Archie es el único heredero de un magnate, tiene 27 años y un físico increíble logrando atraer a todas las mujeres que desea, para él no hay nada imposible, puede comprar y obtener todo lo que quiere, no tiene impedimentos aparentemente, pero se verá forzado a casarse si quiere mantener su estilo de vida, ya que son las ordenes de su padre quien ya escogió a su futura esposa.
El destino preparará una sorpresa para Archie, ya que ni su dinero y posición social podrá comprar el amor de Ayla tendrá que ganar su corazón de apoco si quiere triunfar en este juego, si quiere mantenerla a su lado.
¿Podrán confiar? ¿El amor será suficiente para mantenerlos juntos? ¿Las adversidades destruirán su relación? Son preguntas que se responderán a lo largo de la historia.
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Enfermedad
En cuanto llega el medico lo revisa y les informa que es una gripe común, con descanso y tomando los medicamentos mejoraría pronto.
- Dame el número de la muchacha que quieres que te ayude, que te cuide tú sabes … espera dame tu celular no quiero que me llamen a mí para chantajearme.
- No quiero que llamas a nadie, voy a estar bien – se pone de pie.
- ¿A dónde vas?
- Al despacho tengo algunos pendientes.
- Si, la pregunta estuvo demás, escuchaste lo que dijo el médico … Necesitas reposo –
toma su mano -, vas a quedarte aquí, te acostaras y traeré un té para que te sientas mejor, no te estoy preguntando si quieres lo harás de inmediato.
Archie no dijo nada, se fue a la cama sin quejarse, estaba cansado no solo por estar enfermo, había sido un mes complicado con mucho trabajo, además que Idara no dejaba de
perseguirlo, yendo a la empresa, encontrándolo en cualquier restaurante que estaba, aunque varias veces hablo con ella para que lo dejara en paz nada tenía efecto. Así que en cuando Ayla regreso con las medicinas y lo encontró
dormido, lo despertó y se quedó a su lado poniéndole paños para bajar la fiebre, esa
noche ella no se separó de él y durmió muy poco, a la mañana siguiente Archie se sorprendió al verla dormida a su lado parecía estar muy cansada, se sentía mejor, pero no lo suficiente como para querer levantarse, la cubrió y se acostó a su lado, lo que no sabía era que sus padres ya estaban ahí, al ver que no
bajaban a recibirlos Amira subió a la habitación, Basil subió atrás para tratar
de detenerla sin ningún éxito, ella comenzó abrir las puertas de distintas habitaciones hasta que los encontró y llamo a su esposo para que viera la escena.
- Ves, te dije que era la muchacha correcta, no cualquiera dominaría a nuestro hijo – Amira comienza a cerrar despacio la puerta.
- Dominar no, nadie domina a los Harrison, lo que pasa es que ya se conocían un poco, solo había que darles un empujón.
- Así que no te domino – Amira lo ve de forma seria.
- No quise decir eso, tu entiendes a lo que me refería – menciona nervioso.
- Me parece que deseas dormir en una habitación diferente
En ese momento son interrumpidos por los gritos de Idara, Amira y Basil son los primeros en bajar, provoca que Ayla y Archie se despierten.
- Espera ¿Cómo te sientes? – Ayla pone su mano en la frente de él.
- Cansado, pero creo que hay un escándalo que no nos dejara en paz ¿Qué hora es?
- Déjame ver – toma su celular -, son las 8:30 tus padres ya deben estar aquí o llegando
y la que grita es Idara voy a ver qué pasa, baja con cuidado porque estoy segura que no me busca a mí.
- ¿Cómo sabes que es Idara?
- Toda una vida a su lado llena de gritos y escándalos te acostumbras, abrígate bien.
Ayla baja de inmediato y ve a sus suegros discutiendo con Idara.
- Llama Archie de inmediato – menciona Basil enojado.
- Buenos días, enseguida baja ¿Qué pasa? – Ayla
- Querida – Amira se acerca Ayla -, tienes que ser fuerte porque aquí va existir un gran
problema.
Archie baja y todos lo observan.
- Eres un idiota – Basil se acerca a él y le da una cacheta provocando que caída en el
piso -. ¿Cómo puedes hacer esto?
- ¿Qué pasa? – menciona Ayla mientras intenta ayudar Archie, pero Amira la detiene.
- Espera – susurra Amira -, no te metas, después vas a quererlo pegar tú.
- Pasa que mi hijo es un estúpido, mira a tu esposa, mírala bien porque será la última
vez que la veas.
Ayla no entiende lo que pasa, ni porque Basil se encuentra en ese estado, prefiere mantenerse
callada, sabe que cualquier palabra puede ser usada en su contra y afectar a su familia.
- No, él no es el estúpido – dice Idara con un tono de burla-, los estúpidos fueron ustedes que no supieron elegir a una verdadera mujer para su hijo.
Basil regresa a ella y le da una cachetada rompiendo su labio y haciendo que caiga sobre un sillón.
- Detente – Amira toma de la mano a Basil – ya nos encargaremos de ella, solo que no es
la forma.
- Yo elegí a una verdadera mujer para mi hijo, tú eres una put… una zorr… ni si quieras le llegas a los talones a una prostituta, ellas tienen más decencia que tú, te aseguro que tienen más valores, que son más mujeres.
En el momento que Basil y Amira se distrajeron Ayla ayudo Archie a sentarse, enseguida Basil la vio impidió que hiciera algo más.
- Hija no lo topes más – aleja Ayla de Archie -, no merece ni que lo mires, ve alista tus cosas solo lo básico, Amira te ayudara a comprar todo lo que necesites.
- Con permiso – Ayla.
Ayla se retira sin entender que pasa, va por sus cosas que no eran muchas en esa casa tenía solo lo básico o al menos eso pensaba, al entrar a su habitación descubre que tiene
algunos vestidos, trajes, calentadores que nunca compro, no sabía porque había
tanta ropa que nunca vio.
Ayla_ puede ser que esta se haya convertido en la habitación de las amantes de Archie, pero la ropa sigue con etiqueta y se ve que es cara, podrían ser regalos de Amira, pero como
no estaba aquí y él no sabía a donde enviarlas las puso aquí, mejor me apuro sino la cachetada que sigue va hacer para mí, no entiendo lo que pasa, pero es mejor seguir las órdenes del señor Brasil, no puedo arriesgar a mi familia.
...
