Capitulo 12: no puedo negar mis sentimientos.

-toma Amy... Ya no llores por favor - dice Alex dejando la taza de Amy en una mesita al frente de ella y acercándose para consolarla. - no puedo verte así. De verdad lo lamento, no quise hacerte sentir mal. - Alex toma el pañuelo y con delicadeza seca las lágrimas de Amy - ahora tomate el chocolate te sentiras mejor.

-gracias Alex. Como te sientes? - dice Amy mirándolo a los ojos, unos ojos cansados y débiles aún por la gripe.

-estoy un poco mejor - Amy levanta su mano y toca la frente de Alex para comprobar si aún tiene fiebre.

-todavía tienes un poco de fiebre - dice preocupada.

-no te preocupes Amy, estoy mucho mejor-Alex toma la mano de Amy y la entrelaza con la suya - lo lamento Amy, no quise tratarte de esa manera.

-porque lo hiciste entonces?

-porque... Odio sentirme mal, enfermo no sirvo para nada, y eres a la única persona que vi en todo el día, solo me descargue contigo. Pero fui un idiota lo lamento, tu rengueando por la lesión y viniste a ver como estaba.

-esta bien ya no te preocupes, igual no estaba llorando por ti, es un rejunte de todo, la entrevista, Lucas Smith, el entrenamiento, la lesión, ya no tengo fuerzas para seguir-dice Amy desanimada.

-y te darás por vencida por un idiota como Lucas Smith?.

-hará lo imposible para terminar con mi carrera, dijo que investigaria a fondo a los organizadores de las competencias para saber si con mi padre pagábamos para ganar mis trofeos. No puedo soportar eso.

-y tu lo hacías Amy? - pregunta Alex, sabe que ese trabajo sucio lo tiene que hacer el. Pero lo bueno sería que Amy no esté detrás de todo eso.

-nunca lo haría Alex, amo el patinaje, es mi vida, lo que gane, lo gane en buena ley.

-se que es así Amy, así que con más razón no debes darte por vencida, tienes que llegar a los campeonatos mundiales y demostrarles que tienes mucho talento.

-si Alex, solo que estoy cansada, no soporto a los periodistas y mucho menos cuando están detrás de mi. - Alex se siente mal y muy culpable, sabe que Amy lo odiara si descubre que el es un periodista y que está encubierto para investigarla a ella.

-Amy tienes que ser fuerte, se que max y hasta ese Michel no dejaran que te des por vencida y mucho menos yo lo haré - dice Alex para darle ánimos.

-gracias Alex, vine a ver como estabas y tu terminas consolandome.

-gracias por preocuparte Amy, eres una buena amiga. - Alex vuelve a tomar la mano de Amy y la aprieta con fuerzas - eres una buena persona Amy, eso nunca lo dudes.

-me preocupe mucho porque tu no contestabas y pensé que... - Alex no la deja continuar, se acerca a ella y le da un tierno beso en los labios que hace que Amy le rodee el cuello con sus brazos entregándose al increíble beso. El primero en deshacer el momento es Alex que se queda perplejo mirándola a los ojos.

-lo siento Amy no pude contenerme.

-Alex... Tu y yo... Esto... No puede ser, sabes que es una locura-dice Amy levantándose del sofa, caminando de acá para allá.

-tranquilízate Amy solo fue un beso.

-lo se, pero entre tu y yo no puede pasar nada-Alex un poco enojado se levanta del sofa.

-por qué no puede pasar nada? Porque eres una niña rica que no puede estar con un pobre como yo? - dice Alex un poco enfadado.

-no es así Alex no me malinterpretes.

-aquí la única interpretación es que te molesta que sea pobre.

-crees que si eso me importara estaría aquí contigo?

-al menos no puedes negar que sientes algo por mi.

-no puedo negarlo Alex, pero en este momento es más importante mi carrera.

-lo entiendo Amy - dice Alex cayendo a la realidad de que el también está haciendo lo mismo, sacrificando una posible relación con Amy por su carrera-en ese momento el celular de Alex comienza a sonar y puede ver en la pantalla el nombre de lila, su amiga con derechos y compañera de trabajo, sin dudarlo atiende - hola lila como estas? Mucho mejor gracias! Por supuesto que si te espero. - al escuchar eso Amy comienza a sentirse mal, necesita salir corriendo de ahí, antes de que llegue esa tal Lila.

-creo que debo irme no quiero que a tu amiga lila le moleste mi presencia.

-si Amy lo mejor es que te vayas y no vuelvas por aquí, nos limitaremos solo a ser jefa y empleado de pista.

-eres muy cruel sabes?.

-y que quieres Amy? Que deje a lila por ti cuando me acabas de decir en la cara que no quieres nada conmigo? No puedo esperarte.

-no estoy pidiendo que lo hagas. Solo te pido que no me lastimes.

-no es mi intención hacerlo Amy, pero es lo mejor para los dos.

-tienes razón-Amy comienza a caminar hacia la puerta, quejándose de dolor.

-déjame que te lleve Amy. No puedes manejar así.

-no te preocupes, puedo irme sola, nos vemos alex, descansa, cuando estés totalmente recuperado puedes volver a trabajar.

-esta bien Amy, gracias por venir a verme.

-no tienes que agradecer. Es lo menos que un jefe puede hacer por su empleado.

-Amy...

-Adiós Alex, que te mejores - Amy sale despavorida del departamento de alex. En el ascensor se encuentra con lila que viene a Alex.

-Amy Williams eres tu! Has venido a ver a Alex?

-si pero ya me iba, solo quería saber como estaba, lo necesito urgente en la pista.

-claro entiendo, no te preocupes esta noche lo dejaré como nuevo - dice lila guiñandole un ojo, sin saber el daño que le hace a Amy.

-adiós, que tengan una buena noche - se despide Amy y enseguida entra en el ascensor.

Amy entra a su auto y comienza a llorar apoyada en el manubrio, porque rayos tenía que enamorarse de Alex, justo en este momento tan importante para su carrera. Se siente tan mal, ni siquiera tiene una amiga con la cual charlar y desahogarse, así que con toda la pena en su alma enciende el motor de su auto y se dirige al bar cubano de ramon.

Allí se la pasa toda la noche bebiendo mojitos y bailando salsa con varios hombres, siendo libre sin que nadie le diga lo que tiene que hacer.

Amy se acerca al lugar donde está ramón y le pide más alcohol.

-señorita Amy creo que ya ha tomado demasiado, apenas puede moverse.

-no te preocupes ramón, solo una más y prometo irme a casa-dice Amy en un estado total de ebriedad.

-Quien le hizo tanto daño para que este así... - pregunta ramón preocupado al ver el dolor en la mirada de Amy.

-sólo dame una más ramón por favor, los chicos me esperan para seguir bailando.

-la última señorita, esta es la última que le doy.

-lo prometo - Amy toma el mojito y vuelve a la pista , no sabia que se le daba tan bien el baile y que podía hacer amigos tan rápido, sin dudas el alcohol saca lo mejor en ella.

Ramón la mira de lejos preocupado, Amy esta tambaleándose y los hombres lívidinosos aprovechan a tocarla, así que no le queda más remedio que tomar su teléfono y llamar a Alex para que venga por ella.

-hola quien habla? - pregunta Alex confundido, levantándose de la cama para no despertar a lila, que duerme al lado suyo.

-Alex soy yo, Ramón.

-Ramón? Que sucede? Por qué llamas a estas horas?

-necesito que vengas al bar urgente.

-sucede algo? Son las cuatro de la mañana.

-la señorita Amy esta en problemas.

-amy?... Que hace Amy allí? - pregunta sorprendido Alex.

-debes venir por ella, esta muy ebria.

-ebria? Oh dios mio, enseguida salgo para allá.

Alex corta la llamada y entra nuevamente en su habitación para cambiarse. Allí ve a lila ya despierta y muy confundida.

-que sucede Alex? A donde vas?.

-debo salir lila, es una urgencia, puedes esperar o puedes irte.

-pero dime que sucede?-insiste lila.

-Amy esta en el bar de ramón muy ebria.

-amy? Que diablos te importa lo que le pase a Amy Williams? - lila comienza a enojarse. Levantando la voz.

-sabes muy bien que me importa, es mi trabajo.

-Amy es más que un trabajo para ti verdad? Te has enamorado de ella. - dice lila cayendo a la realidad de por qué alex no quiso acostarse con ella - por eso ya no quieres estar conmigo, ni siquiera me tocas.

-debo ir por Amy, no estoy para tus planteos de niña adolescente, muy bien sabias que esto era algo que disfrutábamos los dos pero no había ataduras, si vas a empezar a ponerte así, lo mejor es que te vayas y no vengas más por acá lila.

-esta bien alex tienes razón, pero te aseguro que de esta te vas a arrepentir. - dice lila cambiandose y yéndose de la casa Golpeando la puerta con mucha fuerza.

Alex termina de vestirse, se sube a su auto y se dirige al bar de ramón.

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