La historia de Alexandra Maxwell, es un testimonio de valentía, resiliencia y solidaridad. Cuando fue víctima de violencia de género, se sintió tan pérdida que se aisló emocionalmente, y gracias a un ángel terrenal que luego se ascendió al cielo, encontró refugio en una fundación que le abrió las puertas permitiéndole tener la oportunidad de enfrentar sus demonios y comenzar a reconstruir su vida.
En la fundación Esperanza, que fue su salvavidas, ella encontró su propósito, y decidió dedicar parte de su tiempo y energía a ayudar a otras mujeres que están pasando por situaciones similares, brindándoles apoyo emocional y legal, asesoramiento y orientación, haciéndolas visibles contando sus historias y mostrándole que es posible salir adelante y construir una vida libre de violencia.
LOS/ AS INVITO A LEER ESTA HISTORIA QUE CUANTA LA REALIDAD DE MUCHAS MUJERES QUE SON VÍCTIMAS DE VIOLENCIA DE GÉNERO. ESPERO LA DISFRUTEN. GRENM@
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CAPÍTULO XIII NUEVA OPORTUNIDAD
ALEXA
Ciertamente a veces nos negamos a creerlo, pero claro que existen las segundas oportunidades, solo que el miedo a no lograrlo o ser defraudados nuevamente, muchas veces, no nos deja ver esa posibilidad…
. – ¿Por qué lo condenas tanto? Vino hasta aquí arrepentido - ¿Arrepentido? ¿Con esa prepotencia que le brotaba por los poros? - Me pidió perdón, ¿No se supone que todos merecemos una segunda oportunidad?
… Sin embargo, es importante recordar que todos la merecemos sí… pero especialmente merecemos esa segunda oportunidad que nos ayude a aceptar y aprender de los errores, a crecer como personas, a demostrar que somos capaces de cambiar y mejorar, pero no debemos confundirnos, porque todo esto es parte fundamental de la vida… y es completamente normal sentir temor y dudas al momento de dar, darnos o recibir una segunda oportunidad, pero es importante recordar que el perdón, y redimirse son procesos necesarios para sanar y seguir adelante.
. – La merecería Emma, no obstante, debemos tener claro, lo que significa una segunda oportunidad, y esa es para enmendar los errores cometidos y seguir adelante hacia un futuro mejor, no para estancarnos en un círculo que por supuesto, no nos llevará a ninguna parte, ni traerá cambios positivos a tu vida. Entiende algo, la idea es que esa nueva oportunidad, cambie tu vida para siempre y para bien…
Muchas de las mujeres que pertenecemos a esta fundación, quizás al principio nos cerramos a dar esa segunda oportunidad, sin embargo, logramos confiar en nosotras mismas, así como en los demás y abrimos esa puerta que permanecía cerrada, no solo en el amor de pareja, sino en la amistad, en el emprendimiento, en el crecimiento personal, y gracias a Dios logramos avanzar… Claramente por darnos la oportunidad a nosotras, no a quien la pedía de manera mal intencionada.
. – Pero la intención también cuenta…
. – Hay intención donde la intención no vale… - Ella me miró - Eres inteligente, sabes a qué me refiero. Emma, por ti, debes regalarte esa oportunidad de avanzar, de crearte un horizonte, y tomar el timón para dirigir tu vida sin sentirte cohibida, amenazada o sometida Emma – Tomo sus manos – Tienes toda una vida por delante, eres tan joven…
. – Nadie me va a querer como él… - Cerrar los ojos no basta, se me agotan los argumentos, pero no me puedo rendir con ella…
. – ¡Maldición Emma! – El repentino grito de Mariana nos asustó a ambas - ¿Cuál amor? ¿Crees que un hombre que ama lastima del modo que él te ha lastimado a ti? ¿O del modo qué el ex esposo de Alexandra la torturó como lo hizo? Mírala, ¡mírala Emma! – La rabia de Mariana iba en aumento, cuando traté de calmarla ella no lo permitió y apartó mi brazo – Todas estas mujeres aquí han vivido lo mismo con un marido abusivo y cobarde que las dice amar y se escudada en mujeres débiles como tú, abre los malditos ojos de una vez ¿Qué es lo que quieres? ¿Irte? ¿Qué te mate? – La tomo del brazo, la levantó de un tirón, y la empujó haciéndola caer – Entonces lárgate de una vez y evítame tanta carga, lárgate con él, pero eso sí, en el proceso te olvidas que yo existo…
. – Por favor Mariana cálmate, espera… ¡Mariana! - No valió que la llamara varias veces, así como lloraba su hermana levantándose del suelo donde literalmente la tiró Mariana, así mismo lloraba ella cuando salió de la habitación, y también salía Emma, no sé si para ir detras de su hermana mayor o irse a refugiar a otro lugar, y yo, pues me quedé bloqueada, sin saber detrás de quien ir… - Oh Dios… - Susurré frustrada, y perdida… justo en ese momento entraron Lisa la esposa de Ethan y Lucy…
. - ¿Qué ocurre? Alexandra… - Las miré
. – Hola, que bueno que están aquí, por favor Lucy, llama a Scarlet y tú acompáñame Lisa – La tomo de la mano y la llevo conmigo, agradeciendo que este aquí, ella también es psicólogo, y me puede ayudar en este momento. Caminamos hasta el salón donde antes estuvimos practicando pasarela… - ¿Han visto a Emma? – Le pregunté a las chicas que estaban allí, recogiendo todo, pues por lo visto eso será todo por hoy…
. – Se fue hacia el colegio, iba muy mal pero no dejó que nos acercáramos…
. – Si, entiendo y tranquilas todo estará bien ¿Y a Mariana la vieron?
. – Ella si se fue, creo que eso puso peor a Emma…
. – Okey… cuando vean a Scarlet indícale donde estaremos por favor… - Ellas asienten y Lisa y yo emprendemos el camino al encuentro de Emma.
. - ¿Por qué suspiras así?
. – No sé qué hacer o qué más decir… - Me siento en serio agotada mentalmente…
. - ¿Qué fue lo que pasó?
. – Estuvo aquí el novio y por la impresión que nos dio ella realmente pretendía irse con él, y su hermana pues se molestó mucho, se pelearon, ella no quiere entender…
. – Tú mejor que nadie sabe lo difícil que es esto, y peor aún salir de ese círculo vicioso y además reincidir, si ella no pone de su parte, ni tu ni nadie podrá hacer nada por ella…
. – Lo sé… - Presiono su mano…
. – ¿Me permites hablar con ella…?
. – Si claro, te lo agradecería. Allí está…
Se nota a simple vista que está agobiada, así que la libraré de mi presencia por un instante, tal vez Lisa tenga mejor suerte… ¡De hecho sus historias son muy parecidas!
. – Hola Emma, ¿me recuerdas?
. – Si, por supuesto, eres la esposa del abogado… y supongo que al igual que todas vienes a reprobar a Chris… y a mí.
. – No, solo quiero escucharte… quiero que me digas con sinceridad, con la mano en el corazón, si piensas que todo lo que te decimos aquí está mal, y te prometo que dejaremos de hacerlo, porque lo tomaré como tu decisión…
. – No es que piense que este mal – La sumisión en su mirada me dice lo contrario – Aprecio lo que me dicen y el apoyo, pero también quiero que entienda que yo lo amo y lo necesito, sé que él se ha equivocado, pero también sé que está arrepentido y cuanta intención tiene de cambiar… ¿No crees que solo por eso merece otra oportunidad?
. – Ahí está el detalle Emma, ¿Cuántas oportunidades le has dado creyendo en esa “buena intención”? – A ella solo le queda levantar los hombros - ¿Ves? Tener solo la intención de hacer algo no cuenta sino se lleva a cabo con acciones concretas, ¿O crees que tiene algún valor?
La observé mirar hacia donde se quedó sentada Alexandra… y me supongo, que ella le ha dicho infinidades de veces, algo semejante.
. – Tal vez…
. – Tal vez no Emma, admite lo que es, dilo es voz alta para que te convenzas…
Esperé y después de suspirar entrelazó sus manos, luego me miró…
. – La intención por sí misma no basta, es necesario actuar y cumplir con lo prometido…
Mejor no pudo haberlo dicho, ahora solo falta que se lo crea realmente…
. – Exactamente, pero por favor créetelo en serio Emma, porque es así, y solo tú tienes el poder de cambiar tu realidad…
La chica soltó el llanto y se abraza a mí, entonces Alexa al observar la escena, se acerca…
. – Alexandra quiero ver a mi hermana, no quiero que me abandone…
. – No, claro que no lo hará, ella solo está triste, pero no te preocupes, iré a buscarla ¿Si? Solo por favor, ten en cuenta que tampoco vale que regrese en vano…
. – No me iré – La miré y asintió – Continuaré intentando seguir adelante con el apoyo de todas…
¡Alabado sea Dios, Claro que sí! y eso espero, porque aquí estamos para eso, para apoyarlas en todo lo que necesiten. Juntas podemos superar cualquier obstáculo y lograr grandes cosas, así que no podemos rendirnos… ¡Saldremos adelante!!