La Niñera de los Hijos del Mafioso
Esther é una mujer dulce, simpática, educada y humilde. Tiene 24 años, es soltera, vive en un pequeño apartamento y está graduada en nutrición.
Hace cuatro años Esther y sus padres sufrieron un accidente de coche, sus padres fallecieron, Esther quedó en coma durante algunos meses, perdió la memoria y se mudó a la ciudad donde estuvo internada.
Tras salir del hospital, Esther empezó una vida diferente: estudió, se licenció en nutrición, consiguió trabajo en una residencia de ancianos y empezó a ocuparse de su alimentación.
Con el tratamiento, pudo recordar cosas de su vida cotidiana, pero seguían siendo de su infancia.
Esther estaba leyendo a unas señoras, una mujer la llamó y se fueron al jardín.
Celina: Discúlpame por sacarte de allí.
Esther: No hay problema, ¿puedo ayudar en algo?
Celina: Eres una mujer muy trabajadora, admiro esa cualidad en ti. Mi jefe está buscando una niñera para sus hijos, ¿no te gustaría?
Esther: ¿En serio? No sé, Celina, nunca he cuidado niños, ¿y si hago todo mal?
Celina: Jaja, tranquila, estaré allí contigo. Te gustará y aprenderás rápido. Son dos niños, un niño de 5 años y una bebé de 10 meses.
Esther: Entiendo, ¿crees que tengo oportunidad?
Celina: Hablaré con él sobre ti, dame tu currículum y cuando tenga una respuesta te avisaré.
Esther: Está bien, gracias Celina, me ayudaría mucho.
Celina: No me agradezcas, querida, me caes muy bien. Sé que aquí no pagan mucho, pero estoy agradecida de que cuides tan bien a mi madre.
Esther: Lo hago con mucho cariño.
Celina: Lo sé, querida.
Se despiden, Esther regresa a la sala de lectura, pero no puede concentrarse, la única cosa en su mente es ese trabajo de niñera, ¿saldrá bien?
Dos días después...
Celina regresa a la casa de apoyo, visita a su madre y luego va a ver a Esther.
Celina: ¿Podemos hablar?
Esther: Claro, vámonos al jardín.
Celina: ¿Cómo está mi madre? Parece que tiene mejor color.
Esther: Está comiendo bien, si sigue así, ganará algunos kilitos más.
Celina: Qué bueno.
Esther, hablé con mi jefe, quiere conocerte, ¿qué te parece si vamos ahora mismo a hacer la entrevista?
Esther: Claro, podemos ir ahora mismo, iba a irme de todas formas.
Celina: Perfecto.
Esther toma sus cosas, se despide de todos y se va con Celina. Un lujoso auto negro está esperándolas, el chofer las lleva hasta la casa.
Celina es la ama de llaves de la casa, ha cuidado del "jefe" y de la casa durante algunos años, es considerada parte de la familia.
Esther sabía que el jefe de Celina era rico, pero al ver la casa queda impactada. Entraron y la casa es más hermosa por dentro que por fuera, puro lujo, Esther estaba impresionada.
Un hombre muy atractivo, vestido con traje, con su expresión fría, calculadora, bajó las escaleras y las miró.
Celina: Logan, esta es la persona de la que te hablé.
Logan: Sígueme.
Él sale, Esther respira hondo, se persigna varias veces y lo sigue.
Entraron a la oficina, Esther estaba muy nerviosa, no se atrevió a mirarlo en ningún momento, pero como buen observador, él exigió que mantuviera su mirada en él mientras conversan.
Logan: ¿Cuál es tu nombre?
Esther: Esther García.
Logan: ¿Edad?
Esther: 24 años.
Logan: Vi en tu currículum que nunca has trabajado como niñera antes.
Esther: No señor, pero prometo hacer lo mejor que pueda.
Logan: Muy bien, sabes que tendrás que renunciar a tu trabajo actual, ¿verdad?
Esther: Sí, señor.
Logan: ¿Soltera?
Esther: Sí.
Logan: ¿Hijos?
Esther: No.
Logan: Bien, el empleo tiene algunas reglas, léelas.
Él le entrega un papel, Esther lee cada cláusula con atención y se confunde con algunas.
No salir sin permiso.
No salir con los niños sin permiso.
No llevar a nadie a la mansión.
Llevar a Bernardo a la escuela.
Vivir en la mansión.
Acompañar en los viajes.
No entrar a la oficina.
No estar cerca cuando haya visitas masculinas.
Cuando salgas, irás acompañada de los guardias.
Recibirás bonos cuando trabajes más allá de tu horario/día, vale de comida, seguro médico, contrato legal, entre otros...
No llevar información de la casa fuera de ella.
Esther: Muy bien, pero ¿tendré días libres?
Logan: Sí, pero en la mayoría de los sábados, te necesitaré aquí.
Esther: Está bien, acepto todas las reglas.
Logan: Estarás en periodo de prueba durante una semana.
Esther: Gracias, señor, haré lo mejor que pueda.
Logan: Así espero.
Y otra cosa, veo que eres nutricionista, ¿puedes encargarte de la alimentación de los niños? Te pagaré por eso.
Esther: Sí, y no es necesario que pague, con el sueldo es suficiente.
Logan: Tú decides.
Celina te mostrará la casa y los niños, mañana ya puedes traer tus cosas.
Esther: Sí, señor, gracias una vez más, permiso.
Esther se retira, encuentra a Celina en la sala, celebran en voz baja, Celina la lleva a mostrarle la casa y su habitación.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 248 Episodes
Comments
Silvana Maria LLanos Cantillo
cambio de vida todo muy extraño pero allí va la aventura
2024-08-22
18
Cinzia Cantú
Bien, bien, bien, trabajo prometedor. La regla número 8 parece algo rara, vamos a ver que pasa.
2024-07-23
16
Cristina Prieto
me encantan estos tipos de historias el siempre fío y al final sé derrite jajaja gracias por compartir
2024-07-06
16