Episodio 5

-Bien tu puedes quedarte aquí y terminar de picar las verduras mientras yo iré a buscar el vino.

-Bien yo me encargo de eso entonces tu ve tranquilo.

Hablo Zoe mostrándole una sonrisa confiada a Adrián el cual estaba algo preocupado por ella “Es demasiado pequeña y delgada ¿en su mundo son todos así?” se preguntaba este mientras caminaba hacia la bodega pensando en el delgado cuerpo de Zoe “Ese vestido era de mi madre y a ella le quedaba algo apretado pero a esta chica parece quedarle grande…” Adrián entro a la bodega viendo el esqueleto vampírico de uno de los subordinados de su padre por lo que lo pateo haciendo volar la cabeza del esqueleto como una pelota hacia el otro lado de la bodega.

-Un vino ligero tendré que elegir…hah están casi todas las botellas de vinos quebradas será difícil encontrar una botella buena entre todo este desperdicio…

Adrián reviso entre toda la bodega encontrando solo unas cuantas botellas en buen estado por lo que dio un gran suspiro mirando el desastre que había a su alrededor, luego salió del lugar y vio a Zoe picando todas las verduras con una sonrisa “Esto no es tan malo” pensó Adrián recordando que tan solo se sentía viviendo en ese gran castillo completamente solo sin una sola voz o ruido a su alrededor.

-Oh ya llegaste, las verduras ya están picadas ¿Qué más necesitas que haga?

Pregunto Zoe mientras comenzaba a lavar lo que había ocupado para limpiar un poco la cocina.

-Yo me encargo del resto no te preocupes y siéntate ha sido un día difícil para ti me imagino.

-Si bueno, era de noche cuando fui atacada pero cuando llegue aquí era de día así que si estoy algo cansada en realidad a todo esto ¿Dónde están esos hombres?

Pregunto Zoe mirando a su alrededor, Adrián que ya estaba entendiendo un poco la personalidad de Zoe se detuvo de espalda a esta mientras sacaba un poco de pescado al vapor que había cocinado.

-Ellos, ellos se fueron… no te preocupes que no creo que te los vuelvas a encontrar ya que los alrededores son peligrosos.

- ¿Qué? ¿Peligrosos\, pero ellos?

-Ellos decidieron irse por su propia voluntad así que no te preocupes demasiado, de todas formas, no creo que debas preocuparte después de lo que ellos intentaron hacerte.

-…

Zoe guardo silencio sabiendo que era verdad, esos hombres no parecían haber hecho eso por primera vez, seguramente ya habían intimidado a otras mujeres e incluso podrían haber cumplido su cometido con otras víctimas, Zoe solo había tenido suerte esta vez.

-Bien la comida esta lista.

-Te ayudare a servir los platos.

-No te preocupes solo quédate allí…toma.

Adrián le entrego a Zoe un plato de comida mientras ambos se sentaban a comer juntos en la mesa, Zoe incomoda se mantuvo en silencio mientras miraba a Adrián comer elegantemente, ella no paraba de mirar cada gesto y movimiento que este hacia contemplándolo durante toda la comida “Esta muy rica la comida, es un buen cocinero y…muy hermoso también” pensó Zoe mientras él recogía los platos y los llevaba para limpiarlos.

-Te quedaras en el mismo cuarto que te mostré hace rato, creo que será cómodo para ti aparte no hay muchos cuartos intactos así que…

-Está bien gracias Adrián ese cuarto es perfecto.

Dijo Zoe mientras Adrián la acompañaba a la habitación donde esta se quedaría a dormir Zoe, después de dejarla allí este se marchó de vuelta a su dormitorio, pero no pudo evitar darse cuenta por primera vez en el estado en el que se encontraba el castillo “Todo está destruido no creo que sea apto para que viva una joven como ella…” pensó Adrián.

- ¿Qué estoy pensando? Ella apenas llego hoy y yo estoy pensando en arreglar el castillo para hacer ¿más cómoda su estadía?

Dijo Adrián en voz alta dándose cuenta en los pensamientos que estaba teniendo, pero al final se paró en la cima de las escaleras y vio el gran salón del castillo viendo como este estaba casi completamente destruido “Bueno supongo que en algún momento deberé arreglar este lugar” pensó Adrián caminando a su habitación pensando en comenzar pronto a ordenar y arreglar el castillo. Al día siguiente un ruido extraño despertó a Adrián el cual preocupado de que hubiere entrado un intruso o una bestia se apresuró a revisar encontrando así a Zoe limpiando los alrededores del castillo evitando completamente el tocar los huesos.

-Señorita…

-Oh lo siento te desperté, trate de ser lo más silenciosa posible lo lamento.

-No está bien, pero ¿Qué haces?

Pregunto Adrián mirando el rostro de Zoe manchado con polvo.

-Bueno me estoy quedado en este castillo gratis así que decidí ayudar un poco con la limpieza, no te preocupes no entre en las demás habitaciones, solo me he encargado del salón y de los pasillos.

Adrián miro el lugar viendo que Zoe había estado intentando hacer lo mejor que podía, pero el salón era demasiado grande como para que ella pudiera limpiarlo sola.

-No es necesario que te preocupes por eso, yo me encargare más tarde de ordenar el resto del castillo mientras tanto ¿Qué te parece si me acompañas a buscar algo para comer?

- ¿Buscar algo de comer?

Zoe miro a Adrián confundida, pero lo acompaño de todos modos siguiéndolo hasta un pequeño rio cerca del castillo donde este parecía ir a pescar.

-Puedes esperarme allí, yo buscare algunos peces para ambos.

-No, dime cómo hacerlo y yo te ayudare.

Dijo Zoe mientras veía a Adrián, pero este sonrió y asintió al ver el entusiasmo de Zoe la cual lo miro expectante, fue entonces que su rostro se nublo un poco al ver que Adrián tan solo usaba las manos para pescar los peces del lugar, la velocidad de este al atrapar los peces que nadaban en el rio era tan rápida que ni siquiera ella podía notar bien el movimiento que este hacía.

-Eso es…no creo que pueda hacer eso, eres demasiado rápido ni siquiera pude ver qué movimiento hiciste exactamente, creo que buscare algunas verduras que nos sirvan mientras que tú haces eso.

Hablo Zoe mientras buscaba algunas verduras y frutas cerca, al paso de unos minutos Zoe regreso con una canasta llena de verduras junto a Adrián para hacer la comida del día, fue entonces que esta noto dos muñecos acomodados en un mueble frente a la mesa “Que lindos” pensó está mirándolos por unos segundos provocando que Adrián se diera cuenta de esto avergonzándose de sí mismo.

- ¿Te gustan?

-Son muy tiernos y bonitos ¿son de algún niño?

-…

Adrián sé sonrojo evitando decir que esos muñecos habían sido hechos por él y eran la representación de sus amigos ya que él se sentía muy solo en el castillo y tenía a los muñecos para hacerle compañía.

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