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...Mientras los días pasaban, Carien no perdía las esperanzas de sacar a Pilar de la cárcel. Los documentos que tenía en su poder era la única evidencia viva. Sin embargo, todo había sido limpiado....

...Carien mantiene el rostro fruncido mientras continúa revisando la información de muchos de los negocios de la casa de apuestas. Gira su lápiz entre sus dedos con mucha impaciencia, la tenue luz sobre el escritorio resguardan los bellos rasos de su cara....

—Señor. Su abuelo ha venido a verlo.

Su poca paciencia estaba a punto de romperse, y tener a su abuelo con sus sermones no lo apaciguaría.

—Dile que pase.

—Si joven.

...El sonido del golpe del bastón sobre el piso hizo eco en la habitación, dejando un zumbido molesto en los oídos de Carien....

—Vaya, con que este es el escondite de la rata. Me esperaba algo peor, pero esto... Mmm...

—Que quiere su distinguida majestad en este humilde lugar.

—No te quieras pasar de listo conmigo.

...Sus miradas se cruzaron como dagas afiladas. La presencia de su abuelo era tan pesada que no resistiría decirle sus verdades....

—Haz rebajado tu estatus en algo tan deprimente. No estás al tanto de todo lo que dicen de ella en la calle. Todas nuestras amistades están dejado de lado su presencia, no era más que una....

—Cuidado con lo que vayas a decir de ella. Será mi esposa y tu y los demás tendrán que respetarla como tal. No sabes cuanto ha sufrido y lo único que ha hecho ha sido trabajar muy duro.

—Ja, te he presentado a muchas señoritas de la mejor clase.

—Que clase, por favor. Esas muchachas solo tienen el título de señoritas, pero detrás de esa máscara son menos que ratas en la basura. El único pecado de Pilar ha sido el no poder defenderse de quien la ultrajo, de quien la vendió y de quienes la juzgan sin pensar.

...El abuelo se quedó callado, su nieto tenía razón en algunas de las cosas mencionadas, muchas de las chicas eran mujeres respetadas, pero eran más descaradas que las mismas mujeres de la vida galante. Muchas de ellas tenían amoríos con otros que no eran sus esposos o novios. Mantenían sus lazos con ladrones, viejos millonarios, entre otros....

...Pilar era una mujer muy distinta a esas, ella destacaba por si sola, era la envidia de toda joven, con belleza, son valentía, con sabiduría e inteligencia. Por ello no la querían, no soportaban verla ser tan buena y bondadosa....

—Abuelo, estoy un poco ocupado. No necesito que vengas a ver lo que no quieres ver. Ahorrate tu saliva y tu tiempo. No volveré a tu casa, ésta ahora es mi casa, de la mujer que amo, y ni nada ni nadie me hará cambiar de opinión.

—Eres igual a tu madre.

—No menciones a mi madre, no tienes derecho. Vete abuelo.

Sin más el señor salió seguido de sus guardaespaldas y mayordomo.

—Cuidalo.

—Tenga cuidado joven. Lo haré.

—Gracias.

...La pesadez en su cuerpo lo hizo caer sobre el sofá. Pensaba en que haría su padre en esta situación, como ayudar a su ser amado y complace a su abuelo. Lo único que prestaría más atención sería en sacar a Pilar de la cárcel....

...Mientras tanto, Pilar aguardaba sentada sobre sus rodilla en u a de las celdas llenas de moho la sentencia que daría el juez a su situación....

...Su color rosa natural de sus mejillas había desaparecido, las ojeras debajo de sus ojos la habían enmarcado, pues no había dormido nada. El frío la había consumido tanto que el temblor de su cuerpo era parte la rutina. La comida no era bueno, la estaban molestando brindándole los tomates que le habían lanzado el día que fue arrestada. Hasta la misma comisaría estaba en contra de ella....

...Mientras susurraba algunas palabras, recordaba el rostro de su amado Carien, quien la había ido a ver mientras la llevaban a la fuerza. Sus ojos se inundaron de lágrimas. Allí acurrucada lamentaba el hecho de que él la haya visto así....

...Desde fuera se escuchaban una discusión y de en entre tantas voces, reconoció una muy familiar. Carien la había ido a ver. Y de las fuerzas que le quedaba se arrastró hacia los barrote y empezó a gritar su nombre....

—¡CARIEN! ... ¡CARIEN!

...Su cuerpo temblaba, los nudillos de sus manos perdían color al apretar los barrotes fríos. Su voz temblaba y pensó que jamás podría volver a verlo. Hasta que una sombra apareció y pudo ver su rostro, un último suspiro con su nombre y el corrió a sostenerla....

—Pilar...

...Sus ojos rojos y llorosos, un semblante caído, no era el mismo Carien. No era su amor....

—Carien... Perdoname.

—Mi amor, no tengo nada que perdonarte. Tu deberías hacerlo, no he podido sacarte de aquí.

—Verte me da fuerzas.

...Juntaron sus frentes sintiéndose uno del otro, demostrando se amor, el único que tenían como esperanza de volver a estar juntos....

—Estas pálida. Que te han hecho.

—No te preocupes por mi.

...De repente, deteas de Carien un oficial de alto de rango los interrumpió y con una voz muy autoritaria, impuso su opinión....

—Señor Carien, debe salir. A la señora Pilar no le está permitido recibir visitas, podría dar órdenes para que la saquen de aquí.

—¿Que esta diciendo? Que mi mujer podría armar un motín en su miserable cárcel.

...Carien estaba muy enojado y con puño en mano lo miró desafiante. Estaban tachando a Pilar como una criminal muy peligrosa, que sería capaz de cualquier cosa con tal de salir libre....

—Usted es un incompetente. Veo a los reclusos de mi rededor, todos están mucho mejor que Pilar. ¿Acaso la mantienen aquí cautiva como un animal? Mírela. Maldita sea. Ella lo único que ha hecho ha sido salir adelante con sus propios esfuerzos y por una maldita que lo respalda ha hecho de una vida muy miserable.

—Cuidado con lo que está diciendo señor Carien. Podría..

—Podría que... Yo se que esa familia da recursos a su cárcel. Y por lo que averigüé y de los cuales tengo pruebas usted podría perder su puesto si escribo una carta a su mayor en el distrito.

—¿Es una amenaza?

—No, una advertencia. O mejoran el trato a mi mujer y hacen algo o espere a que pierda el poder aquí.

...Los reclusos que escuchaban la conversación empezaron a gritar eufóricos. Todos apoyando a la dama y al joven Carien....

...! Inepto! ¡La señora es inocente! ¡Los ricos son basura! Entre otras oraciones de odio hacia la clase social alta daban eco en la cárcel, el general dio órdenes de cambia de celda a Pilar, bañarla, darle comida y una cama, para que pudiera descansar mejor hasta que todo se aclare y demuestre su inocencia....

...Pilar estaba agradecida con Carien y eso hizo amarlo más. Carien por su parte estaba feliz por haber hecho algo por ella con sus propios recursos y del apellido importante de la familia....

—Te sacare de aquí. Lo juro.

—Lo sé...

—No te rindas. Estoy esperandote Pilar.

...El general vino a sacar a Carien. Por lo que no pudieron despedirse adecuadamente uno del otro....

...Sus esperanzas aún estaban a flote....

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