PROBLEMAS INESPERADOS, SECRETOS DESTAPADOS

Regresé al patio principal, alegando que me había lastimado y fui a sentarme en una jardinera, en la cual me puse a hojear el cuadernillo. Como me lo imaginaba ahí estaban dibujos nuevos, ahora había también de mí en educación física. Esos dibujos dejaban percibir a una niña buena y linda, jajaja

Por sus dibujos me podía imaginar la decepción que le había causado, pero por otro lado no podía creer que no hubiera escuchado lo que se decía de mí, y cabe aclarar que gran parte de lo que decían no era mentira, él se quiso acercar yo no lo obligue él se planteó una idea equivocada de mí, no le habría molestado tanto si hubiese hecho caso a los rumores.

Pero ahora yo tenía un problema, no quería que se alejara de mí, anhelaba que me siguiera buscando, necesitaba devolverle aquel cuadernillo. 

Llego el receso y creí que ahí lo iba a encontrar, pero no fue así parece que se lo había tragado la tierra, no estaba por ningún lugar en los que habitualmente se encontraba. Enserio necesitaba verlo hablar con él, la verdad no sé qué le quería decir o como me podría justificar, pero enserio necesita escuchar su voz despreocupada y socarrona. No aquella voz dura áspera y acusadora con la que me hablo 1 hora antes, pero no, de Ramiro ni sus luces.

Para este momento creo que fui más que obvia de que buscaba a alguien ya que Nikky que regularmente era muy distraída lo noto y no demoro mucho en hacer la pregunta de rigor.

¿A quién buscas?

A nadie

No me hagas tonta somos amigas y en este tiempo que llevo conociéndote sé que tu no prestas atención a tu entorno, en cambio hoy pareces suricato y aparte nos has hecho recorrer toda la escuela, siendo que tú eres de las que les gusta quedarse sentada en un solo sitio.

Ya Nikky déjala, tu misma estas diciendo que es retraída, porque forzarla si sabemos que cuando esté lista ella sola nos va a contar que paso - salió en mi defensa Issa que a diferencia de Nikky era mucho más discreta y no me presionaba para hablar.

Bueno tiene razón Nikky son mis amigas y pues bueno el problema está en que Ramiro me vio en medio de un beso medio subido de tono con Diego.

Ese es uno de tus fajes ocasionales, ¿no? - me interrumpió Nikky.

Si 

¿Ok, ya te vio y qué problema hay en eso? Que yo sepa tú no tienes novio y nunca te ha importado lo que las de más personas piensen de ti, por otro lado hasta donde tengo entendido este tal Ramiro no es gran amigo de Samantha(la novia de Diego), así que, qué problema hay?-comento Issa un poco confusa. 

En ese momento les conté la historia de principio a fin, al terminar de contarla las dos tenían una cara de sorpresa, pero ninguna de las dos hablaba, me entraron los nervios no sé si alguna me pensaba dar su opinión y en ese momento la necesitaba a montones.

Pues mira Espe, creo que ahora si la regaste, no estoy muy segura pero al parecer este tal Ramiro aunque es una sorpresa tiene más que simple curiosidad por ti y pues bueno no vio una escena bastante bonita si lo que el planeaba es tenerte como novia en un futuro, ponte en su lugar- me dijo Issa tomando la iniciativa.

Si, lo sé. Bueno la verdad no, miren chicas me cuesta un poco de trabajo creer que uno de los chicos más guapos de la escuela se haya fijado en mi de otra forma que no fuera para jugar, es más yo lo había puesto en mi lista de los inalcanzables pero ahora pasa esto y bueno, en la mañana me había decidido alejarme de el por qué es peligroso para mi emocionalmente. Y ahora véanme me muero por encontrarlo y darle una explicación. Pero no tengo ni la menor idea de que le puedo decir, que nunca escucho lo que se decía de mí?

No pues si está difícil, pero si en verdad le interesas te va a buscar nuevamente cuando se le baje el coraje y el impacto, dale tiempo -fue la respuesta que recibí de Nikky, que por primera vez no tuvo más preguntas ni nada por el estilo.

Decidí hacer caso a lo que me había dicho Nikky, y me fui a mi casa sin verlo nuevamente.

Mi fin de semana no fue para nada como siempre, ir a trabajar de meserita en el restaurant de uno de mis tíos se había convertido en mi rutina, ahí solo trabajaba sábados y domingos ya que entre semana no me daba tiempo, servir mesas, atender clientes al cobrar, pasar pedidos a los chefs, y fungir de encargada cuando mi hermoso y lindo tío andaba de caliente con las meseras en el almacén de alimentos, esas eran mis funciones básicas y prácticamente nunca había problemas. Así que era  un ingreso de dinero fácil que realmente no necesitaba, económicamente no vivíamos mal se podría decir que éramos de clase media alta. Pero por lo que le pedí el trabajo a mi tío fue para escapar del infierno en que se convertía  mi casa cuando estábamos todos en ella.

Pero esa tarde  de domingo al parecer no sería tan tranquila, por lo menos para mí, saliendo de ir a ver por qué tardaban tanto los chefs en sacar las órdenes, me percate que la chica en turno para el almacén en esta ocasión era la anfitriona, así que como siempre que mi tío descompletaba el personal yo tomaba su lugar.

Paso más menos una hora y todo fluía sin mayores percances a lo mejor si un poco de demora al momento de servir las mesas, pero nada más. Ese día teníamos casa llena y gente en espera.

De repente escuche a un cliente molesto que le gritaba a otra de las chicas que también es mesera, creo que se llamaba Cynthia.

Pero es que no sabes que es a término ¾? Está casi crudo y aparte esta frio. Para esta porquería me hicieron esperar tanto?-gritoneaba el señor.

Disculpe señor, yo no la preparo, lo preparan chefs y son estudiados. Así que si ellos dicen que es al término que usted lo pidió yo les creo y su… -intento defender Cynthia, pero el tipo prepotente no paraba de gritar.

 Así que aun a mi corta edad que no aparentaba y a vista que mi tío no estaba por ningún lado decidí intervenir con la lista de comensales en la mano.

Buenas tardes, dígame que problema tiene?

Y tú quién eres otra meserita? Si alguien tiene que resolver mis problemas con ustedes ese debe de ser el dueño no crees? Así que tráeme al dueño ahora contigo no necesito hablar.

Mire de antemano le ofrezco una disculpa, el dueño por el momento no se encuentra, pero yo soy la encargada en estos casos, así que por favor dígame en que le puedo ayudar?

A mi tu no me puedes ayudar en nada-vocifero al mismo tiempo que estampaba el plato con su comida sobre mi pecho, cabe mencionar que la comida no estaba para nada fría- quiero al estúpido dueño de este lugar no a una chamaquita que ni mayor de edad ha de ser.

Para ese entonces yo quería ponerme a la par de ese tipo y gritonearle pero si algo había aprendido de mi tío es que a todos se les da cachetada con guante blanco y hablarles con educación.

Mire señor usted ya está excediendo los limites, yo le estoy hablando con mucha educación y usted ya llego a la agresión, eso no se le puede permitir así que le voy a pedir de manera atenta que se retire de este establecimiento o llamare a seguridad para que lo acompañen a la salida.

A mí ni tú ni nadie me saca de aquí hasta que hable con el dueño -eso lo dijo sosteniéndome de los brazos, eso era más doloroso que el ardor que sentía en el pecho por la comida caliente recién derramada.

Por favor suélteme me está lastimando.

Que no hasta que me…

Papá que haces? Vámonos -escuche decir a mis espaldas, no necesitaba voltear para saber a quién pertenecía esa voz- deja a la seño…Esperanza que haces aquí?- dijo esto mientras me apartaba del agarre furibundo de su padre. 

Ya veo que no me equivocaba esta escuincla no es ni mayor de edad. Y así querías resolver mis problemas?

Si señor no quería resolver sus problemas sé que podía hacerlo, no llevo 2 días aquí llevo algunos años, este lugar es de mi tío y desde que puedo ayudar con cosas pequeñas empecé a venir, eso dio pie que hoy en día él tenga la confianza de dejarme a cargo. Y si no es mucho pedir, por favor Ramiro llévate a este señor. -del mismo coraje no me di cuenta que estaba llorando por los dolores que me aquejaban hasta que él sugirió checarme

Pero estas bien? vamos a un hospital a que te chequen.

Si vamos a un hospital ahorita en estas condiciones- dije señalándome el moretón que se me empezaba a hacer en cada brazo- encarcelan a tu papá por la agresión. Mejor sácalo de aquí antes de que venga mi tío, él no va a dudar en mandarlo a dormir en una celda o peor.

Pero Espe…

Que te lo lleves dije. Ya!

Sin más palabras Ramiro forcejeo para llevarse a su padre del lugar y yo me fui a los vestidores a checarme. Menos mal por ser un lugar que maneja alimentos calientes y lumbres teníamos pomadas para quemaduras.

Al quitarme la camisola del uniforme descubrí una gran mancha roja que abarcaba la mitad de mis pechos el centro de mi tórax y el principio de mi abdomen. 

Por lo que había leído anteriormente en un libro de primeros auxilios podía concluir que se trataba de una quemadura de primer grado así que opte por tomar las medidas que recordaba, agua fría para limpiar solamente y posterior aplique la pomada. 

Para ese momento yo ya contaba con dos muy moradas pulseras en los brazos, me veía pálida aun con todo y el escaso maquillaje que me aplicaba los días de trabajo.

Entro mi tío como un bólido al vestidor justo al tiempo que me abrochaba el pantalón.

Que paso? Escuche que un comensal dio problemas, pero que ahora hasta hubo agresiones. Estas bien?

Si tío estoy bien- pero no me creyó ya que con la blusa que llevaba no se alcanzaban a cubrir bien los moretones.

Como vas a estar bien Esperanza que es esto?-pregunto sosteniendo mi brazo- sabes que en casos así se tiene que llamar a seguridad y posteriormente a la policía, porque no lo hiciste?

Si lo iba a hacer pero tío ese señor es papá de un compañero de la escuela, él se lo llevo sin más relajo no pasó nada, los moretones en unos días se me quitan.

Y la quemada? Porque también me dijeron lo que hizo con la comida.

Según lo que he leído es una quemadura de primer grado no pasara a mayores ya la trate como debe de ser. Solo hoy deme el día si tío?

Está bien hija pero para la otra no dudes en llamar a la policía o por lo menos a los de seguridad.

No lo olvidare se lo prometo.

Ya con el permiso y todo me fui a mi casita, sin la paga del día, y bastante agotada. Lo malo fue que apenas iban a dar las 6 de la tarde, lo que significaba que tenía demasiado tiempo libre para pensar en cierto chavo de ojos verdes, al que tenía miedo de perder, pero, como voy a perder algo que no es mío? Y en su padre que al parecer tenía problemas de temperamento, a lo mejor eso era en gran parte la causa de esa mirada llena de dolor que tenía Ramiro.

Las horas pasaban muy lentamente no veía para cuando pensaba terminar el domingo, necesitaba verlo, anhelaba saber si aún me pensaba hablar, quería saber que honda con su padre  sí, siempre es así de agresivo o por lo menos si dará por terminado el juego del gato y el ratón. Si ya se dio cuenta que no soy la niña buena que él creía.

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