Aldana una joven doctora que cuando con un prometedor futuro, cambia su destino al cometer un gravisimo error...
NovelToon tiene autorización de abbylu para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
capítulo 6
Sin decir más, me di la vuelta para marcharme, pero tan pronto lo hice sentí cómo Sebastián tomaba mi brazo con fuerza y me apartaba de los demás. Al llegar al jardín trasero me soltó y dijo:
—Aldana, déjame que...
No pudo continuar, porque mi mano ya se había estampado contra su mejilla. Estaba furiosa, decepcionada y profundamente dolida. No solo había jugado conmigo todos estos años, sino que ni siquiera tuvo el valor de enfrentarme y decirme lo que sucedía.
—Esta será la última vez que te dirija la palabra. No me vuelvas a tocar, o te denuncio por acoso.
Intenté irme nuevamente, pero lo escuché decir con voz quebrada:
—Fue por esto... fue por esto que rompí nuestra promesa.
Me detuve y volteé a verlo. Sebastián me miraba con los ojos llenos de frustración y continuó:
—Dijiste que cuando terminaras tus estudios te mudarías a Londres para hacer la universidad aquí, pero te quedaste en Estados Unidos. Aun así, te esperé. Pero cuando pasaron seis años supe que no volverías, o que simplemente no me querías tanto como yo te quise a ti. Si yo no te llamaba, tú no lo hacías. Vivías para estudiar, dormir... incluso tenías tiempo para tus amigos, menos para mí. Cuando te graduaste, fui con mi padre a felicitarte y te vi... abrazada con otro hombre. No parecías incómoda, Aldana, y fue ahí donde lo entendí. Tu vida ya estaba allá. Tus amigos, tu carrera... incluso cuando tuviste que elegir dónde hacer la residencia, te quedaste allá.
—Típico de un hombre inmaduro e infiel. Ahora resulta que la culpa fue mía...
—No, solo digo que quizás no estábamos destinados a estar juntos...
—¿Y por eso te comprometiste con mi hermana? ¡Qué conveniente! Me alegra saber que lograste "superarme" tan fácilmente. Solo te pido, por el bien de ella, que seas sincero y le digas lo que hubo entre nosotros. Porque aunque viva al otro lado del mundo, la sombra de tus mentiras te va a perseguir por el resto de tu vida.
—Nuestros padres creen que es mejor que nadie sepa lo que hubo entre nosotros...
—Y claro, tú lo aceptaste sin dudarlo. Muy bien, ya no me interesa. Total, tampoco me interesa seguir formando parte de esta familia.
—Aldana, por favor... No te alejes de Laura otra vez. Ella te extraña, y tenía planeado...
—Pues es una lástima que tú te hayas metido entre nosotras.
—¿Así es como piensas castigarme?
—¿Castigarte? No, Sebastián. Yo no tengo tiempo para desperdiciar en alguien que ni siquiera vale la pena. Y ¿sabes qué? Tenías razón. Siempre puse mi carrera, mis estudios y mis metas por delante. Porque, en el fondo, sabía que si no lo hacía, podría arrepentirme. Y mírame ahora. ¡Qué bueno que lo hice!
Sin más, me giré. Al hacerlo, vi a Laura y a Leonardo venir en nuestra dirección. No quise escuchar más. Me tragué las lágrimas, alcé la barbilla y caminé hacia ellos con paso firme. Laura pareció no notar lo que estaba sucediendo así que sin más seguí de lago pero me detuve al escuchar su pregunta.