Un Amor Sin Barreras

Shirley terminó de empacar sus maletas; ella tenía sentimientos encontrados, por un lado, quería ir e iniciar la construcción de una vida en pareja, conviviendo el día con su moreno, con los altos y los bajos que eso conlleva, pero, por otro lado, sentía temor de dejar el que había sido su hogar toda su vida, su puerto seguro en días de tormenta; para apostarle a una nueva vida en un futuro incierto; donde la única garantía que hasta ahora tenía era el amor y la devoción que le profesaba su amado.

En este dilema se encontraba nuestra protagonista, Cuando su mamá; quien ya había notado el torbellino de emociones en su hija, tocó la puerta, al mismo tiempo que entro al cuarto y abrazando a su hija le dijo:

- comprendo como te sientes, también sentí este temor cuando me case con tu padre, demás está decirte que este siempre será, tu cuarto, tu casa, tu refugio, pero debes permitirte la oportunidad de construir tu hogar al lado de ese buen hombre que ha demostrado ser capaz de todo por ti, que día a día lucha hombro a hombro contigo, hija no permitas que tu inseguridad lo aleje ve y conquista la felicidad que te mereces.

- Gracias mamá por ser, estar y siempre tener las palabras adecuadas y oportunas para mí, si pudiera elegir a mi madre, te elegiría a ti, en esta y en mil vidas; te amo mi vieja, sé que mi princesa y tú se cuidaran mutuamente y prometo todos los días estar comunicada con ustedes. Le respondió Shirley a su mamá con un afectuoso abrazo acompañado de lágrimas.

- Bueno ya está bueno de llorar,es el momento de reir y ser feliz. ¡ah! Además de regalarme un par de nietecitos para consentir, sentenció la señora Josefa.

- 😄😄😄😄😄¡Caramba! Paola y tú creen que yo soy una máquina de hacer bebés; y encima los piden de a dos, finalizó diciendo la joven señora a su madre.

Luego de conversar un rato más, Salieron de la habitación, Shirley se despidió con un fuerte abrazo de su madre y de su hija, pidiéndole a esta última que Cuidara de su abuelita.

Por su parte yano le prometió a las dos hermosas damas que quedaban en ese humilde hogar, proteger a su maraquita con su vida si era necesario, respetarla y amarla hasta su última respiración. Luego tomo la maleta y su mujer para abordar el taxi que los llevaría a cumplir con su destino.

Al cabo de 20 minutos, el moreno le daba la bienvenida a su nuevo hogar a su amada mujer; un lugar humilde, pero acogedor, que él había alquilado para vivir solo con ella; ya que para el momento no contaba con los recursos económicos para comprar una casa propia, este lugar sin lujos, estaba equipado con todo lo necesario, para ellos comenzar a construir juntos su porvenir.

Luego de ayudar a Shirley a acomodar su ropa en el closet y colocar los implementos de aseo personal en él bañó, Los enamorados se dispusieron a recorrer cada espacio de su hogar, entre besos apasionados, caricias Lujuriosas y expresivos gemidos que llevaron placenteros orgasmos. Nuestros protagonistas se entregaron más de una vez al encanto del amor.

Ya cansados de la extensa, pero placentera, ronda de sexo,se quedaron desnudos abrazos en el sofa.

Dos horas de un profundo descanso pasaron, cuando se decidieron a tomar una ducha juntos,la primera en su nuevo espacio, por lo tanto no perdieron tiempo en darse afecto también en ese lugar, después se ducharse, se vistieron ella se colocó de una vez una batica blanca de tirantes y un largo que no dejaba mucho a la imaginación, mientras que el optó pi un Short también de color blanco dejando al descubierto su muy bien trabajada musculatura, provocando pensamientos eroticos en su mujer, quien no hizo ningun esfuerzo por disimularlo. Conn miradas pervertidas y recorriendo con sus uñas el torso de su hombre en un tono sensual le dijo al oído:

- Que rico y provocativo está mi bombón de chocolate, si fuera porque si tenemos una seción de sexo más por hoy; me dejas paralítica; por Dios que te comiera aquí mismo, pero mejor no nos emocionamos mucho que debemos cocinar y preparar todo para el trabajo de mañana.

- ¡ah! No,no,no tu no puedes venir y prenderme de esta manera y dejarme as,debes hacerte responsable mi amor,le respondió Yano, colocando la mano de ella en su prominente erección.

Así fue, que en esta oportunidad el desayunador se convirtió en el apoyo de, la Maraquita donde el moreno la recostó de espalda a el, para embestirla una y otra vez hasta llegar juntos al límite.

- Ahora sí que ya no puedo caminar,gracias a mi pervertido esposo, dijo Shirley en un susurro.

- ¡Ah sí! Eso no lo decías ahorita, solo te escuché gemir de placer y pedir más le respondió Yano mientras la tomaba en sus brazos para colocarla en el sofá y continuo diciendo.

- no te preocupes por la cena, pedí un deliveri de pizza y refresco.

En eso sonó el timbre riiiiiiink, riiiiiiiiink 🛎️.

- Vez,allí está. Quédate tranquila allí Acostada tranquila,yo traigo todo y cenamos aquí en la sala , dijo el moreno; y se fue a abrir la puerta para recibir y a cancelar el pedido.

Posteriormente, cenaron tranquilos, repusieron un poco de energías, para organizar el trabajo de la semana que iniciaría al día siguiente; y finalmente se fueron a acostar a su habitación donde durmieron abrazos en la intimidad de su nuevo hogar.