Roger.
Han pasado tres semanas desde que vine al comando, Eleonor ha sido un buen soldado, será la primera mujer en la historia parte del ejército de un rey.
Se esfuerza y cumple las tareas que todos hacen, es fuerte y no débil, aunque es un poco terca y no deja de tutearme, ya estoy harto de decirle que no lo haga, así que dejo que lo haga, al cabo es lo que necesito, ya que tiene información importante, no se como pudo escapar del reino de Erick, de seguro esta siendo buscada y si eso pasa, debo protegerla, ya que a un traidor se le manda a la horca.
¿Cómo sería su vida en el Reino del Rey Erick? De seguro era una esclava, por eso su comportamiento tan tosco, pero tiene bastante información importante.
Salgo se mis pensamientos cuando Rick me habla, todos estamos en mi oficina, hablando sobre el mapa.
— Acércate, Eleonor señala que estos son los puntos más débiles del rey Erick, ya que en esta zona no mantiene muchos soldados.
Me acerco y Eleonor se encuentra al otro lado de la mesa, señalando el punto que enmarcó con tinta, roso su mano y no sé por qué rayos una electricidad corre por mi cuerpo, rápidamente me retiro.
— Gracias soldado, lo estás haciendo muy bien. Le digo a Eleonor y luego pienso, yo también la tuteo y eso fue desde el primer día, me siento extraño, pero no lo veo mal.
— ¡Gracias, su majestad! Responde y no entiendo, por qué lo hace con sarcasmo.
Todos seguimos señalando el mapa y colocando soldados, simulando como se acomodaran, si el rey intenta atacar; por qué yo no iniciaré ninguna guerra, el que lo hará será el rey Erick.
Después de media hora de tener la junta y estudiar los mapas, cada uno se va al campo de entreno.
Pasa el entrenamiento y cada uno se va a la ducha, claro que aparte una ducha diferente para Eleonor, ya que después de todo, es una mujer.
Camino por el campo y veo los girasoles, recuerdo la sonrisa de Adelaida y recuerdo que nuestra boda será pronto.
Me encaminó a mi habitación y las sirvientas ya me tienen listo el baño, es una bañera grande, me desvisto e ingreso, relajando mi cuerpo en el agua caliente.
Recuerdo a Adelaida, pero de un momento a otro aparece Eleonor. Me echo agua en el rostro, pero que estoy pensando. Me reprendo, de un momento a otro tocan mi puerta.
— ¡No estás ocupado! Pregunta Rick.
— Para nada, pasa le digo, tomando un trago de la copa de mi vino.
La puerta se abre y...
— ¡Eleonor y yo queríamos...! No termina de hablar, ya que él ingresa con Eleonor.
— Oh, perdón, no sabía que te estabas dando un baño, dice y voltea a ver a Eleonor.
Veo a Eleonor y cruzamos miradas, ella rápidamente mira hacia otro lado.
— ¡Si gustas, venimos en otro momento!
— ¡Pueden quedarse y decirme a lo que venían, de igual manera no me estás viendo completamente desnudo!
Eleonor se da la vuelta y comienza hablar. Al parecer si es tímida la Dama, digo dentro de mí, me gustaría ponerla nerviosa, ya que siempre tiene su modo sería activado.
— A las afueras del comando se encuentra uno de los espías del rey Erick.
— ¿Qué, como lo sabes? Digo poniéndome de pie.
Me doy la vuelta colocándome la toalla, volteo a verla y... sonrió de lado, ella se dio la vuelta y vota su libreta que traía. Únicamente creo que vio mis glúteos.
— ¡Ah... yo solo...! Habla tartamudeando y recoge su libreta.
Sonrió, es la primera vez que la veo nerviosa.
— ¡No te pongas nerviosa, solo fueron mis glúteos los que viste!
Cambia de colores y se enoja. Yo solo me río.
Se da nuevamente la vuelta.
— ¡Solo veníamos a eso, su majestad! Habla ella.
— ¿Por qué te das la vuelta?, de igual manera ya viste mis glúteos, no estoy enseñando nada más, únicamente mi torso desnudo.
Se da a vuelta y esta que me quiere matar.
— ¡Pues, no me impresionan tus nalgas! Lo dice con pesadez y sin vergüenza, no te creas la gran cosa.
— ¡No me creo la gran cosa, es que no has visto más!, le digo acercándome a ella y logro mi objetivo, ponerla nerviosa, su respiración sube y baja rápidamente.
— M,m,m,m,m, raspa su garganta Rick. No se si retirarme, pregunta con sarcasmo.
— ¡Claro que no, la que se retira soy yo! Cuando este vestido su majestad, hablamos, con su permiso, dice Eleonor, saliendo como los mil demonios.
Me río y niego con la cabeza.
— Te conozco y la querías poner nerviosa, cierto. Habla Rick.
— La verdad si, siempre está seria y creyéndosela sin emociones, así que quería jugar.
— ¡Roger, Roger, tú no cambias, pero a mi parecer ella está llamando tu atención!
— ¡Estás loco, la única que llama mi atención es Adelaida, Eleonor no provoca nada en mí, yo únicamente deseaba fastidiarla y listo!
— ¡Pues ten cuidado con tus juegos, por qué puede que terminen en atracción!
— ¿Cómo se te ocurre decir eso? Estoy a punto de casarme.
— Hay Roger, he conocido amistades que se casan amando a otras.
— Jajaja, amando a otras, yo no amo a Eleonor, ni siquiera siento nada por ella.
— ¡Ni por Adelaida!
Mi sonrisa desaparece porque tiene razón, no la amo, pero tampoco me es indiferente Adelaida.
— Pues Adelaida no me es indiferente, es bella y me gusta.
— Pero no te atrae como tú quisieras. Así que ten cuidado, por qué he visto como ves a Eleonor y puede que la veas con ojos de admiración por ser mujer.
— Si la veo con admiración, es una mujer y es fuerte, capaz de pelear con un rey y vencerlo, eso merece admiración, pero después de eso, no te preocupes, que no siento nada más por ella.
— ¡Eso espero Roger, por qué te casarás y verás a Eleonor todo el tiempo en tu reino! Al menos que desees que la envíe a la torre este, donde...
— ¡No! Digo rápidamente, ella es nuestra protegida también, cuando el rey Erick sepa de su traición, querrá matarla.
— Claro, como tú digas Roger. Ahora vístete que debes hablar sobre lo del espía.
— En un momento salgo.
— ¡Perfecto! Responde y sale de mi habitación.
Comienzo a vestirme y a pensar al mismo tiempo en lo que Rick me dijo.
Salgo rápidamente y me dirijo al salón de reuniones.
— ¿Dónde está el espía? Pregunto.
— ¡Ah escapado! Responde Eleonor.
— ¿Cómo que escapó, acaso no pudiste interceptarlo? Pregunto molesto y me le acerco ¿O lo dejaste escapar?
— ¡Claro que no! Me responde molesta y acercándose a mí. No sería capaz de traicionarte.
— ¡Lo hiciste con el rey Erick! ¿Cómo sé que me serás leal a mí?
— Por qué en primer lugar llevo tres semanas demostrándote lealtad, contándote todo lo que sé del rey Erick y su ejército, en segundo si escapé del castillo del rey Erick fue por qué ellos solo piensan en destruir y en matar, tercero, sabes por qué vine, yo quiero paz. ¡Pero si después de todo lo que ya dije, no confías en mí, pues me largo!, Dice Eleonor tomando su libreta y saliendo del salón de juntas.
Pasa cerca de mí empujando mi hombro, respiro profundo, en serio que es necia y altanera, pero eso es lo que necesito.
— Regresa aquí, digo sin voltear a verla. Eleonor, que vueltas, te ordeno. Esta vez lo digo gritando.
¡En serio que está mujer sacará lo peor de mí! Jamás salgo detrás de nadie, pero sé que no volverá si no la alcanzó y ella me sirve bastante.
¡Esperen todos aquí! Ordenó.
Me encaminó y llego a su cuarto, tiene puesta la ropa ceñida a su piel que traía el primer día.
— ¿Qué es lo que quieres? Dice con voz alta.
—En primer lugar, no me alces la voz y en segundo lugar, a tu Rey lo respetas.
Se queda callada y en una pequeña bolsa mete su libreta y se la coloca en el hombro.
— ¡Me puedes dar permiso, me voy a retirar de tu comando!
Empuñó las manos, esta mujer sí que me hace enojar.
— De aquí no te vas hasta cuando yo lo ordene.
—Pues déjame decirte mi rey, que yo me voy cuando yo lo decida.
— Estás muy equivocada, porque de aquí te vas, cuando yo quiera que te vayas.
— Pues déjame decirte, que yo no voy a estar en un lugar donde desconfían de mi lealtad, yo no deseo estar en tus soldados, si no confías en mí.
Está por irse y la sujeto del brazo.
— ¡Que no te vas!
Intenta soltarse de mí agarra, pero soy más fuerte y la empujo a su cama.
— ¡Ya no hagas tanto drama y déjame ir!
— ¡Tú no hagas tanto drama, ya deja de pelear, pareces una niña!
— ¡No soy una niña!
– ¡Pues deja de actuar como una!
— ¡Ya déjame ir! dice forcejeando.
Intenta levantarse de la cama y la sujeto de la cintura haciendo que vuelva a caer en la cama, empieza a golpearme y a forcejear, Pero soy más fuerte que ella y la sujetó más duro.
— ¡Pareces niña, ya te dije que no te vas!
Sigue peleando y de un momento a otro no sé cómo paro encima de ella.
— ¡Ya basta! le grito fuertemente.
Deja de pelear y me ve molesta, su pecho sube y baja rápidamente, mi respiración está agitada por el enojo; nuestras miradas se encuentran y no me había dado cuenta de sus hermosos ojos azules, no sé por cuánto tiempo nos quedamos mirándonos, Pero veo sus labios y no sé qué rayos me pasa. Me acerco a ella y siento su respiración, y únicamente le digo confiaré en ti.
Ella no responde simplemente me ve y diablos, deseo besarla, me acerco más y quedamos a punto de darnos un beso, cuando...
— Su majestad, ¿Se encuentran bien?
Ambos reaccionamos y ella rápidamente se quita de mi agarre.
— ¡Si, todo está bien! respondo agitado.
— ¿Entonces, confiarás en mí? Pregunta aun agitada.
— Me le acerco, si Eleonor, no volveré a desconfiar de ti.
Sujeto su cintura y también su cuello, la acerco a mí, maldición que me está pasando, deseo besarla.
— ¡Estás comprometido, creo que esto no es correcto! Habla Eleonor.
Joder, pienso y uno su frente a la mía.
— ¡Tienes razón! Lo siento.
— ¡Me quedará, ahora... puedes marcharte! Dice con respiración agitada.
— ¡Perfecto! Mañana regresamos al reino de Bolstin.
La suelto y salgo sé su habitación, me sujetó el rostro, pero... ¿Qué carajos estoy haciendo?
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 78 Episodes
Comments
Jessica
q papachongo es nuestro protagonista
2023-07-09
0
Elisa Galvez
amo esta novela 🤩🤩🤩
2023-07-09
0
china hernades
aquí solo son corrientes eléctricas, peligroso un corto sirguito, hay poresita la protagonista se está asiendo iliciones ba a sufrir veo yooo ,ojala no la conviertan en mala ,
2023-07-09
2