Túnel sin salida

Mamá -

- ¿si? - Paula se sentó en el sofá

- Conseguiremos el donador que sea compatible ya lo verás - Wendy seguía siendo positiva

- Me parece que es una misión titánica hija - Paula sonrió con amargura - ¿dónde conseguiremos tanto dinero?

- Iré a trabajar

- ¿cómo? ¿estás loca? ¿se te safo un tornillo? - Paula se levantó como un resorte del sofá y se acercó a su hija

- Si lo haré, ya que si es la única manera de tener ese dinero lo hago - Wendy fue firme en su decisión

- No, no lo harás ¿que pasará con tus estudios? no los voy a permitir - Paula se mostró molesta

- Mamá, no los voy a descuidar es obvio

- Pero el trabajo te quitará tiempo - Replicó Paula

- Mamá orita hay empresas que aceptan estudiantes universitarios y los horarios son flexibles - explico calmada - solo quiero conseguir ese dinero

- No lo acepto Wendy Alejandra Jones Scott - dijo Paula enojada

Wendy puso los ojos en blancos cada vez que su madre le decía hasta los apellidos era porque en verdad estaba muy, pero muy enojada

- Mamá por favor ¿tenías que decir mis apellidos? eso solo me recuerda a qué soy una venezolana con apellidos extranjeros - bromeó Wendy

Paula la fulmino con la mirada

- No tengo la culpa que tengas padres ingleses - gruño molesta - y no seas...

- ya mamá - Wendy la interumpio ya que no estás de animo para una broma

- ¿cómo quieres que tenga humor si estás diciendo que irás a trabajar? de eso me encargo yo

- mamá no tienes que lidiar con el trabajo tu sola, ya tengo 20 años, y ademas ya cumpliré años

- ¿y? ¿que tiene que ver tu edad en esto? estás estudiando y solo necesitas eso estudiar hasta que te gradues, sin nada que te distraiga - Replicó Paula

Wendy negó varias veces

- Me dices que la terca soy yo, pero al parecer tú también así que supongo que lo heredé de ti -

- ¡Wendy!

- Déjame ayudarte por favor mamá, necesitas de ese trasplante es por tu salud ¿que haré el día que no estés? - Pregunto la joven con ojos llorosos - solo quiero ayudar, para que mejores y tenerte por muchos años más, no quiero verte morir, no todavía - su voz fue bajando hasta sonar bajito como un susurro

Paula se conmovió hasta la médula al ver a su hija así

- Está bien - Paula asintió - según tu ¿que trabajarás?

- mmm bueno he pensado en muchas opciones - respondió Wendy y se encogió de hombros - de mesera en un restaurante, en una luncheria, eh de cajera, vendedora, nose cualquier cosa que sea decente claro está

- Mmm - Paula no dijo nada más - todavía no me convence, no quiero que descuides tus estudios

- madre acuérdate que soy la primera de la clase, así que por ahí no te preocupes - Wendy le aseguro - no voy a descuidar los estudios te lo prometo, por cierto me acordé del Castillo el centro textil, he escuchado que el sueldo es muy bueno y lo bueno es que acepta estudiantes - dijo sonriendo

Paula abrió los ojos

- Nos queda lejos de la casa hija

- ¿y que importa? si me aceptan puedo hacer los arreglos para llegar a tiempo, o hasta Erick me puede llevar - Wendy buscaba las posibles soluciones

- Está bien, pero solo promete que no irás a descuidar tus estudios, eso es todo lo que pido

Wendy asintió

- Si madre lo haré te lo prometo - respondió y elevó su mano derecha en el aire

- ¿y si no consigues el trabajo en esa empresa? - pregunto Paula con la esperanza que su hija declinara

- Mamá nada me va a detener que consiga un trabajo - Wendy sabía lo que pensaba su madre - si no consigo ningún trabajo en ninguna empresa o en algún comercio, sencillo me voy a vender arepas por supuesto tendría que hacerlas tú porque de ninguna manera vendería arepas zombies - la joven bromeó

- jajajaja - Paula se rio a carcajadas y eso hizo feliz a la muchacha - Tienes que mejorar en eso hija jajaja

- jajajaja si tienes razón, pero todavía no logro que queden redondas, algun día serán unas arepas normales jajaja

- Ese día haré una raya, en donde nose pero la haré y que no se borre - añadió Paula

Luego de ese día en dónde sus esperanzas se vieron derrumbadas. Wendy paso los siguientes días en buscar alguna solución para su madre.

Carmen se ofreció como voluntaria para ser una donante y estaba dispuesta a realizarse los exámenes correspondientes, con tal de ayudar a su amiga. Pero sus animos cayeron en cuanto le informaron que tenía que ser de sangre tipo O

- Oh amiga, cuánto lo siento - dijo triste - pero soy B positivo

- Tranquila amiga mía - Paula sonrió - ya encontraremos al donador

De igual forma fue con Erick y Lía que también se ofrecieron pero como Carmen su tipo de sangre no era la ideal para calificar para ser el donador.

Así que Wendy luego de agotar las probabilidades en conseguir un donador entre sus amigos y vecinos, se vio en la necesidad de buscar seriamente ese trabajo. Hizo varios currículums y los entrego tanto en los comercios como en físico por la vía digital.

Lía y Erick también se ofrecieron a ayudar y no se quedarían de brazos cruzados.

- Todo saldrá bien - Lía la consoló - Ahora entremos y obtengamos la información necesaria

Wendy asintió, fijo su mirada en el gran letrero que había frente a sus ojos, ese día habían visitado las clínicas privadas para tener un presupuesto, ahora estaban en la tercera y el miedo se apoderaba más de ella. Ya que los precios parecían inalcanzables cómo las estrellas.

Los tres amigos entraron, y pidieron información pero al igual que las dos anteriores, sus esperanzas se vinieron abajo nuevamente.

- Esto es horrible - se quejo Lía sin poder evitarlo - Esos costos pueden ser los ahorros de la vida de una persona. El sistema, en la actualidad, es horriblemente discriminatorio. Si no tienes el dinero, no puedes hacer nada - refunfuño molesta

Wendy la miro con las lágrimas a punto de salir

- pero es que ni siquiera tenemos esa cantidad en ahorros - dijo Wendy -

- Tiene que haber una solución - dijo Erick

- Seguiré buscando el trabajo muchachos, es la única opción que me queda, porque es que ni la bendita casa se puede vender - dijo con frustración

- ¿que tonterías dices? - Lía se alarmó - ¿cómo puedes pensar en vender la casa? si es lo único que tienes

- No, no es lo único Lía y si la pudiera vender lo hubiera hecho y compraría otra más pequeña y a un bajo costo a la final somos mamá y yo no neceaotamls algo tan grande- Wendy explico lo que tenía en mente

- Si ese es el caso ¿por qué no la puedes vender? - Erick pregunto curioso

- Es una de las propiedades de papá, pero está en el testamento y no se puede vender hasta que no se lea dicho papel y a parte de esa están las otras propiedades e incluso la cuenta bancaria pero no podemos usar nada de eso - se quejo Wendy a la vez que su rostro se ensombreció

- Teniendo dinero y sin que lo puedas usar ¿que pensaba tu padre? - Lía exclamó - ¿no las quería?

- No lo sé mi madre no me dice mucho de papá -

Wendy no escatimo esfuerzos en seguir buscando alguna solución que le proporcionara el dinero. Era como un túnel sin salida.

Pasó un mes y medio en un abrir y cerrar de ojos y aún Wendy seguía sin encontrar el dinero. Hasta que una idea hizo clic en su mente. Tomo su celular y me marco a su único amigo: Erick

💜💜💜

Hola mis queridas lectoras...

otro capítulo más....

Gracias por el apoyo.

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