Capítulo 1.

—¡De nuevo!

Estaba cansada, sudada y sin aliento, llevaba casi dos horas de entrenamiento, pero sabia que todo este esfuerzo valdría la pena en un futuro, mis pies dolían y casi podía asegurar que mis piernas temblaban. Varias chicas me miraban con lástima, otras me miraban mal, ellas siempre decían qué yo sólo trataba de llamar la atención y por eso hacía mas que ellas.

Realmente no era que yo quisiera llamar la atención, era que yo quería ser alguien en la vida y así darle la vida que se merecía a mi madre.

Media hora después, estaba en mi camerino recuperando el aliento, se que todo mi esfuerzo valdrá la pena y no descansaré hasta ser la mejor.

Mire el reloj y en una hora empezaba mi siguiente clase, tome un baño después que mi cuerpo se enfriara un poco, era tan relajante, que me gustaría estar mas tiempo, pero no podía darme eso lujos, no ahorita.

Salí corriendo del estudio, se me hacia tarde y odiaba llegar, si corría mas rápido, llegaría. En el camino choque con un hombre de traje, iba a caer, pero logre estabilizarme.

—¡Lo siento! —grite sobre mi hombro y volví a correr. Si me lo llego a topar en otro momento, me disculpare mas adecuadamente. Aunque no creo que lo vuelva a ver, ya qué no vi bien su rostro. Oh maldita sea.

llego corriendo a la entrada, donde el guardia esta por cerrar la puerta.

—Vamos támara —dice y me deja pasar —deberías acortar tus prácticas.

—Lo se, esta vez no fue mi culpa.

corro nuevamente hacia la escuela, no entiendo por que mi clase esta tan retirada. creo que de tanto correr ya baje unos kilos. Llegue al salón corriendo y por cierto, aun no llegaba la profesora. Mis compañeros me miraron y uno que otro se me acercó, algunos para preguntarme si estaba bien y otros para invitarme a salir, aunque ellos ya conocieran la respuesta seguían insistiendo.

me fui a sentar en mi lugar de siempre, el ultimo asiento, pegado a la ventana, donde podía ver el patio trasero, un lindo paisaje de eso estaba segura. Ahora estaba mas relajada, pero mi mente seguía reproduciendo los pasos de la práctica, en cuanto fuera la hora de descanso, yo iría a mi lugar favorito. La profesora de Artes me había dado permiso de poder ocupar el escenario, donde ellos hacen obras de teatro.

La profesora llego, llamando la atención de todos en el salón, desconecte mi cabeza de la práctica y la concentre en la clase, no podía perderme ningún detalle, ya que siempre lo menos irrelevante era lo que venía en el examen, aún que no siempre era así. Pero me gustaba estar preparada para todo, no podía reprobar ninguna materia o todo mi esfuerzo se iría por la borda y mis planes estarían destruidos y mi futuro olvidado, al igual que yo.

La clase pasaba según su curso, mi mano dolía ya que por ningún motivo dejaba de escribir, tenia que escribir todas las palabras de la profesora para después repasar lo que vi el día de hoy.

Las demás clases pasaron rápido y cuándo menos lo esperaba ya estaba practicando la clase de ballet nuevamente, mientras la maestra de Danza me supervisaba.

—Excelente Támara, te has superado, te seguro que podrás llegar muy lejos.

Esas palabras siempre me servían para motivarme, sabia que si fallaba, decepcionaría a muchas personas que creyeron en mi, valoraría todo. Pero aun así, necesitaba dinero, tanto para mis estudios, como para mi madre.

Tenía quince minutos para comer, fui a la cafetería por un yogurt con granola, eso era todo lo que comería por hoy y ya llegando a mi casa, vería que mas comería.

—Esta tan flaca que da lastima.

ese comentario me hizo determe, sabia quien era la que estaba abriendo la boca, Emily, la popular, plástica y rubia de la escuela.

—No es que este flaca Emi, si no que mi cuerpo esta en forma, pero el tuyo...—dije callándome para verla de pies a cabeza —Dile que deje de comer frituras, no es bueno para la salud —le digo causando la risa de varias personas, no me gusta humillar a nadie, pero con ella, aveces es necesario hacerlo, ya que si no, jamas se callará.

Como, alejada de las personas, aunque puedo sentir su mirada en mi, analizando casa uno de mía movimientos, otros ideando la manera de conquistarme y otras pensando en mil manera de matarme. Al final de todo, siempre era yo el centro de la atención.

Las clases siguieron con normalidad, mi mano dolía en ocasiones, pero no me importaba en absoluto, tenia qué ser la mejor, tenia una beca que me ayudaba a pagar la mitad de mis estudios, pero tenía que mantener mi excelente calificación para seguir teniéndola.

Sentí las horas pasar rápido, el timbre sonó anunciando la salida, tome mis cosas y rápido salí de la escuela, tenía media hora para llegar a mi trabajo. Esta vez no corría, si no caminaba mas rápido de lo normal. El trabajo en esa cafetería era agotador, la paga no era muy buena, pero las propinas eran buenas, me ayudaban día a día, también en convivir con clientes me ayudaría en un futuro, no sabia como, pero me ayudaría.

Llegue once minutos antes, salude con un asentimiento a mía compañeras y me fui a cambiar para ponerme mi uniforme, unos minutos después salí, preparada para la larga tarde que tendría.

(******)

Decidí quedarme Horas extras, pero me arrepentí al ver lo oscuro qué estaba afuera, no tenia miedo, pero sabia que en las noches era peligro, sacudí mi cabeza sacandome todas esas ideas y me dispuse a caminara hacia casa.

Traía mis audífonos puestos, pero no bajaba la guardia, estaba por pasar por calles peligrosas y no me iba a ver como niña asustadiza.

—Hey linda.

Y ahí esta el primer idiota, seguí caminando y después supe no estaba solo, volte a ver cuantos venían y eran tres, bueno, se que podre con ellos. Estaba por llegar a un cruce y vi un carro detenido, aprovecharía ahí para perderlos o inmovilizarlos.

Un tipo salio del auto, hablando por teléfono, en cuanto me vio, colgó y se acercó a mi, oh por dios santo ¿Me iba a secuestrar?

—Te estaba esperando linda —dijo sorprendiéndome, miro hacia atrás de mi y fruncio el ceño, ahora entendía todo el teatro. El señor me abrazó, volteo hacia atrás y los hombres se dieron la vuelta.

—Gracias.

—No agradezca, te llevaré a casa.

espera ¿Que? esto ya se salio de control.

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