Episodio 18

- ¿Adrián?

-Zoe eres fascinante.

-Eh… ¿gracias?

Respondió Zoe sonriéndole a Adrián el cual se daba cuenta que no se había dado a entender bien a lo que había querido decir a Zoe “Ella, no quiero dejarla ir” pensó Adrián mientras ponía una manta en los hombros de Zoe y ambos entraban nuevamente al castillo.

-Yo cocinare hoy Adriana sí que prepárate hare algo que me encanta.

- ¿Qué? ¿Estás segura que no prefieres que cocine yo?

-No tu tranquilo yo me encargo tu puedes seguir leyendo ese libro que traías hace rato.

Dijo Zoe mientras comenzaba a revisar lo que tenía para cocinar encontrando así unos huevos y algunas verduras “Oh creo que eso sería perfecto” pensó Zoe alistando todo para comenzar a cocinar, Adrián que la miraba con una sonrisa mientras sostenía el libro que leía en su mano anhelando que los días como esos nunca se acabaran, ver a Zoe cocinando junto a él mientras las risas invadían el castillo, y la calidez de esta convertía aquella soledad en un hogar verdadero, “Un hogar con Zoe” pensó Adrián mirando a esta y recordando cuando esta le decía que lo apoyaría hasta que pudiera volver a su mundo “Ella quiere volver a su mundo ¿Qué hare si lo hace?” se preguntó Adrián bajando la mirada hacia su libro para luego mirar de reojo a Zoe la cual se veía preparando la cena animadamente “No puedo dejarla, si ella se va…prefiero ir con ella antes que no volver a verla” pensó este cuando de la nada un ruido lo saco de sus pensamientos viendo así a Zoe algo sorprendida.

- ¡¿Qué paso?!

-Nada, nada no te preocupes solo se me cayó el cuchillo.

Dijo Zoe agachándose para levantar el cuchillo mientras miraba a Adrián el cual se acercaba para ver que esta estuviera bien.

-Déjame ver tu mano, no quiere que vayas a lastimarte…

Dijo Adrián tomando la mano de Zoe la cual levanto su mirada para ver las largas pestañas de Adrián el cual parecía nervioso revisando que ella estuviera bien “Tiene las pestañas más largas que las mías” se dijo está viendo el cabello rubio largo y sedoso de Adrián caer sobre sus hombros mientras miraba la mano de Zoe, esta levanto la mano que él estaba revisando y toco la mejilla de Adrián viendo los hermosos ojos dorados de este “Es hermoso” pensó Zoe mirando al rostro de este el cual era mucho más alto que ella (Adrián 1,93 – Zoe 1,64) este confundido miro a Zoe la cual había tomado la iniciativa de tocarlo y acercándose un poco más a ella le dio un gentil beso en los labios el cual solo duro unos segundos.

-Zoe yo…

-Está bien, no, no pasa nada eh…tengo lista la cena ve a, ve a sentarte.

Dijo Zoe nerviosa mientras mordía su labio “Aunque duro poco ella me correspondió por un segundo antes de apartarme” pensó Adrián mirando a Zoe nerviosa sirviendo los platos, “Eso, eso fue peligroso, el, él es un hombre y estoy viviendo sola con él en este lugar, no, no puedo hacer algo de lo que me vaya arrepentir, aparte puede que me vaya en algún momento y…” Zoe se detuvo al pensar en eso y saboreo sus labios mordiéndolos un poco y pensando en aquel tierno beso de Adrián, el había sido extremadamente delicado al besarla pero ella prefería no pensar demasiado en eso ya que no sabía cuánto tiempo estaría allí en realidad.

-Vamos a comer Adrián, mañana tenemos que levantarnos temprano.

-Sí, comamos.

Respondió este mientras miraba las mejillas sonrojadas de Zoe la cual seguía tocando sus labios inconscientemente debes en cuando durante la cena. Al terminar este miro a Zoe y sonrió acompañándola hasta el dormitorio donde ella dormiría.

-Bueno espero que descanses bien Zoe.

-Sí, tu igual Adrián buenas noches.

Concluyo Zoe viendo como Adrián se acercaba a ella y le daba un sutil beso en la frente despidiéndose antes de alejarse e ir a su cuarto dejando a Zoe avergonzada “El, él es demasiado seductor eso, eso no es justo” pensó Zoe cerrando la puerta y corriendo hacia su cama “Volveré a mi mundo en algún momento así que no debo de profundizar más esto” se repitió Zoe una y otra vez antes de quedarse dormida recostada en su cuarto. Mientras tanto Adrián leía el libro que había llevado con el dónde podría saber más sobre el corredor infinito, el lugar que había llevado a Zoe con él a ese mundo, “El corredor infinito, la historia esta mesclada, algunos libros dice que es el paso a otros mundos mientras que estos libros de acá dice que es un portal al infierno, pero creo que el libro más completo es el que tengo en la mano, este dice que el corredor infinito es una ruta hacia otros mundos es posible que uno de ellos sea el infierno,  es un sistema de puertas a otras tierras separadas por el espacio y el tiempo…hay pocos portales al corredor están alejados entre sí y existen y dejan de existir con rapidez y lo único que siempre es conocido en estos lugares donde el corredor fue abierto es la gran cantidad de almas humanas sacrificadas, según dice el libro la única manera de abrir el corredor sin un sacrificio humano en masa seria con el poder de la piedra carmesí” Adrián siguió leyendo mientras trataba de entrelazar las cosas y saber cómo asegurarse… {Que Zoe jamás pudiera volver} fue entonces que de la nada durante la noche un fuerte ruido se escuchó en la entrada de la puerta del castillo y este preocupado se levantó tomando su espada y dirigiéndose a toda velocidad al cuarto de Zoe, viendo a está colocándose el vestido para salir.

- ¡Zoe quédate aquí y no salgas por ningún motivo!

Grito Adrián imaginándose el porqué de las hordas de vampiros que estaban atacando el castillo “Ellos vienen por mí, seguramente eran seguidores de mi padre…deben de haberse enterado que fui yo quien le dio fin a la vida de mi padre” pensó Adrián mientras apretaba su espada decidido en defender el castillo y a Zoe que estaba dentro de él “No dejare que la lastimen” pensó Adrián mientras salía de la habitación de Zoe dirigiéndose rápidamente directo a la sala principal por donde estaba  entrados todos los enemigos. Al llegar a la sala pudo ver más de diez vampiros regulares rodeándolo para asesinarlo, Adrián no dudo en blandir su espada matando a cada uno sin permitirles que cruzaran más allá de la escalera para que así no se dirigieran al segundo piso donde se encontraba Zoe “Debo de retenerlos aquí, no puedo dejar que ella salga lastimada” pensaba Adrián mientras mataba uno por uno a cada vampiro que se cruzaba en sus ojos, fue entonces que un fuerte grito se escuchó en el segundo piso el cual venía desde la habitación de Zoe.

- ¡Hay una mujer humana aquí ¿Qué deberíamos hacer con ella?!

- ¡Hagan lo que quieran con ella\, no la necesitamos!

Grito un vampiro mientras los otros caminaban hacia Zoe, está asustada corrió rápidamente hacia el pasillo pero quedo acorralada por cuatro vampiros los cuales sonreían maliciosamente divirtiéndose con la persecución de seguirla, Adrián llego al lugar pero no podía avanzar ya que cinco vampiros de alto nivel lo miraron molesto y dispuestos a atacarlo, Zoe miro a Adrián el cual estaba peleando para llegar con ella y protegerla por lo que esta comenzó a sentirse cada vez más ansiosa y con más y más miedo a lo que podía suceder “Yo no puedo enfrentarme a ellos, Adrián va a salir lastimado si esto sigue así” pensó Zoe al darse cuenta que él estaba más preocupado por ella que por su propia seguridad por lo que Zoe cerró los ojos al sentir la firme mano de uno de los enemigos sujetarla fuertemente por el brazo provocándole un gran corte en esta y dejando caer su sangre en el suelo “Adrián por favor no vengas aquí, si sigues preocupándote por mi saldrás lastimado, si estuvieras solo podrías con ellos fácilmente pero solo estas preocupado de ayudarme” pensó Zoe cuando de la nada un fuerte ruido la envolvió y un aire extenso alejo a los vampiros que la querían lastimar dejando así también a Adrián completamente asombrado, Zoe emanaba una extraña aura roja la cual parecía envolverla mientras un portal con forma de espiral comenzaba a absorberla, Adrián pudo entender de inmediato de lo que se trataba evadiendo a los vampiros frente a él para ir por Zoe pero esta solo lo miro y le sonrió tranquila.

-Todo está bien\, nos veremos de nuevo…mantente a salvo Adrián *Murmuro*

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