Capitulo 10

Me tomo de la mano entrelazando nuestros dedos. Todos aquí los del buffet sabían que para Lucrecia no habría un no a menos que tenga instrucciones mi asistente de no ser molestado por alguna reunión, bastaba con que la vieran entrar cuando sabían que entraría sin ser anunciada.

Subimos al ascensor.

- Bastian!

- Dime.

- No quiero que sigas molesto por lo de esa asesina.

- Bueno entonces deja de hablar de ella. Ahora lo importante es el apoyo al sepelio de Samuel.

- Te amo.

Lucrecia me rodeo con sus brazos, solo pude corresponder el abrazo pero sentia que ya no podía decirle que la amaba. Quiza solo es por la situación por la que estamos pasando y necesito respirar un poco.

- Quiero que me hagas el amor Bastian.

- Ahora no es prudente. Vamos a lo de tu hermano.

- Por eso lo necesito.

- Quiza después.

- Pasa algo?

- Solo que Samuel esta muerto, en una caja y tu piensar en coger.

- Es mi manera de llevar mi dolor.

- Pero el mio no.

Solte a Lucrecia cuando el ascensor se abrió dándole paso para ir hacia la salida. Ella se apresuró para tomar de nuevo mi mano, la mire y ella me sonrió con cierto triunfo de lograr lo que ella siempre quiere.

Renata:

Estaba sentada en un banca que ahí en el lugar donde miraba a los demás que estaban acostados durmiendo.

Subi mis piernas abranzadolas, pensaba en cada uno de los momentos que tuve con Samuel, los mejores momentos de mi vida, cada recuerdo que tenia de él me hacia sonreír a pesar de la situación en la que me encontraba.

Entraron dos policías hacia donde estaba.

Oficial: Renata Nunier!

Levante la mirada viendo a los oficiales, me levante para acercarme a ellos, el otro oficial abrió la reja, jalándome de mala manera, dándome vuelta.

- Que pasa?

Oficial: CALLATE ASESINA...

- No soy asesina.

Oficial: CLARO ESTUPIDA TODAS DICEN LO MISMO.

Me puso unas cadenas en los pies, donde estiro la cadena juntando mis manos para ponerme las esposas, mi corazón latia tan fuerte que podía escucharlo estando en este lugar. Las personas que estaban en el área donde me encontraba solo me miraban sin decir absolutamente nada, el oficial que estaba afuera me jalo con la cadena empujándome, casi me caia al suelo cuando el otro me jalo de la cadena causándome daño en las manos.

Oficial: ANDANDO ESTUPIDA! CAMINA!

Mis ojos se llenaron de lagrimas por el trato que me daban sin merecerlo, que habia hecho, realmente nada malo, solo estar en el lugar y momento equivocado. Los oficiales me empujaban como se les daba las gana, no les importaba en lo mas mínimo si me golpeaba en el camino o me tropezaba, casi me era imposible avanzar con tanto empujon.

El oficial se me acercó hacia mi oído.

Oficial: TE DARAN TU MERECIDO MALDITA ASESINA!

Mire al oficial con ganas de matarlo a él si, me dio un santo empujon ocasionando que cayera al piso golpeando mi cara con la pared por donde entrabamos, el oficial solo soltó su carcajada cuando miro que me habia hecho daño empezando a salir sangre por mi ceja y por mi labio donde me habia caido.

Oficial: LEVANTATE!

Como pude hice el esfuerzo para levantarme, con lagrimas en los ojos por todo lo que me estaban haciendo.

Me metio a un lugar enorme donde habían muchas sillas, donde mire que aun lado estabas los Ferretti.

Camine cuando mire en medio en la parte alta a un juez.

Jueza: Buenas noches señorita Nunier, por motivo de que su aboga nos paso su confesión donde usted se declara culpable del asesinato del joven Samuel Ferretti de 17 años, hemos decidido adelantar su sentencia.

- Esperen? Que ha dicho? Yo no he declarado nada.

La jueza levanto una una hoja donde demostraba una firma en la cual por la distancia no alcanzaba a ver de quien era.

Jueza: Señorita Nunier, aquí esta su declaración con su huella digital y la firma de su madre que es su tutora.

Mire a los Ferretti, claro de seguro le habían puesto una trampa a mi madre para que firmara un documento que no era lo que le estaban prometiendo. Negue con la cabeza.

- Disculpe pero sigo sin entender, ni siquiera he puesto mi huella en ningún papel.

Jueza: Señorita Nunier, su aboga nos pasó el documento oficial. Aquí esta su declaración.

La jueza extendió el papel a uno de los oficiales donde miré que en efecto estaba la firma de mi madre, miré a Lucrecia que tenia una sonrisa de burla y de triunfo a la vez.

Jueza: Es la firma de su madre?

Asenti con la cabeza sintiendo como mi estomago empezaba a dar vueltas, cuando mis lagrimas cayeron por mis mejillas.

Jueza: Como decía, por tal motivo de la confesión sin presión obtenida ante un notario. La señorita Renata Nunier, pasara 25 años en prisión apartir de el dia de hoy que ingreses a las instalaciones empezara a tener la cuenta regresiva. De igual manera en la gravedad del homicidio, en la cual el Joven Samuel Ferretti no tuvo manera de defendersese le otorgan 10 años mas. Cumpliras una sentencia de 35 años en prisión. Debido a que eres menor de los 18 años empezaras a cumplir tu sentencia en una reformatorio, que al cumplir los 18 años tendrás que ser cambiada a una prisión de alta seguridad.

Baje mi mirada, ni siquiera me habían dado la oportunidad de defenderme en ningún momento, como podría ser esto posible, ni siquiera la abogada vino para estar a mi lado en este momento, quizá esto asi se manejaba, pero que será de mi vida.

El Oficial me llevo de nuevo en la parte de atrás, con varios empujones cuando me dejo caer, en pies de otro oficial que este se veía peor que el otro.

Oficial: Andando Levantante que ahora mismo te iras al reformatorio.

Me levante, este oficial que me saco del lugar me tomo del brazo subiéndome a una patrulla, sabiendo que me llevarían a un reformatorio. El oficial acelero, empezando avanzar para llegar al lugar.

Iba en la parte de atrás aun llorando, mis lagrimas no dejaban de salir. Pero como podría avisarle a mi madre cuando piensan todos que mañana seria mi juicio y acaba de tenerlo sin necesidad de que nadie me representara.

Despues de un buen rato de camino el oficial se aparco mirando por la ventana el lugar no pintaba nada bien. Me ayudo a bajar, haciendo que entre con cuidado. Me detuvo en la puerta y en seguida otros oficiales me recibieron.

Los oficiales me hicieron entrar por el cual me quitaron las esposas, uno de ellos me miro de arriba y abajo.

Oficial: Entra y cambiate. La ropa que tienes allí es para ti.

- Disculpe, puedo darme una ducha.

Senti como me tambalea cayendo al suelo sintiendo una fuerte bofetada en mi cara, me lleve mi mano a mi mejilla empezando a llorar por el fuerte dolor.

Oficial: CREES A CASO QUE ESTAS EN TU BURBUJA.

El oficial se puso a mi altura donde me pegue rápido a la pared como si pudiera traspasarla, me daba tanto miedo esos ojos que estaban llenos de odio. Me tomo del cabello propinándome tremenda paliza.

En que momento debi merecer esto, que pecado habia tenido para que estuviera pagando algo como este, el oficial me estaba masacrando a golpes y nadie sabia. Sentia como patada tras patada en mi cuerpo que era frágil era como si me estuvieran clavando varios cuchillos a la vez, en mi cara me habia golpeado mas de una vez. Sintiendo como la sangre pasaba por mi garganta.

Oficial: AQUÍ SE LES TRATA COMO SE DEBE.

Oficial 2: BASTA!!!! QUE DEMONIOS HACES?

Oficial 1: DANDOLE UNA LECCION A ESTA MALDITA HIJA DE PUTA.

OFICIAL 2: MIRA COMO LA HAS DEJADO, NI SIQUIERA PUEDE MOVERSE Y MAÑANA VIENE EL SEÑOR BONNET...

El otro oficil habia dado la orden para que me llevaran a la enfermería ya que me habia dejado hecha mierda. El oficial bueno me tomo entre sus brazos mirando que nadie quería tocarme como si fuera una leprosa o alguna enferma de algo que se transmitía. Llego a la enfermería donde me recostó con mucho cuidado en la camilla.

Doctora: Quien hizo esto! Alguna chica?

El oficial negó, al mismo tiempo que lo hacia la doctora.

Doctora: Hola cariño, te voy a inyectar un poco de este medicamento para que minorizar los dolores.

- Quiero irme a casa!

Doctora: Cariño, no se lo que hayas hecho y tampoco sé por lo que estas aquí. Solo te pido que estes tranquila por el momento.

La doctora se dirigió al oficial mientras me ponía la inyección.

Doctora: Es inconcebible que le hayan hecho esto. Se quedará aquí unos dias y tráiganle ropa para que se de una ducha.

Oficial: Si Doctora.

Cerre mis ojos cayendo en un profundo sueño.

Bastian:

Mi móvil empezó a sonar, mire el numero, pero en este momento me encontraba en el sepelio de Samuel, la familia estaba muy triste y Lucrecia no me dejaba en ningún momento a luz y sombra.

Trate de tomar la llamada pero Lucrecia tomo mi mano negando con la cabeza para que pudiera tomar la llamada.

- Estamos en un momento de mucho dolor Bastian.

- Tengo que hacer una llamada.

Me retiré de donde los demás se encontraban marcando el numero de Gerard.

Llamada:

- Dime Gerard que tienes.

- Bastian, no te va a gustar nada pero, hace un rato la sentenciaron con 35 años en total. La han trasladado en el reformatorio de menores.

- MALDITA SEA! MIL VECES MALDITA SEA!!! HIJOS DE PUTA! SE NOS ADELANTARON!!!

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