Capítulo 8: Un Nuevo Amanecer

El tiempo pasó en Villaselva, tejiendo las estaciones en una manta de memorias y experiencias. Elio siguió siendo el corazón alegre y la fuente de risas en la aldea, mientras su panadería se llenaba de personas que buscaban no solo pan fresco, sino también un momento de alegría en sus vidas. La magia que había despertado en el Bosque Místico lo acompañaba en cada sonrisa compartida y en cada carcajada que llenaba el aire.

Una mañana, mientras el sol pintaba el cielo de colores dorados, Elio caminaba hacia su panadería, listo para comenzar otro día. Sin embargo, algo en el aire le parecía diferente, una sensación de anticipación que lo hizo detenerse y mirar a su alrededor.

Fue entonces cuando notó una figura familiar que se acercaba por el camino. Era Serafín, con sus alas doradas brillando bajo la luz del sol. Serafín aterrizó con gracia frente a Elio, una sonrisa en su rostro.

"¡Saludos, Elio! He venido con noticias emocionantes", anunció Serafín con entusiasmo.

Elio sonrió, intrigado por la emoción de su amigo alado. "¡Hola, Serafín! Cuéntame, ¿qué noticias traes?"

Serafín se aclaró la garganta y habló con un tono solemne. "El Bosque Místico ha decidido honrarte por tu compromiso con el equilibrio, la alegría y la magia. Te ha otorgado el título de 'Amigo del Bosque'."

Elio se quedó sin palabras, sorprendido y emocionado por la noticia. "¿Un Amigo del Bosque? Es un honor que nunca imaginé recibir."

Serafín asintió. "Tus acciones han dejado una marca en el bosque y en las vidas de sus habitantes. Has comprendido el valor del equilibrio y has despertado la magia interior que reside en todos nosotros."

Elio se sintió abrumado por la gratitud y la humildad. Había venido al Bosque Místico en busca de aventura y diversión, pero había encontrado mucho más: había encontrado un propósito profundo y una conexión con la naturaleza y la magia que lo rodeaba.

Serafín continuó. "Como Amigo del Bosque, tienes la bendición de explorar el Bosque Místico con respeto y responsabilidad. Puedes continuar compartiendo alegría y risas, sabiendo que estás en sintonía con el equilibrio que guía este lugar."

Elio asintió, comprometiéndose a honrar la confianza que se le había otorgado. "Haré todo lo posible para ser un buen Amigo del Bosque y preservar la magia y el equilibrio que este lugar representa."

Serafín sonrió y extendió una pluma dorada hacia Elio. "Como símbolo de tu título, te ofrezco esta pluma. Llévala contigo como recordatorio de tu compromiso y de la amistad que compartes con el Bosque Místico."

Elio aceptó la pluma con gratitud, sintiendo su textura suave y cálida entre sus dedos. Sabía que llevaría consigo el regalo de la magia y la amistad donde quiera que fuera.

Después de un tiempo, Serafín se despidió con un aleteo y se elevó hacia el cielo. Elio miró la pluma en su mano y sonrió, sintiendo una conexión profunda con el Bosque Místico y su propósito en la vida.

A medida que el sol se alzaba más alto en el cielo, Elio entró en su panadería, listo para comenzar otro día de compartir risas y pan fresco. Sabía que su aventura en el Bosque Místico había transformado su vida de maneras que nunca podría haber imaginado. Había encontrado un equilibrio entre la diversión y la responsabilidad, y había despertado la magia interior que había estado latente en su corazón.

Con la pluma dorada como recordatorio y la magia del Bosque Místico a su lado, Elio sabía que cada día era un nuevo amanecer lleno de oportunidades para compartir alegría, encontrar conexiones profundas y hacer una diferencia en el mundo que lo rodeaba. Y mientras horneaba su pan y compartía risas, el Bosque Místico sonreía desde lo profundo de su ser, un testigo silencioso de la magia que había despertado en el corazón de un simple panadero.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***