capítulo 6

Al día siguiente, Esther se despierta emocionada y va a despertar a Ben, quien se despierta sin ganas y dice que no quiere ir.

- Esther: Ok, entonces iré a ver a tus amigos jugar.

- Ben: ¿Qué? No.

- Esther: Entonces tendrás que ir.

- Ben: Pero...

- Esther: Tu papá lo permitió, cariño, podrás jugar.

- Ben: ¿En serio? ¡Yuhuuu!

Salta sobre la cama celebrando, Esther lo abraza y ambos caen en la cama. Logan entra a la habitación, queriendo saber la razón de los gritos. Ben corre hacia él, lo abraza emocionado y le agradece.

- Logan: Ahora tendrás que hacer un gol.

- Ben: Dos.

- Logan: Muy bien.

- Ben: ¿Vas a verme jugar?

- Logan: Si puedo, iré.

- Ben: Vale. Vamos a bañarnos, Esther.

Corre hacia el baño y Esther lo ayuda, lo viste y prepara su uniforme de juego en la mochila.

Ben desayuna rápidamente, estaba ansioso. Esther lo lleva a la escuela, vuelve a casa y se queda con Zaya. Logan se sienta en el sofá y se pone a trabajar en su portátil.

- Zaya: Papá.

- Esther: Estás muy lista, cariño. Tu papá está ahí, despídele con un saludito.

Esther le enseña cómo hacerlo y Logan le saluda haciendo que ella sonría.

- Zaya: Ma.ma

- Esther: ¿Quieres el biberón?

Esther había entendido, pero al ver la mirada incrédula de Logan, trató de disimular.

- Zaya: Ma.ma

Mama, mama.e

- Esther: Princesa, es tía, di tía.

- Zaya: Mama.

- Esther: Tía... habla nerviosa

- Zaya: Tii.

- Esther: Eso, tía.

- Zaya: Mama.

- Logan: Olvídalo Esther, está aprendiendo a hablar y te llamará mamá, te ve como una... suspira

- Esther: Pero señor...

- Logan: Si quieres, déjala, ella lo entenderá en el futuro.

- Esther: Está bien.

Zaya sigue repitiendo varias veces, después del almuerzo Esther se arregla, el juego es a las 14:00, pero Ben quiere que ella vaya más temprano y tiene que hacer dormir a Zaya.

Esther baja a la sala después de unos minutos, va a la cocina y se encuentra con Logan en el camino.

Logan: Nuestra

Esther: Señor... Logan, ya dormí a Zaya, ¿puedo irme?

Logan: ¿Así te vas?

Esther: Sí, ¿por qué? ¿estoy fea? ¿simple? ¿no estoy vestida adecuadamente, o no?

Logan: Tranquila, no es eso... olvídalo. El chofer te llevará, estás estupenda, puedes irte.

Esther: ¿Tú no vienes?

Logan: Iré a ver.

Esther agarra una merienda para Ben en la cocina, Logan la acompaña hasta el coche, ve a un guardia que será el chofer, mirándola y siente incomodidad. Cambia a los guardias, deja a ese en casa, Esther se va y él se queda en la sala.

Al llegar a la escuela, Esther se dirige al lugar indicado donde será el juego, busca un buen lugar en las gradas, los niños están todos allí con sus uniformes pequeños, se ven muy lindos.

Como Ben dijo, hay muchos padres allí, está lleno, Ben la llama, ella va hacia él, la abraza emocionado y la observa.

Ben: ¡Viniste! Esther, estás hermosa.

Esther: Gracias, cariño, ¿y por qué no estás vestido como los demás?

Ben: Está rasgado... dice triste

Esther: No te pongas triste, voy a arreglarlo, ¿vale?

Ben: ¿Cómo?

Esther: Ve con tus amigos, yo iré a comprar algunas cosas para arreglarlo y vuelvo pronto.

Ben se va, Esther está desesperada con miedo de no tener tiempo suficiente, busca en su celular una tienda cercana que venda hilo y aguja, le pide al chofer que la lleve a esa dirección, él no quiere ir, ya que ella no tiene permiso, Esther amenaza con ir caminando y él tiene que ir.

Esther sale corriendo del coche, compra rápidamente las cosas, regresa a la escuela y encuentra a Logan con Ben.

Él la mira muy enfadado, ella ya sabía que el guardia le avisaría a él, pero no sabía que sería tan rápido, ella no le hace caso y se acerca a Ben.

Esther: Mi amor, ¿en dónde está rasgado?

Ben: Aquí.

Esther: Está cortado y no rasgado.

Logan: ¿Estás diciendo que alguien hizo esto?

Esther: Sí, si estuviera rasgado se estaría deshilachando, pero el corte está liso, mira.

Logan: Voy a descubrir quién hizo esto.

¿Qué vas a hacer?

Esther: Coser, déjame arreglarlo.

Esther se pone a coser, Ben vuelve a estar emocionado, sus amigos se acercan y le muestran a ella las suyas también.

Esther cose todas, sabe hacerlo bien, no sabe con quién aprendió, pero siempre salva su ropa.

Logan la observa, seguramente ninguna de esas mujeres que están allí lo haría, pero ella lo hizo, ella no es como las mujeres que han aparecido en su vida, es completamente diferente, nunca ha necesitado llamar la atención. Simplemente salvó el juego de los chicos.

Ben: Ella es mi mamá.

Ben habla con sus amigos presentando a Esther, ella mira a Logan con miedo, él la mira y asiente con la cabeza.

Esther: Hola, chicos.

Ben: Mamá, él es Arthur, Léo, Luccas, Théo, Tom y Liam.

Esther: Mucho gusto, chicos, soy Esther.

Liam: Tía, ¿va a quedar bien?

Esther: Ya quedó, pónganse todos.

Luccas: Quedó bien.

Théo: Gracias, tía.

Esther: De nada, chiquito.

Ben: Yo soy tu chiquito.

Esther: Siempre... lo besa... haz muchos goles.

Ben: Lo haré, ¿papá va a vernos?

Logan: Sí, nos quedaremos sentados mirando.

Logan lleva a Esther a las gradas, y ellos se quedan viendo el juego de los demás grupos, pero Esther siempre miraba a Ben para asegurarse de que todo estuviera bien.

Después de dos grupos, entra la turma de Ben, Esther lanza muchos besos, está emocionada, Logan la observa y se pregunta de dónde sacó tanta energía.

Empiezan a jugar después de la presentación, Esther no puede quedarse quieta, grita, salta, no le importa quién la esté mirando.

Cerca del final del primer tiempo, Ben marca un gol y ella celebra y se emociona.

Ben sigue gritando por ella, muy emocionado, fue una emoción única, en el descanso ella vuelve a sentarse.

Logan: Todos estamos sordos con tus gritos, no es la Copa del Mundo, Esther.

Esther: Tu hijo está jugando y tú estás como una estatua, ¿no está guapo? Marcó un gol y tú aún no querías dejarlo.

Logan: Quédate quieta.

Esther: Aburrido.

Logan: ¿Qué dijiste?

Esther: N... nada, voy a llamar a Celina para saber si Zaya se despertó.

Logan: ¿Por qué?

Esther: Porque me preocupo, ¿no? No sé si está bien.