Lilian amó con sinceridad al emperador Dmitri y él también dijo amarla, por eso a ella no le importo ser solo una concubina, pero después de que este se casara con su prometida, comenzó a ignorarla, el emperador se dejó manipular por la madre emperatriz al punto de condenar a la familia de Lillian e incluso ella fue ejecutada de manera injusta, pero para sorpresa de Lillian, ella regresó a su pasado, cuando apenas era una niña y ahora, tenía la oportunidad de cambiar su cruel destino y el de su familia.
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Capitulo 4
Narra Lillian
Ya era de día cuando escuché que mi nana entraba a mi habitación y sabía muy bien a qué venía pero tenía tanta pereza que lo que hice fue acomodarme más en mi cama
Mérida: Mi lady es hora de levantarse
Lillian: Déjame dormir un poco más por favor
Mérida: Okay pero entonces usted perderá su oportunidad de ir a la torre de magos
Al escuchar lo que dijo mi nana me levanté enseguida, ella tomo mi mano y me llevo al baño ahí me ayudó a quitarme la ropa para que luego entrará a la bañera y aunque me parecía un poco incomodo que ella me bañara la dejaba que lo hiciera
Media hora después estuve lista así que baje a desayunar mi padre al ver que ya todos estaban en la mesa ordenó que sirvieran el desayuno, durante todo ese tiempo nadie pronunció una palabra hasta que terminamos de comer
Mi padre me dijo que me quedara en la sala con mi madre mientras que él iba a su despacho por unos papeles, converse un rato con mi madre y luego mi padre dijo que era el momento de irnos, me despedí de mi madre con un beso en la mejilla y luego mi padre
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Cuando llegamos a la torre de magos me quedé sorprendida por lo hermoso que era el lugar ni siquiera el palacio real es así de hermoso como esto es más creo que nunca en mi vida había visto algo igual
Estaba tan absorta en la belleza del lugar que no me di cuenta que mi padre me estaba hablando hasta que me tomo la mano y me llevo consigo hasta la puerta de la torre, mi padre toco una campana que estaba en la puerta y en menos de dos minutos un joven abría la puerta
– Buenos días marqués Borneth, no esperábamos su visita
Diógenes: Pido disculpas por no haber avisado que vendría, pero es que mi pequeña estaba muy ansiosa por venir
El joven de nombre Víctor dejo mirar a mi padre para luego mirarme a mi y eso me puso un poco incomoda así que me coloque detrás de mi padre
Víctor: Pequeña no temas que aquí nadie te hará daño
Diógenes: Bueno ella no sale mucho de la casa así que hay que entender la
Víctor: Entiendo ahora por favor pasen
Cuando por fin entramos a la torre pude ver que había muchos magos en el lugar, y sabía que eran magos por qué todos usaban la misma vestimenta
El joven nos llevó a una sala en donde nos sirvió un poco de té y bocadillos luego nos dijo que lo esperábamos ahí que él ya iba por el mago principal, así que esperamos como cinco minutos y él ya estaba de vuelta con un hombre mayor y luego de hacer una reverencia se fue
Mi padre al verlo al hombre se levantó enseguida y lo saludo luego me dijo que me acercará a ellos así que lo hice
Diógenes: Lillian el es Rogelio Castilla mago principal de la torre de magos
Lillian: Mucho gusto en conocerlo Lord Castilla como ya sabe mi nombre es Lillian y vine hasta aquí para que usted me diga que poder tengo
Rogelio: El placer es todo mío pequeña ¿y dime porque quieres saber cuáles poderes tienes? no prefieres mejor tener amigas y disfrutar de las fiestas de té
Lillian: Por que pienso que ir a una fiesta de té no me enseñara a protegerme de los peligros que hay en este mundo y por qué no quiero depender de alguien, no le parece buena razones para venir hasta aquí
Rogelio: Acepto que tus razones son válidas así que sin más decir veremos cuáles son tus poderes siganme por favor
Seguimos al mago hasta una oficina, nos dijo que tomáramos asiento en unos muebles que estaban ahí mientras el iba por algo, cuando regreso traía una bola de cristal, se colocó de frente a mi y me dijo que colocará ambas manos sobre la bola hice lo que él me dijo luego el empezó a recitar un conjuro cuando terminó me miró a la cara y empezó hablarme
Rogelio: Está bola de cristal que tienes enfrente nos dirá que poder posees tú
Yo asentí y luego fije mi vista en la bola, de pronto ella se torno de color rojo y cuando creí que eso era todo la bola se puso de color azul y luego negra el mago al ver eso se asustó y soltó la bola la cual se rompió en miles de pedazos
Diógenes: ¿Qué fue lo que pasó Rogelio?,¿por que soltaste la bola de cristal?
Rogelio: Por que lo que acabo de descubrir me dejó pasmado pero no te lo puedo decir si tu hija está aquí
Mi padre me iba a tomar por las manos pero yo me aleje de él
Lillian: Lo siento pero yo no me ire de aquí hasta que usted me diga lo que está pasando, no quiero que me oculten nada por qué cuando sepa que es lo que pasa será peor
Diógenes: Mi hija tiene razón ella merece saber que es lo que pasa así que dinos
El mago se quedó pensativo por un momento luego tomo asiento y nos miró
Rogelio: Ella posee tres poderes cosa que nunca se había visto en este imperio pero eso no es la cosa, la cosa es que uno de esos poderes que ella posee es la oscuridad y tú Diógenes sabes muy bien que si el emperador se da cuenta que ella posee ese poder será ejecutada
No yo no quiero morir de nuevo, por qué me tiene que pasar esto a mí cuando pensé que todo estaba bien me doy cuenta que nunca estaré a salvo de la muerte
Diógenes: Tiene que haber una solución, dime por favor que hay una
Rogelio: Bueno si hay una y es que ella use esto( el mago de pronto nos mostró un collar con una gema ) para que cuando use ese poder las cosas no se salga de control, también para que el emperador no pueda saber que ella lo posee
Lillian: ¿Y cuáles son los otros?
Rogelio: El fuego y el hielo, otra cosa cuando cumplas los 15 años de edad será difícil ocultarlo así que toda su familia se tiene que ir de este imperio, pueden irse a Nastia e escuchado que haya las personas poseedoras de la oscuridad las tratan como iguales
Diógenes: Gracias Rogelio por todo
Rogelio: No tienes nada que agradecerme sabes muy bien que tú eres mi amigo, ella desde mañana tiene que empezar a entrenar sus poderes así que enviaré a un mago de mi entera confianza para que sea su instructor
Diógenes: De nuevo te agradezco, bueno es hora de irnos que tengas un lindo día Rogelio
Rogelio: Ustedes igual