[CAPÍTULO ONCE]

—No me agrada que hablen en presencia de otros ¿Cómo se llaman?

—Mei—interrumpió Criss— ellos son Sam y Mía

— ¿Tuyos? —volvió a hablar pero sin dejar de mirarnos

—Sí, discúlpalos aún no están al corriente de cómo se trabaja por estos lados ¿cierto chicos?

—Sí, discúlpenos— ambos nos paramos e hicimos una reverencia, entonces volvió a hablar

—Mía, ¿de dónde vienes?

—Del… Del CPSC

—Centro Psiquiátrico de Salud C— repitió moviendo la cabeza— muy bien y ¿tu Sam? ¿Vienes del mismo centro?

—No

— ¿De dónde vienes?

—Vengo de ciudad M

— ¿Dónde están tus padres?

—No tengo padres, vivía

—Vivías en un burdel, una prostituta se hizo cargo de ti ¿Cierto?

—Así es

—Leí tu expediente por que Criss fue el que te encontró, pero por más que leía y volvía a leer no encontraba unas cosas ¿Dónde quedaba ese burdel? Y ¿Cómo se llama la mujer que te cuido?

Alce la miraba y puede ver como entre Criss y May se devolvían las miradas, no hice ningún gesto y tampoco hable, entonces Mei se giró y les pregunto

—Criss, May ustedes no son de cometer errores en los reportes, ¿cómo se llama la mujer que se hizo cargo de Sam y donde queda su burdel?

Nadie dijo nada, May bajo la mirada mas no bajaba la cabeza, por su lado Criss parecía estar a punto de hablar pero callaba de manera inmediata, levante la cabeza, tome aire lo más silencioso que puede y di un paso al frente,

—Se llama Dolores, pero casi nadie la conoce con ese nombre por lo que se hace llamar Doris, una especie de abreviación, decía que así las personas no la reconocerían por los dolores que tiene su vida si no que solo conocerían la mitad de la historia, el burdel queda, a dos cuadras a la izquierda después del centro de salud D, de día es una especie de Bar y restaurante y por las noches es un burdel en toda la extensión de la palabra

Pude ver como todos a excepción de Crystal se ponían pálidos, Crystal por su lado solo ponía una sonrisa más grande

— Así que se llama Dolores, ¿y porque no aparece en el registro? ¿O no te lo hicieron llenar?

—Sí, la doctora May y el instructor Criss me dijeron que tenía que decir eso para que ellos lo pudieran poner, pero a Doris no le gusta que la metan en asuntos que no tenga nada que ver

—Que interesante mujer— hablo Crystal— Mei ¿Por qué crees que “Doris” criaría a un niño que no tiene nada que ver con ella y que aparte, a las damas de compañía no les gusta tener niños en sus negocios y luego digiera que ya no le importa su vida, Criss lo encuentra, lo trae y ella desaparece del mapa?

—Por la misma razón que los padres desaparecen de la vida de sus hijos—respondí mirándola— porque no les importa su ni ellos ni su vida

—Mei

— Líder —dije mirando a Mei mirando cómo esta alzaba una ceja y Criss me devolvía la mirada por interrumpirlo— ella no se relacionaba conmigo porque decía que yo no era ni seria nunca de su importancia, conoció a mi madre y por ella me tenía, mas no cuidaba de mí, me dio trabajo y yo limpiaba las mesas, a cambio podía tener un lugar donde dormir y comida y si me comportaba podría quedarme con las propinas de algunos clientes

—Entonces ¿te prostituías a cambio de comida y techo?

—Crystal cuida tus palabras, no escuchas que solo limpiaba mesas

—Criss, tú deberías cuidar tus palabras, yo no fui la que me equivoque en el reporte

—No me prostituía, Doris solo se encargaba de dar a mujeres bonitas y que atrajeran a clientes, mujeres así como usted

— ¿Qué me has dicho?

—Crystal has silencio, nadie estaba hablando de eso y por tu lado—dijo mirándome— tendrías que tener un poco más de respeto

—En ningún momento le falte al respecto solo digo que es una chica muy bonita y como ella habían muchas chicas en el burdel donde trabajaba Doris

—Mei, no te parece interesante ver cual hermosas son esas chicas ¿Por qué no las vamos a ver?

— ¿te parece bien? Y ¿cómo pregunto por ti?

— Como Sam, me imagino— volvió a hablar Crystal

—Doris sale a partir de las 7 de la noche, siempre va de negro y lleva una pipa con olor a canela—respondí dándole una sonrisa— se lo digo para que no tenga que esperar y no, ella me decía Ant

— ¿Ant? ¿Por qué no llamarte por tu nombre? — pregunto Crystal haciendo una cara de desconcierto

—Por si no lo sabe, instructora Crystal, en los burdeles todos suelen cambiarse el nombre, ella me puso Ant ya que hace referencia a una hormiga, mi estatura no coincide con mi edad por eso el apodo

—Conseguiste a muchachos muy interesantes este año Criss

—Eso parece Mei

—Tom llévatelos, pueden seguir con el recorrido, Criss, May, Crystal, Sam y yo vamos a dar un paseo antes de la hora de la cena, Crystal acompaña a Sam a colocarse un abrigo, los esperamos en la entrada

—Si Mei, vamos Sam

—Permiso

Me retire haciendo un gesto de despedida con la cabeza, seguí a Crystal hasta que salimos de ese lugar, nos encontrábamos en el patio y luego llegamos al pasillo de las habitaciones, la puerta estaba cerrada, pero no con llave así que solo tuve que empujar para que la puerta se abriera, busque algo que me sirviera en la mochila que nos habían entregado, me puse una chaqueta que Criss me había regalado, pero entonces me entro una duda y me toco preguntarle a Crystal

—Instructora Crystal, disculpe solo tengo esta chaqueta, pero es de color negro y pues no yo no tengo que llevar otro color de ropa que no sea gris

—no te preocupes llévala igual si lo que dijiste resulta ser falso, no vas a volver aquí y May y Criss serían castigados de la peor manera posible—hablo sonriendo— ¿vamos?

—C-Claro

Entonces era así, si resultaba ser mentira todo lo que dije, todos tres nos meteríamos en problemas, no supe que más decir así que solo cerré la puerta y empecé a seguir a Crystal. A medida que nos íbamos acercando a la entrada los nervios más se apoderaban de mí, afuera de un coche, parecido al que me subí cundo Criss me llevo por segunda vez, estaban Criss y May esperándonos, Crystal no dijo nada y se sentó en el asiento del copiloto, May abrió la puerta derecha y entro al coche, Criss me miro por un rato, me dio una sonrisa preocupada disfrazada de tranquilidad y abrió la puerta

—Entra, entre más rápido vallamos más, rápido podremos volver

Subí al carro sin decir ninguna palabra, Criss entro después de mí y Mei, quien iba de piloto, empezó a hacer andar al carro

Qué ambiente más tenso en el que nos encontrábamos

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