Capítulo 10: Soñando con un futuro

Me cubrió con la manta extra y se recostó a mi lado, suavemente me atrajo a él y yo encantada no podía mas que recogerme sobre ese pecho tan fuerte, oh que músculos, que segura me sentía así. Aún no podía respirar bien y quería decirle tantas cosas pero esperé a poder hablarle coherentemente.

- Mauricio, no sabes lo que me hiciste sentir- le dije un tanto apenada y escondiendo mi rostro en su pecho.

- Claro que lo sé, lo pude sentir y tocar a la vez - al levantar mi rostro me miraba complacido y hasta me guiñó un ojo.

Ayyy, que verguenza, tragame tierra, pensé, seguro que estaba roja como un tomate.

- Tu cuerpo me responde hermosa y se que desperté todo esto en tí por primera vez, me equivoco? - tembló un poco su voz y me miraba con mucha insistencia, tomó mi barbilla con una de sus manos mientras esperaba mi respuesta, de seguro le interesa mucho, me imaginé.

- No te mentiré - le respondí despacio - imaginé mucho un momento como este pero nunca espere sentir todo lo que me hiciste sentir. No tengo como explicarlo.

Me dió un beso rápido pero fuerte - No hace falta, te creo, así como yo te espere todo este tiempo, creo que tu también me estabas esperando para hacerte sentir y mostrarte sobre esto. - me beso ahora mas suave, intentando adueñarse de mi boca otra vez.

Después de besarnos con tantas ansias, me decidí a decirle.

- Mauri ya no somos unos niños, estaba ilusionada contigo y eso se perdió, pero lo que siento ahora es mas real, mas... Intenso.

- Mi ángel yo siento lo mismo y más, no quiero aprovecharme de tu confianza, esto irá de a pocos, estaremos lejos dentro de poco, pero no nos separaremos otra vez.

- Pero, pero Mauri yo no te hice nada a ti, no es justo, yo también quiero que estes como yo - intenté besarlo, ponerme sobre él.

Pero el me detuvo diciendo - no mi ángel, estoy mas que satisfecho con lo que hicimos, iremos con calma si?- estaba dudoso pero tranquilo, así que no insistí.

- Ángel se que no tienes experiencia en esto, no quiero forzar nada, quiero que estemos listos, ambos, para lo que viene. Tu sabes el genio que tiene mi mamá y ella siempre nos ha inculcado a respetar a las mujeres, en cualquiera que sea el caso.

- Tu mamá? Siempre fue muy amable conmigo, da un poco de miedo pero se que es muy buena con ustedes.

- No tienes idea de la retada que me dió cuando se enteró del problema con Elena, me pidió que te dejara tranquila y me acerque a ti sólo cuando tenga algo que ofrecerte.

-Tu no eres para un juego Mariangel, tu serás para mí completa y para siempre, entendiste?. - me dió un beso fuerte que me dejo sin aire pero sentí que me decía la verdad.

- Pero cuando te irás? Cuándo vuelves? No nos queda tanto tiempo o sí? - le pregunté un poco agitada y desorientada, levantándome rápido y dandome cuenta que estaba semidesnuda.

Se levantó también y me dijo -Viajaré en unos días, debo tomar el entrenamiento antes de empezar los cursos, no tendré vacaciones, pero en cuanto haya días libres estaré de regreso, te lo prometo.- mientras tanto me ayudaba a ponerme mi polo y encontró mi saco.

Ya listos y acomodados nos sentamos abrazados a mirar las estrellas.

- Nunca me habia sentido con tanta dicha y a la vez paz, pienso que es un sueño y que mañana todo esto no existirá.

- No digas eso hermosa, verás que tenemos mucho tiempo por delante.- me decia mientras no dejaba de besarme pero al mismo tiempo me acariciaba por debajo de mi polo.

Que bien se sienten esos besos y creo que tiene razón así que de a pocos yo pienso darle todo de mí 😊.

Ambos teníamos esas ganas de sentir la piel del otro y esos besos subidos de tono eran una delicia, acariciar su espalda y sentir esa dureza de sus músculos, hacia el beso mas intenso, en este momento sólo sé que si me quisiera pedir más, yo simplemente se lo doy.

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