Si pudieras viajar en el tiempo, si pudieras cambiar tus errores, ¿tus pecados a qué momento volverías? Gictroan.
El espacio entero, el gran vacío estaba cada vez más cerca del fin, los días descritos por la biblia al fin habían llegado los jinetes cabalgaban, las profecías se cumplían las naciones se destruían, los seres blasfemaban los frutos prohibidos del edén se corrompían y la poca humanidad que quedaba se extinguía...
La naturaleza del fin contemplaba la llegada de un ser superior encarnado en hombre con potestad para arrebatar todos los frutos prohibidos, coronado como rey desde generaciones pasadas el cordero, el primogénito de la creación dirigía el gran ejército que lo cambiaría todo. Como ser mortal ahora en el plano de la existencia debía encargarse personalmente de tomar los frutos prohibidos mientras justos e injustos eran juzgados por sus actos, sin embargo, al igual que el cordero también la serpiente original, la bestia echaba sus cartas sobre el plano mortal al igual que él se materializó completamente en el mundo mortal junto a su ejército, plagas, aberraciones monstruosas en los cielos, el vacío del espacio se corrompía como si de un papel se tratara de él emergían seres indescriptibles, en todo los rincones del basto universo los seres luchaban ferozmente contra su inevitable fin, ángeles, demonios, 144 mil escogidos, 7 semi deidades, 7 voces, seres vivientes nunca antes se había visto tal tribulación.
En un plano dimensional distinto al mortal yacían los pecados capitales y frente a ellos millares de individuos poseedores de al menos 1 fruto prohibido en su interior y por encima de todos los individuos Gictroan, la petición de encontrarse fue escuchada tenía delante de él a los pecados capitales a los frutos prohibidos la tensión y el ambiente en la gran muchedumbre era espantosa se podía sentir la hostilidad de unos a otros a pesar de que este sería la principal condición de su encuentro, todos sabían lo que sucedería si los frutos prohibidos se hacían en un solo ser, las miradas se cruzaban y la tensión aumentada.
De entro los murmullos en la línea de los pecados capitales pereza y avaricia no habían olvidado el trato que ambos habían forjado tiempo atrás, ambos eran conscientes del pacto hecho y su momento al fin había llegado tenían delante de ellos sin embargo iniciar un conflicto desencadenaría un genocidio, aun así este es un pecado que avaricia moría por experimentar, sin cambiar su esencia de manera imperceptibles para todos los presentes avaricia con la velocidad de un rayo desmembró y tomó el poder del fruto de varios de sus semejantes cercanos en el momento que la unión de frutos se hacía todos los seres eran conscientes que esa unión convertía al individuo en mortal para morir y renacer como un Dios evento que ninguno deseaba presenciar.
Como bestias salvajes que se lanzan por su presa salieron a evitar el ascenso de poder de avaricia, algunos decidieron aprovechar el momento para atacar a su semejante y otros simplemente esperaban por los debilitados para así asimilarlos, el caos inundó la dimensión lo que parecía ser un encuentro Pacífico, pero tenso terminó en un gran conflicto que definiría al ser supremo poseedor de todos los frutos.
Gictroan perplejo ante lo que veía sabía que hablar no iba servir de nada los pecados capitales influían sobre las mentes de los demás, el deseo de los frutos prohibidos por unirse llamaba al derramamiento de sangre, posicionado para entrar al campo de batalla pudo visualizar a su hija en problemas, destrozando los rostros con sus manos de los seres que se rodeaban cerca a Evelyn aprecio delante Gictroan, impactada por la presencia de su padre no hizo más que saltar a los brazos de él en lágrimas, el encuentro entre padre e hija después de tanto tiempo se había dado, sin embargo Gictroan sentía algo diferente en su hija esta no era la misma niña que el alguna vez crio la esencia que emanaba de ella no era más que la del pecado de la envidia, de la nada escucho susurrar en su oído una disculpa, sintiendo un deseo hostil empujó lejos a su hija mientras está entre lágrimas miraba a su padre mientras le decía el odio que sentía por él, ella nunca se marchó de casa porque quisiera una aventura se marchó porque siempre estuvo cansada de vivir a la sombra de un ser superior a ella, este deseo tan puro carcomió su interior y convirtió su fruto en el pecado de la envidia dándole un dominio y poder mucho más del que el fruto normal le había dado.
Pará este grado la mente de Gictroan no esperaba más nada que el momento de morir, su creador, sus camaradas científicos, su esposa y ahora su hija, todo lo había perdido solo quedaba algo en su interior su contraparte y hermano no biológico, pero si creado Zero. Reaccionando por el fuerte golpe que le propinó Diana despertó de sus pensamientos y cerrando los ojos devolvió el ataque acabando con la vida de su hija en un instante, el poder del fruto absorbió la esencia total de su hija entrando en un frenesí de locura mientras era atacado por los demás frutos.
Los pecados capitales restantes que no sucumbieron ante la feroz pelea decidieron unir fuerzas y abrir una grieta en la dimensión para volver al plano mortal, al hacerlo fueron transportados a un a un extraño lugar lleno de cadáveres, la gran arca del concejo universal y a lo lejos sobre un gran trono se podía ver a Nuxia y todo el Consejo muerto, así como también a los últimos vigilantes. Impactados no hicieron más que caer de rodilla y suplicar por sus vidas a pesar del gran poder que eran conscientes de tener, pero podían sentir también el que emanaba de Nuxia, los pecados preguntaron cuanto tiempo había transcurrido desde que entraron a la dimensión, la respuesta de Nuxia los dejó atónitos pues habían transcurrido mil años desde que todos los frutos prohibidos desaparecieron y ahora después de tanto tiempo al fin son ellos quienes aparecen delante de ella.
Durante los mil años que transcurrieron el hijo primogénito de la creación tuvo su esperado encuentro con la serpiente original el gran dragón blasfemia de su gran encuentro la mitad del universo ya se encontraba extinguida entre ese encuentro Nuxia se interponía entre ambas miradas desatando su furia trató de enfrentarlos a ambos pero la diferencia de poder fue abismal, Nuxia herida se limitó a solo mirar el choque de estas dos entidades pero pudo observar una leve diferencia en ellos la oscuridad el pecado y la gran maldad que rodeaba el universo alimentaba el poder del ser maligno mientras debilitaba al otro, en un descuido fue herido de gravedad y de rodilla esperaba la muerte a manos del blasfemo con las últimas fuerzas del poder interno de Nuxia salto sobre blasfemo quien al quitar su mirada del primogénito sintió como este aprovecho la oportunidad para atacarlo atravesándolo con sus manos al ambos ser seres mortales morirían en el plano existencial pero revivirían en el espiritual con capacidad de volver por lo que agradecido por el gesto de Nuxia vio en ella un corazón puro y el único con Fe le otorgó a Nuxia la vida eterna pero a cambio el perdió la suya tomó a blasfemia y lo sello junto con su espíritu en un abismo dimensional del que jamás saldrían ambos dejando a Nuxia en el campo totalmente inconsciente pero con vida.
El tiempo transcurrió, los millares de ángeles y demonios sucumbieron en la guerra junto con más de la mitad del universo solo un tercio sobrevivió, los jinetes desaparecieron, las trompetas dejaron de sonar, las calamidades pasaron y los 144 mil desaparecieron así como lo hicieron los frutos prohibidos, Nuxia al despertar de un largo letargo se encontró en un ambiente completamente distinto no se escuchaban estruendos, no se escuchaban calamidades no se veían espectros ni seres extraños, sólo podía visualizar como descendía el arca del consejo universal y encima de ella todo el cuerpo dirigentes convertidos en deidades, esto lleno de dudas a Nuxia quien al mirarlos se dio cuenta de sus intenciones hostiles hacia ella, por medio del poder conseguido pudo adentrarse en las mentes de ellos y ver quiénes eran realmente, el consejo fue una organización planeada para interferir en la Ascensión de los frutos sin embargo estos se corrompieron al grado de optar por la Ascensión para ellos mismos por lo que llenando de falsas promesas y régimen lavaron el cerebro del universo entero para cumplir su propósito final erradicar a todos los seres y una vez ascendido como divinidades recrearían nuevamente todo.
Al abrir los ojos Nuxia miró a los pecados capitales delante de ella quienes pudieron observar todo lo sucedido en el tiempo mediante el recuerdo de Nuxia en sólo un pestañear. El cordero y la bestia no son más ambos fueron sellados, ni ángeles ni demonios ni entidades indescriptibles están ya, Nuxia se proclamó como el mesías que acabó con todo y esperaba por el regreso de los últimos frutos prohibidos quienes ahora tenía delante de ella, sin esperar una respuesta a lo que vieron los frutos prohibidos antes de que pudieran levantarse fueron cegados para siempre por la mano de Nuxia.
Nuxia extenuada por su larga espera sin comer sin dormir al fin había terminado con todo o eso creyó ella retirándose su armadura totalmente desgastada cayendo de rodilla sobre el suelo cerró los ojos por un tiempo corto y pudo visualizar en su mente dos individuos con un gran poder aún, Zero y Gictroan aún seguían con vida por una parte Nuxia tenía el poder del primogénito haciéndola inmortal, por otro lado Zero había ascendido a una entidad blasfema pero abandonado su inmortalidad y Gictroan con el poder del omega y la Ascensión casi que total del Dios era cuestión de tiempo para que estos seres se toparan.
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