[CAPÍTULO TRES]

Criss se levantó, pero no dijo nada, así que solo le di una pequeña sonrisa, di media vuelta y empecé a caminar, iba a cruzar en una esquina hasta que escucho como Criss vuelve a llamarme

—Sé que May te dijo que nosotros no trataríamos de contactarte de nuevo y sé que si hago esto me va a matar, pero ¿no te gustaría ir al cuartel? Es cierto que las cosas que hacemos no son muy buenas, matamos o torturamos a personas, pero vas a tener un lugar seguro al cual llegar y no te va a faltar nada y no maltratamos animales

—Pero no creo que me acepten, no tienes que hacerte regañar por mí, ese día creí que mi padre iba a estar en la sala esperando a que llegue para pedirme disculpas y decidí mal, mi cabeza no logra entender, que para el vale más una moneda de 5 centavos que yo

— ¿Quieres venir?

¿Que si quería ir? Claro que quería ir, pero no tenía el valor para decirlo, así que solo asentí con la cabeza

—Entonces vamos—levante la cabeza para encontrarlo sonriendo de nuevo, creo que estaba muy distraído para darme cuenta de que al lado nuestro había un carro, muy elegante por cierto, sin más abrió la puerta y me dejo pasar— sube así llegamos más rápido

— ¿ese carro siempre estuvo aquí?

Criss no me respondió, solo se subió en la parte de atrás, conmigo, y le dijo al chofer que nos llevara a una carrera que yo no conocía, luego de un rato en el que sentía su mirada encima de mí, volvió a hablar

— ¿Cuánto mides?

—No sé

— ¿Cuánto pesas?

—No sé

— ¿Cuál es tu apellido?

—No tengo, Padre, no me dio el suyo y a mi madre no la conocí

— ¿Cuánto calzas?

—No sé

— ¿Fecha de nacimiento? ¿Años? ¿Tampoco sabes?

—Claro que sé eso—dije defendiéndome— 15 de octubre y tengo 13 años

— ¡13 AÑOS! — Dijo asombrando, asustándome un poco por el repentino grito y yo solo volvía asentir—¡Diablos! Creía que tenías 10— lo quede viendo ofendido, así que él solo levanta las manos en forma de paz y sonrió— no me culpes, eres muy bajito para tener 13

—No soy bajito, tú eres muy alto — dije defendiéndome— ¿y tú? ¿Cuánto mides? — empecé con las mismas preguntas que me hizo él

—1.86 cm

— ¿Por qué eres tan alto? — Dije realmente asombrado— ¿Cuánto pesas?

—No sé y ¿70 kilogramos? Ya paso un tiempo desde que me pese

— ¿Cuál es tu apellido?

—Estamos igual, pero yo no conocí ni a mi padre ni a mi madre

— ¿Cuánto calzas?

—39 o 40

— ¿Fecha de nacimiento? ¿Años?

—20 de abril y 17 años— todas las respuestas las decía con la misma sonrisa hasta que miro por la ventana y el carro se detuvo— bueno Anthony ya llegamos

Mientras Criss se bajaba, mis nervios aumentaron, las manos me sudaban y las piernas me empezaban a temblar, ¿y si no me aceptan? ¿Y si tengo que volver a la ciudad y me encuentro con ese hombre?, la cabeza se me estaba llenando con ese tipo de preguntas, la puerta fue abierta y Criss se encontraba del otro lado sonriendo y con una chaqueta en la mano

—Vamos— dije pasándome la mano para salir del auto y apenas estuvimos afuera, me coloco la chaqueta por los hombros — no te preocupes, es mía

Estábamos en el mismo bosque que la primera vez y al igual en ese entonces, yo no miraba el túnel por ningún lado, de repente algo pareció brillar cuesta abajo y ahí estaba Criss y detrás de él estaba el túnel, Criss entro de primero mientras yo lo seguía, me ofreció la mano y por puro instinto no la rechace, no sé por qué, pero sentía que si estaba al su lado no me iba a pasar nada, al fondo ya se podía divisar un poco de luz así que sin querer termine apretando la mano de Criss, haciendo que este parara un rato y me volteara a ver

—Tranquilo, Mei todavía no llega, así que vamos a hablar con May, ella es más fácil de convencer

— ¿Y si no me aceptan y tengo que volver a la ciudad?

—no voy a dejar que vuelvas allá, ¿entendido? Yo convenzo a May no te preocupes

Seguimos avanzando y cada vez la luz se hacía más fuerte, cuando llegamos se lograron escuchar dos voces, una hablaba mientras la otra reía

—Hasta que llegas—parecía ser Ángel— ¿le entras?

—estabas esperando la ropa, no a mí—respondió Criss— y después, ¿Puedes llamar a May?

—obvio, ¿Por qué más estaría pendiente de ti? —Volvió a hablar Ángel— y para qué la quieres ¿Estás lastimado?

— No, pero necesito hablar con ella

— ¿Ahora?

—Ahora

No se escuchó nada más, solo después de un rato la puerta se cerró y la otra persona hablo, este era Tom

—Hermano, ¿Por qué no entras?

—respóndeme algo primero ¿May está?

— ¿esta qué?

—de humor

—ah, como siempre un poco estresada pero bien

—Ya— volteo la cabeza y me hablo— vamos a entrar, relájate

—Bien—dije dándome apoyo a mí mismo

No supe como describir la cara de Tom cuando me vio, aprecia asombrado, pero a la vez parecía preocupado, la habitación se quedó en silencio y cuando Criss parecía que iba a hablar la puerta se abrió dejando ver a Ángel y May, Ángel al contrario de la otra vez tenía una venda en el brazo y el labio inferior partido, mientas May se miraba igual, aunque parecía que no había dormido por unos cuantos días, todos nos miraban, no sabía si solo a mí o a los dos, ya que tenía la cabeza agachada mientras trataba de esconderme detrás de Criss al final fue él el que termino rompiendo el silencio

—May, Buenas noches, ¿Cómo te encuentras?

— ¿Qué hace Anthony aquí?

—De eso mismo te quería hablar, él se podría…

—No.

La respuesta fue firme y Criss ni siquiera había terminado de hablar, deje escapar una pequeña sonrisa, sabía que se iban a negar, aunque no espere que lo hiciera tan rápido, pensé en decirle a Criss que estaba bien y que no me importaba volver a la ciudad, pero él volvió a hablar

­— ¿Por qué?

—por qué no, ahora has que regrese por donde vino

—Criss— traté de hablar pero fui interrumpido

—Él no se va a ir— dijo Criss mirando a May— el ‘Porque no’ no es una respuesta

May solo se quedó en silencio mirándome, fue entonces que sacó un arma y me apunto con ella, Criss saco la suya y termino apuntándola hacia May mientras me colocaba detrás de él, Tom y Ángel solo se apartaron, no sacaron ninguna arma, pero tenían una posición de pelea, yo no pude pronunciar ni media palabra solo me pegue más a la espalda de Criss

— ¿Criss acaso no te eh enseñado a no apuntarme con tu arma?

—También me has enseñado a no decir “porque no o porque si” si quieres decir algo dilo bien

Ambos seguían apuntándose con las armas y May volvió a hablar

—si él se queda tiene que ser asesinado, así que le estoy dando otra oportunidad de irse, como lo hizo la primera vez

— ¿Qué? Dijiste que Mei no tenía nada en su contra

—eso fue hace una semana y al parecer no te enteraste

—May estoy perdiendo la paciencia, ¿de que mierdas no me entere? ¿Por qué no se puede quedar?

—Criss, May bajen sus armas y tratemos de hablar—dijo esta vez Tom poniéndose en medio de ambos

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