Un vestido para usar en el infierno.

Cuando Heloá sale del cuarto se siente libre y respira hondo... mira a los lados y no ve a nadie. Entonces entra en el cuarto frente a usted, mira todo por allá y se da cuenta de que ese fue el cuarto preparado para ella, ya que aquí tiene ropa y lencería femenina.

— ¡Ese idiota lo hizo a propósito! ¡No puedo dejar que me intimide así! ¡Las cosas que me hizo en esa habitación no quieren dejar mis pensamientos! ¡No quiero ni tocarme de tanta rabia que estoy!

En el baño ella pasa la mano por su cuerpo y en los lugares que él tocó... Se reprende por haber sentido algún deseo por él.

Heloá termina el baño y se arregla, pone sus cosas en una bolsa y baja, pero él la alcanza en la escalera y susurra en su oído solo para provocar;

- ¡Te ves muy sexy en ese otro vestido! ¡Felicitaciones, despertó mi interés una vez más!

- ¡Vete al infierno, Gael!

Él, abusado como le dice a Heloá;

- ¡Vamos juntos, amor! ¡Verás que no es tan malo!

Ella lo ignora y corre hacia la puerta hasta que su madrina Pregunta;

- ¿Adónde va mi ángel? ¡Tenemos que salir a la prueba y elegir el vestido! ¡Gael, vas a ir a la prueba del traje!

- ¡Nos casamos ayer! ¿Para qué tanta prisa con vestido y traje?

- ¡Mi ángel, hasta la fiesta y la iglesia ya están bien! ¡Solo falta esa parte y quiero dejarlo listo también!

- ¿Por eso me hicieron dormir aquí? ¿Para hacerme comprar el maldito vestido?

— ¡Se supone que eres feliz, Heloá! ¡Mi hijo es hermoso y atractivo! ¡Y tú también, tus hijos serán hermosos! ¿Sabes cuántas mujeres quieren a tu prometido?

— ¡Tengo que estar de acuerdo con mi madre por primera vez! Yo soy un gato y tú incluso eres hermosa, nuestros hijos serán hermosos... ¡Y la otra parte también, hay una fila de mujeres queriéndome!

- ¡Entonces, cásate con ellas! ¡Y yo no quiero tener hijos contigo!

- ¡Pensé que ustedes se habían arreglado ayer!

- ¿Y nos arreglamos, verdad, querida?

Gael se acerca a Heloá y la abraza, pero ella no reacciona, entonces él le susurra;

— ¿Quieres que le diga a todo el mundo que te quité la virginidad cuando me rogabas que profundizara en ti? ¡Mira que no sentiré vergüenza alguna de decir eso, ya que mi dedo estaba dentro de ti esa madrugada!

Con un odio mortal, ella lo abraza de vuelta y su madrina dice:

- Mucho mejor ahora... ¡Vamos, el taller fue reservado para nosotros todo el día!

Cuando todos llegan al taller, Nadyle y Francine quedan encantadas... Ya el novio tira a la novia a un rincón solo para irritar más y dice;

- ¡Solo para no decir que no te advertí, escoge un vestido que pueda rasgar con facilidad! ¡O usaré unas tijeras sin problemas!

- ¡Voy a escoger uno que tenga tanto paño, más tanto paño que cuando usted consiga llegar donde realmente quiere ya haya perdido la voluntad!

- Será divertido... ¡Para mí al menos!

Gael suelta a Heloá y Nadyle la tira al otro lado del lugar... ¡Se ponen varios vestidos delante de él y aunque Heloá hermosa no quiere ninguno, la razón es obvia, ella no quiere casarse con Gael!

- ¡Pruebe este! ¡Coge a mi hija! ¡Disfrute y no se ponga su ropa de nuevo, tiene muchos vestidos para que usted pueda probar!

¡Ya llevan unas tres horas y no han decidido qué vestido va a ponerse Heloá, ha experimentado tantos que el sinónimo de "lo que sea" gana un sentido diferente para ella!

Heloá escucha algo y después silencio total, ellas la dejaron en el probador y ni para ayudarme a quitarse el vestido exagerado y extravagante. Cuando cierra la boca, Heloá ve a Gael entrar en el probador usando un hermoso traje gris.

- ¿En serio no me dejarás en paz ni aquí?

- Somos los tortolitos insaciables... ¡Querida, somos más pecadores que los santos!

- ¡Sal de aquí! ¡No te quiero aquí!

- ¡No me gusta ese vestido! ¡Ya elegí uno para ti que está allí separado, úsalo!

— ¿Cómo llegaste hasta aquí? ¡Estabas con mi padre y mi padrino y estoy seguro de que las dúas casamenteras locas no te dejarían entrar aquí!

- Mi pobre padre tuvo una reacción alérgica a algo y están con él... ¡Y estoy aquí contigo!

Gael pasa la mano en su cuello y habla;

- Tu cuello está tratando de ganar unas marcas hechas por mis labios.

Y cuando me acerco, ella lo empuja y dice:

- ¿Te estás volviendo loco? ¡No me toques! ¡Seguro que tienes tu dedo en ese ataque alérgico!

Él cambia la expresión de su rostro y sosteniéndola firme la coloca contra el espejo y apoyando todo su cuerpo en el suyo, él dice a los susurros;

- Heloá... ¡Soy un poco psicópata, si no te has dado cuenta! ¿Ahora me dices, te ha gustado sentir mis labios en tu sexy y apretada intimidad esta madrugada?

- ¡Suéltame! ¡La respuesta es no! ¡No!!

— ¡Oh, Cariño, no me mientas! ¡Puedo descubrir la verdad con un solo dedo y tocarte como un violín, me aseguraré de que saldrán las melodías más dulces de tus hermosos labios rojizos!

- ¡Voy a huir de ti! ¡Después de esta maldita boda! ¡Lo prometo!

— No me malinterpretes, chica, pero no me gustan las promesas y tú no vas a ninguna parte antes de acostarte en mi cama... ¡Nadie te dijo que me encendieras como un cigarrillo! Te conduciré como un Lamborghini.

¡Gael besa a Heloá después de decir eso y sale de allí riendo como si hubiera ganado un partido de algo importante! Cuando Nadyle y Francine vuelven, y vienen con un vestido justo al cuerpo, jarabe de sirena, en la parte de los pechos tiene un hermoso corazón que se forma en evidencia... Heloá se mira en el espejo y piensa;

- "¿Voy a ser sacrificada por un demonio? ¡Sí, lo haré! ¡Pero voy a estar preciosa! ¡Puedes estar seguro, Gael, lo que pueda hacer para escapar de ti, lo haré!"

Heloá se alegra al quitarse el vestido y aquellas locas comienzan a hablar del velo de la novia...

- ¡Me quiero ir!

Heloá habla mirándolas que dejan de hablar y miran a Heloá.

- ¡Ni mi Padrino teniendo una reacción alérgica puede detenerlos!

- ¿Cómo sabes eso? - Francine pregunta curiosa.

- ¡Tu querido hijo! ¡Ahora quiero irme, porque tengo hambre!

Y ellas ignoran el llamamiento de Heloá mientras hablan;

- ¡No podía verte vestida de novia, Francine!

- ¡Pero él no sabe cuál será el vestido! ¿Qué hicieron?

- Qué es lo que más le gusta hacer... ¡Hacerme la vida imposible! ¿Ahora puedo vestirme e ir a un restaurante de comida rápida?

- ¡Ah, pero usted no va a comer mierda para engordar y no caber en el vestido mismo!

- ¡Mamá, tengo hambre!!! ¡Quiero comer!! ¡Ya estoy viendo la luz blanca que viene del cielo para llevarme! ¡No me dejaron ni desayunar!

- Nadyle, eso es verdad... ¡Y ella tampoco puede estar muy delgada o el vestido se verá raro!

- ¡Ok, pero será un restaurante de nuestra elección! ¡Nada de porquerías!

- En serio... No quiero pasar el resto del día con ustedes hablando de esta mierda de...

Gael entra sintiéndose el rey del mundo y pone un brazo sobre los hombros de Heloá y dice:

- ¿Alguien más tiene hambre? ¡Mi Padrino y mi Padre ya fueron al restaurante que hay en la esquina y les dije que vayan también!

Heloá trata de quitar su brazo de sus hombros, pero Gael la sostiene firmemente, ella lo mira y habla irritada;

- ¡Perdí el hambre! ¿Mamá, puedo ir a casa?

Miran a Heloá y después se miran y ella pregunta;

- ¿Qué te pasa?

- ¡Nos quedaremos en casa de Fran hasta que la mansión de ustedes termine la reforma que mandamos hacer, ya que faltan pocos días para la boda de ustedes!

Gael se ríe, pero disfraza toser y Heloá habla;

- ¿Por eso me prepararon esa habitación? ¿Por eso no me dejó desempacar cuando llegamos?

- Querida, falta tan poco tiempo para la boda... ¡Va a ser rápido y ustedes van para la casa de ustedes!

Heloá mira a Gael y su cara de paisaje la irrita...

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