DETALLES

Hoy es uno de esos días en los que no tengo ganas de hacer absolutamente nada y menos cuando esos benditos sueños, moja bragas no me dejan en paz y me tienen con un genio que ni yo misma me aguanto ya que ni el agua fría funciona como quisiera y menos con el sobre cargo de hormonas llenándome de frustración y amargura, ya tengo seis meses y mi vientre está bastante abultado por lo que Daniel siempre pregunta si estoy segura de

que no son gemelos.

Se preguntarán qué he hecho para reconquistar a mi querido Mateo, bueno le he enviado varios tipos de Rosa para demostrar mis verdaderos sentimientos hacia él y que se diera cuenta de cuánto lamentaba sinceramente todo lo malo que ha sucedido entre nosotros, dure una semana enviándole desayunos preparados por mí, después postres, otras veces almuerzos, aunque no sé si se los ha comido, solo espero que por lo menos por esa parte valore el esfuerzo que he estado haciendo.

Para mitigar los efectos de mis alborotadas hormonas me meto de lleno en el trabajo de la empresa ya que hay grandes pedidos de nuestras prendas y si pierdo mi tiempo no vamos a poder cumplir a nuestros clientes, ya cuando mi bebé me pide alimento decido parar e ir a la cafetería que está justo al frente para comer algo rico, al llegar a esta me ubico en una esquina para pasar desapercibida cuando escucho una risa algo conocida, busco con mi mirada al dueño de esta y bingo, allí está él junto a ella, se ve feliz al parecer si se ha olvidado de mí y todo lo que he hecho no ha servido de nada lo cual me pone algo triste “malditas hormonas” me levanto para salir de ese lugar pero al parecer fallo por que escucho pronunciar mi nombre “felicidades por ser tan sigilosa”, me giro un poco y veo como Antonella camina hacia mí con cara de sorpresa al ver mi abultado vientre.

Antonella: por Dios, te ves tan hermosa (se acerca a darme un abrazo), te sienta de maravilla

Valeria:gracias (Mateo se acerca observando de mi vientre a mi rostro) tu también estas muy bella

Mateo: un gusto saludarte Valeria, me alegra que tu embarazo vaya muy bien (con voz melancólica)

Antonella: espero verme igual de fabulosa cuando vaya a tener a mi primer bebé

Valeria:muchas gracias (la estocada final me la acaba de dar, mis ojos comienzan a picar) fue un gusto saludarlos, que pasen buena tarde

Mateo: Valeria… (la tomó suave por la muñeca) ¿te encuentras bien?

Valeria: si, (trato de zafarme de su agarre como puedo con disimulo, él nota mi reacción porque me suelta de inmediato) yo… debo ir a mi cita de control y se me hace tarde

Salgo de inmediato de la cafetería, mis lágrimas empiezan a salir, no puedo controlarlas, odio llorar no soporto sentirme insegura, derrotada, es como si todo lo que era se redujera a este momento en este ahora donde solo soy una mujer estúpida que quiere rendirse y dejar que el hombre que ama sea feliz con la persona que ha escogido, pero no es tan fácil cuando sabes que eres el único culpable de tu propio sufrimiento.

Subo a un taxi y voy hacia la clínica donde tengo mi cita de control, si, casi siempre lo hago sola ya que no es como si fuera a donde Mateo y le diga “hey tengo a tu hijo en mi vientre así que necesito que vayas conmigo a todos los controles” cuando este no ha permitido siquiera que me acerque y realmente ya no sé qué más hacer, al llegar me bajo del taxi y voy directo a la entrada, pero me detengo justo al frente de esta al escuchar su voz.

Pov Mateo

Este fin de semana he decidido no ir a la empresa por lo cual trabajo desde mi despacho, al bajar veo a mi hermana junto a Antonella con una gran sonrisa dibujada en sus labios, se acercan dándome un cálido abrazo cada una

Stefania: feliz cumpleaños hermanito

Mateo: creo que lo había olvidado

Antonella: gracias a Dios estamos nosotras para recordártelo

Mateo: al parecer es algo bueno el tenerlas merodeando todo el tiempo por allí

Stefania:  hey no seas cruel

Mateo: sabes que es broma

Stefania: quería ser la primera en darte un obsequio, pero alguien se me adelanto (le entrego

una mediana caja rectangular)

Antonella: creo que deberías abrirlo

Abro la caja y dentro de esta hay una Rosa roja con una nota y una caja pequeña,

“espero tengas un día maravilloso por ser tu cumpleaños y espero algún día poder compartirlo contigo” Atte: VS abro la caja más pequeña y dentro se encuentran un par de gemelos elaborados en plata con mis iniciales

Stefania: son preciosos

Antonella: creo que alguien está poniendo empeño en reconquistarte

Mateo: estaré en mi despacho, me avisan para desayunar

Ya dentro de mi despacho me ubico detrás de mi escritorio con mi mente divagando, no entiendo porque ahora después de que he decidido hacer mi vida ella quiere estar presente, y con esto lo único que hace es que me confunda, aunque por otra parte mi alma abatida por su constante rechazo siente un poco de emoción al saber que ella ha tenido presente este día lo cual me hace cuestionarme un poco, ya que siempre pensé que le desagradaba.

Stefania: ¿piensas quedarte encerrado todo el día?

Mateo: tengo mucho trabajo y no puedo desatender lo de la nueva sucursal

Stefania: ¿no crees que significa algo?

Mateo: ¿a qué te refieres?

Stefania: a Valeria una persona que odia a otra no tiene presente este tipo de fechas

Mateo: no quiero pensar de más

Stefania: eso fue mandado a hacer con anticipación

Mateo: ¿Por qué ahora? ¿Por qué no cuando la buscaba incesantemente?, cuando deseaba que me

escuchara para darle una explicación, ¿Por qué no cuando la busque unos minutos antes de su boda? ¿Qué cambio ahora?

Stefania: las cosas casi nunca suceden cuando uno desea si no cuando es su momento, a veces queremos forzar situaciones y sentimientos que no están listos para relucir en ese instante, todo tiene su tiempo

Mateo: eso parece ser una buena broma, un muy mal chiste

Stefania: ¿porque no solo permites que las cosas continúen su curso? En la mayoría de los casos llegan con maravillosas sorpresas

Mi hermana sale mientras yo me quedo analizando cada una de sus palabras, no sé porque siento como que sabe algo y no me lo quiere decir, “Valeria ¿Por qué ahora? Te amo, pero es difícil pensar que puedas sentir lo mismo”, después de un día de mucho trabajo, he decidido que no saldré a ninguna parte ya que mis ánimos no es que estén de muy de fiesta y para no dañarles el plan a los demás.

Un nuevo día, pero la rutina es la misma, ya en la empresa antes de llegar a mi oficina mi asistente se me acerca para entregar una bandeja.

Sara:buenos días jefe, le llego esto muy temprano

Mateo: sabes quién lo ha enviado

Sara: no, pero tiene una nota adentro

Mateo: ok, gracias

Ingreso a mi oficina mientras mi asistente me informa todo lo que está pendiente para el día, mi agenda no da espacio, a veces quisiera perderme por un buen tiempo, pero las cosas no marcharán igual y tampoco puedo tirar a la borda, todo el trabajo de mis padres y el mío.

Destapó la bandeja y me impresiono al ver un desayuno exquisito, decido leer la nota “espero este detalle pueda darme un pequeño espacio en tu corazón y así poder resarcir uno a uno mis errores” Att. VS

“Hay Valeria, ¿que buscas? No quiero ilusionarme al pensar que hay un espacio para mí en tu corazón”.

Así pasaron varias semanas y continuaron llegando diferentes detalles a mi oficina de parte de ella, mi corazón rebosa de felicidad, pero no me siento totalmente confiado ya que no nos hemos vuelto a ver y realmente no me siento listo para tenerla frente a mí y no arrastrarla a mis brazos y no separarme nunca más de ella.

Antonella: ¿cómo sigues de detalles?

Mateo: cómo es que… olvídalo (niego con la cabeza)

 Antonella: sabes que deseo verte de una buena vez feliz con la mujer que amas, pero ya me está cansando tu orgullo y testarudez

Mateo: no deseo hablar de eso ahora

Antonella: como desees… acompañe a comer algo, hay una cafetería en la que venden una deliciosa porción de torta de chocolate, hoy romperé dieta

Mateo: creo que André te encontrara como pelota si sigues comiendo así

Antonella: son los nervios de la boda

Mateo: si claro, ahora la culpa es de la boda

Salimos rumbo a la dichosa cafetería, ya dentro Antonella se degusto tres porciones de torta de chocolate mientras yo solo tomaba café, cuando la vi a ella ingresar tan hermosa como siempre y ahora aún más, el embarazo le ha sentado maravillosamente mientras yo me quedo como idiota observándola, se sienta al final del salón mientras yo miro embobado su hermoso rostro.

Antonella: pareces quinceañero viendo a su primer amor jajajaja

Mateo: literalmente ha sido mi primer y único amor

Antonella:no entiendo porque a veces se comportan como unos críos, simplemente ve y acércate a ella

Mateo: crees que no he querido hacerlo, cielos lo he pensado muchas veces

Antonella:¿Y qué te detiene?

Mateo:siento que si lo hago no me voy a poder detener y me lanzare a ella como León hambriento

Antonella: ya quisiera yo que André estuviera aquí para que me devoré (doy un largo suspiró) eres un idiota

Mateo:hey (serio)

Antonella: no te preocupes yo te acerco

Mateo: que vas a …

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