“Capitán, no es momento de pelear, pueden seguir demostrando su testosterona en la nave, si regresan de inmediato”-indica Murph-.
“Imbécil, te crees una buena persona, pero, solo eres un viejo amargado con mal carácter” – lo insulta Cilian-.
“Cállate, basura engreída, aquí te haces el fuerte; pero, no tuviste las bolas para cuidar de tu hija y comprometerte con alguien, eres un cobarde” –mientras se golpean y se intentan ahorcar mutuamente-.
“¡Capitán, es en serio! Explotó un contenedor de gases inflamables en el sector central de la nave, en poco tiempo, se separará toda la estructura”
“¡Maldita sea! Ya escuché, continuaremos esta pelea en la nave, idiota”- lo suelta y decide flotar hasta la salida-.
“Eso espero, abuela”
Tienen que escapar rápidamente del Orion-7 antes de que se terminé de separar y tomar una ruta alterna hacia la AIS Interment.
Anteriormente a la detonación, Emma, Sigourney, Tom y Richard repararon el suministro eléctrico y regresaban a la nave, en el techo (por los conductos de ventilación) escuchaban pasos, gruñidos y se sentía que la baba verde que cubría toda la base fluía cerca de ellos. Esa sensación de miedo y temor se apoderaba rápidamente de cada una de sus consciencias, el miedo natural a morir era inminente; aunque, ellos perjuraban que ya estaban listos porqué estaban salvando al mundo y hacer semejante sacrificio no sólo conlleva enfrentarse a formas hostiles de vida desconocida sino arriesgarse a ser devorado por ellas.
Sigourney sufría por su esposo y su futuro bebé ¿Qué seria del chamaco sin su padre? Él estaba demasiado afectado y necesitaba un cuidado médico prioritario. Emma recordaba a sus hijas y a su esposo o exesposo ya que cuando regresará a la tierra (si es que pasaba) tenía que firmar el divorcio, no se lo había dicho a las niñas antes de irse, porque no quería que sufrieran. También, su fobia a los insectos le hacía imaginar a un alienígena con forma de araña o escorpión, estaba a punto de desmayarse. Richard solo tenía enfocada su mente, en su hijo, todo lo que había prometido y lo más seguro es que no cumpliría, se dice mucho que es incorrecto hacer votos y no cumplirlos, pero, hay circunstancias imposibles de sobrepasar, el destino era incierto para cada uno.
Increíblemente atemorizados continúan con prisa hacia su destino, cuando ven una sombra descender del techo y tocar un contenedor de gases inflamables, gritan como nunca lo hubieran hecho en sus vidas, disparando desenfrenadamente y algunas de estas balas impactan en el contenedor y hacen fricción en un ambiente con un gas altamente explosivo, provocando la explosión. Caen arrodillados al suelo e inmediatamente el gran agujero ocasionado en el centro de la nave inicia la desintegración de toda la base, se sujetan con fuerza para que no sean absorbidos al espacio exterior, Tom es agarrado con mucha fuerza por su esposa y Richard, mientras Emma intenta sujetarse de un cable, horrorizada comienza a decir una plegaria y agrega:
“Dios, si tengo que morir así, permíteme salvarles la vida a mis amigos”
“Emma, noo… Es imposible que hagas algo”-clama Richard-.
Emma ve que hay una manera de no caer al espacio, visualiza un panel de control que cierra las puertas de pasillo a sala y logra columpiarse o, mejor dicho, sujetarse hasta ese panel y si todos llegan al pasillo, cierran la puerta y evitarán ser arrojados al vacío:
“No te sueltes, mi amor –llora agotada Sigourney- no te voy a soltar”
“¿Qué estás haciendo, capitana? –puja, mientras, Emma va avanzando cuidadosamente por el cable para intentar agarrase de una pared- Ten cuidado”
“Sólo intenten llegar al pasillo sin caerse, cerraré la puerta para que podamos avanzar sin problema alguno”-grita mientras está muy cerca del panel-.
“Sigourney, mírame y escúchame, tendrás que soltar a Tom"
“Ni loca, no pienses que lo abandonaré”-interrumpe desesperadamente-.
“No, como crees, mírame, te prometo que no lo soltaré, debes seguir a Emma y cuando llegues a un lugar más seguro, volverás a sujetar a tu esposo, ¿ok?”
“Bueno, por favor, no lo sueltes”
“No te preocupes, solo sigue a la capitana y tú, Tom, sujétate fuerte de mi”
Ella lo suelta y Tom es empujado junto con Richard que empieza a sentir un desgarre muscular, este se encuentra sujetado con su otra mano a una ranura del suelo al igual que Sigourney que se moviliza hábilmente por ellas:
“Bueno, Tom. Debemos avanzar, necesito que avances e intentes sujetarte de estas ranuras, yo te daré impulso”
“Si”-responde moribundo-.
Richard con una voluntad y espíritu muy fuerte, alcanza a columpiarlo y estirarse hacia la otra ranura, menos mal, alcanza y siguen fuertemente unidos por sus manos:
“Muy bien, Tom. Sabía que podías, no nos vamos a rendir, ahora, no me vayas a soltar, debes darme el suficiente impulso para alcanzar la otra ranura. Sigamos avanzando”
Tom sufre; pero, con gran vigor no lo suelta y lo hace llegar al otro saliente. Su mujer, Sigourney, a la entrada del pasillo, ve cómo avanzan Richard y su esposo, Emma le tiende una mano y la atrae hacia dentro para que se sujete del pasillo, mientras está atenta al panel de control. Simplemente, es maravilloso como luchan por sus vidas y se apoyan mutuamente, era escena única e inolvidable para cada uno de ellos, Tom con su último aliento recordando ese bebé en formación en el vientre de su mujer saca fuerzas de donde no las tiene, llegan hasta la ranura muy cerca del panel y Sigourney extiende su brazo libre y sostiene a su esposo, mientras, Richard es recibido por Emma, casi se resbala, pero, vuelve y lo acoge con fuerza, se agarran por sí mismos y la capitana cierra la puerta dejándolos a salvo y que puedan continuar su camino.
La nave Orion-7 se desacopla de Spacefield y empieza a orbitar descontroladamente alrededor de la nave, chocándose con ciertas antenas y estructuras, dividiéndose en numerosas partes, los cadáveres que se encontraban en ella quedan vagando sin ningún rumbo por el vacío. Una de esas partes cobra velocidad y se dirige hacia la AIS Interment golpeando con los motores.
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