–¿Nos podemos ir amada mía?–asiento un poco nerviosa, no sé para dónde me va a llevar este hijo de perra.
Él me ayudó a bajar por las escaleras ya que mis torpes pies no sabían caminar con estos tacones. Se veía ridículo Yusuf mientras me ayudaba.y muy chistoso recordar su cara cuando decía: ¡Cuidado amor! ¡Para qué te pones estos tacones tan altos!.
Todos los empleados nos miraban orgullosos, como si fuéramos un par de recién casados. Y no faltó uno que otro comentario como por ejemplo.
«Yusuf ella es mucha mujer para ti» dicho por Martin, y si es verdad soy mucho para ese monstruo que no tiene modales.
Dentro del coche solo había un silencio incómodo.
Miraba de reojo a mi secuestrador, por su parte el conducía sin siquiera mirarme, de repente sentí como mi corazón vibró, ¿porque no se? Pero si había sentido está sensación cuando estuve enamorada de mi vecino, no será que…¿Me está empezando a gustar este bastardo?. ¡No! Eso jamás.
–Llegamos, mi vida–avisa. Sus ojos me miran por unos segundos y nuevamente vuelven al timón de su auto.
–¿Qué significa esto?–pregunté incómoda, ya que habíamos llegado a un strip-club.
–No te preocupes, es solo una reunión–aclara.
Yusuf se bajó del auto, yo esperaba que me abriera la puerta, como un caballero de la noche, pero no… sacó su teléfono e hizo una llamada. No podía escuchar ya que las ventanas del auto evitaban filtrar algún sonido.
Tome la delantera y baje por mi cuenta.
El colgó la llamada en cuanto vio que yo salí del auto.
–Lo siento cariño, estaba atendiendo una llamada importante–guardó su teléfono y me sonrío.
Asentí, a nuestro alrededor estaban los hombres de Yusuf todos con arma en mano. No tengo opción de escapar con esta manada de gorilas.
Yusuf se volteó dándome la espalda y caminó hacia la entrada del club. lo seguí, quería ir a su paso pero él me detuvo con su mano puesta en mi pecho.
–Quiero que estés a díez pasos detrás de mí–su voz era más oscura y eso me generó preocupación. no le dije nada, solo asentí.
Todos saludan a Yusuf e incluso las stripper le dan besos en la mejilla. por la manera en que lo admiran es como si se tratara de una figura pública.
Voy a dos metros detrás de él. creo, en esos momentos él solo caminaba sin darme importancia, eso sí, estaba muy confiado ya que sus hombres me vigilaban.
Parece que en su zona de negocios es muy serio. Yusuf entró a un cuarto V.I.P, el guardia que vigilaba la puerta me miró extrañado y me negó el paso. pensé que los hombres de Yusuf iban a decir algo al respecto pero no. Se quedaron callados. Por lo tanto me quedé plasmada como un árbol afuera.
–¿Quién es ustedes? Muéstreme su invitación–me estrecha su mano.
–Mire déjeme entrar, yo soy…–me quedé helada, mi voz se fue en el instante en que imaginé yo diciendo que era la "esposa de Yusuf"
–Señora No puede entrar, está es una habitación privada–saca su arma. Mis labios se tornaron a blanco, este hombre va en serio. ¿No sé por qué tiene que ser tan violento?. Los hombres de Yusuf al ver el movimiento del hombre, no dudaron en apuntar a su cabeza.
–Amigos, solo cumplo órdenes del alemán–dijo el guardia con temor en sus palabras. Claro, él era uno contra los cinco hombres de Yusuf.
–¿Entonces me vas a dejar aquí parada, estúpido?–le digo, es una gallina mira nada más está asustado. Reí.
–Que sea la primera y última vez, que usted le apunta a la esposa del señor Yusuf–dice uno de sus hombres.
–Señora discúlpeme, por favor, no sabía que usted–pausa sus palabras, debido al llamado de Yusuf quien se asoma a la puerta.
–¡Ey! Jerónimo déjala entrar–tras decir eso nuevamente entró a la habitación, el guardia asiente y me deja entrar, no sin antes de que uno de los hombres de Yusuf le susurra. «Eres hombre muerto».
Entre a la habitación privada y veo a Yusuf de pie charlando con otro hombre, de piel blanca como la leche y sus ojos azules como el cielo. Tiene más o menos algunos cuarenta años, también habían varias bailarinas semidesnudas bailando enfrente de ellos.
No di ni un paso más, estaba muy incómoda, Yusuf ni siquiera volteó su cara para ver si yo estaba bien o no. Y eso me hizo sentir mal.
La gota que rebozo la copa fue cuando una de las stripper se acercó a él y acaricio sus muslos, mientras que el solo sonreía como tonto.
Bueno quién soy yo para decirle que no lo toque, ese es su problema, a mi lo que no me gusta es que me traiga a un club y luego me deje abandonada con sus malditos escoltas.
La mujer pasó sus manos por los codos del desgraciado de Yusuf y luego dejó un beso en su cuello, mis ojos se agrandaron después de ver cómo él agarró con firmeza el trasero de aquella mujer.
Uno de los hombres de Yusuf se acercó hasta donde estaba él y le susurro algo al oído. Ese algo hizo que Yusuf volteara de inmediato hacia mi.
Quitó sus manos de ese apestoso trasero y con un puñado de dinero hizo que la mujer se alejara con una sonrisa en sus labios.
Volteó su cuello hacia mi nuevamente y con su dedo índice me hizo seña para que me acercara.
Camine hasta donde estaba él. Nuestro alrededor estaba lleno de luces, música y mucho pero mucho licor, el sofá era dorado tanto así que iluminaba. El hombre de piel clara como la leche se tiró al sofá de golpe y con sus brazos abiertos hizo que tres de las mujeres se sentarán a su lado.
–¿Con miedo?–musitó, sus labios tenían una sonrisa y eso me provocó rabia, Tenía ganas de romperle una botella encima.
Él llevó su mano hasta mi mejilla y la acarició.
–No me toques–quite su mano de mi mejilla, me dió asco ya que minutos antes esas mismas manos tocaban el trasero de otra mujer y no cualquier mujer.
–¿Qué te pasa cariño?–en su hermoso rostro había una gran tristeza, quizá eso fue lo que provocó mi rechazo hacia él.
–Solo quiero irme de aquí, por favor.
–Si mi amor, pronto nos iremos, solo estate tranquila–afirma.
–Por cierto déjame presentarte a un colega, es alemán–entonces este es el tipo alemán del que hablaba el guardia, me tomó de la mano y me llevó hasta donde estaba el tipo. Aclaró su garganta y exclamó orgulloso.
–Armin, das ist meine Frau (Armin, te presento a mi esposa–el tipo elevó su rostro para poder mirarme y sonrió dejando ver sus dientes los cuales eran de oro. Waw me imagino el dineral que tiene esa dentadura.
–Das ist also die Frau, die Sie verrückt macht? (¿Entonces está es la mujer que te trae loco?–Yusuf asintió. No sé de qué carajos hablan, lo que sí sé es que el condenado de Yusuf habla el idioma a la perfección. El hombre se pone de pie y camina hasta nosotros, su mirada es perpleja. Tal parece que está impresionado.
El hombre me saluda estrechando su mano, mire a Yusuf y le hice seña de que no quería tomar su mano, él asintió una y otra vez, y me pellizco por la espalda, mientras me miraba enojado, en el fondo no quería tomar la mano de ese estruendo hombre pero al final lo hice.
Su mano era callosa y muy tibia, su sonrisa se veía tan brillante que me dió mareo.
Él soltó mi mano, pero yo aún sentía mareo, debió ser porque no he probado ni un bocado. Ahora que recuerdo no he comido nada.
Quisiera saber de qué hablan estos dos, pero mi coeficiente intelectual no es tan maravilloso como para saber de qué hablan.
–Yusuf, deine Frau ist sehr schön ( Yusuf está muy hermosa tu esposa)–Dijo el hombre. El rostro de Yusuf se vio afectado por ese comentario ya que rodeo mi cintura con su brazo, no sé qué le habrá dicho, pero siento que Yusuf está tocándome de más. Cómo quién dice, esto es mío.
–Themawechsel, die Ware kommt morgen.(Cambiando el tema, mañana llega la mercancía)–Respondió Yusuf. Su tono era de mal gusto. No sé que habrá dicho el tipo como para hacer enojar a este estúpido.
De momento el mareo que tenía hace poco aumentó más, a tal punto de hacer que mi frente se mojara de calor, y mi boca se secara. Me siento mal.
Interrumpí la conversación luego de sostenerme de los brazos de Yusuf.
–Mi amor, ¿Qué tienes?–me sostuvo con fuerza, su cálida voz, hizo que por un momento me sintiera aliviada pero no…el mareo siguió, mi mente daba vueltas y vueltas, si sigo así voy a caer–¿Cariño dime qué te pasa?–volvió a preguntar, él estaba muy preocupado por mi, tanto así que me cargó dentro de sus brazos y me sentó en el sofá.
No podía hablar, las palabras se congelaron. Cerré mis ojos con fuerza esperando que todo pasara.
–Tranquila amor, ya nos vamos–sus manos limpiaban mi frente. Su perfume tocaba mi olfato, es delicioso el aroma que emana su traje.
Abrí mis ojos poco a poco y ví su dulce sonrisa, tan perfecta y bella como un arcoiris, es…es hermoso.
–Emily, ¿Te encuentras bien?–asentí intentando levantarme de aquel sofá, pero él me detuvo–No mi amor, reposa tu cuerpo, ya en unos minutos nos iremos ¿Si?.
–Está bien.
–En cuanto lleguemos le pediré a Rubén que te haga una valoración, enserio me tienes preocupado.
–No es necesario, estoy bien.
–Emily, por dios, no me lleves la contraria, tú no estás bien–hace una pausa como si estuviera pensando–ahora que recuerdo, tú no has comido nada ¿Verdad?.
Al parecer está muy pendiente de mi, ni mi madre se preocupaba así. Me deja con la boca abierta.
–No, no he comido–masculló.
–¿Sara no te dió de comer?–asenti.
–Sí, pero yo no quise.
–¡¿Si ves, ves lo que pasa!?–farfulla. está enojado porque no he comido. Que patético.
–No me grites. Si sigues así no voy a comer–ahora entiendo, si no como él se pondrá mal. Entonces eso haré. Prefiero morir de hambre, que morir de un balazo.
–¿Qué dijiste?–me toma por el brazo.
–No voy a comer. Y punto–respondí enojada. él tomó un suspiro para tratar de tranquilizarse.
–Emily, tienes que comer–toma mi mano con ternura–si no comes, me pondré triste.
Dios mío, él tiene el rostro como un bebé, es tan lindo y delicado, pero…¿puede el ser tan malo? ¿pudo él haber matado a tanta gente? ¿puede él estar enamorado de mí como dice ser?… Son tantas preguntas sin respuestas, lo que sí estoy sintiendo es un extraño sentimiento hacia él
Eché la cabeza para atrás, me sentía presionada.
–Necesito ir al baño-aviso. me puse de pie y salí del club, lo más extraño fue que él no me detuvo, pero si uno de sus hombres en cuanto salí de la habitación privada, me preguntó para dónde iba, yo no respondí a su pregunta ya que me pase de largo, pero era obvio que no me dejarían ir tan fácilmente. Se fueron detrás de mí como chicles pegajosos.
–¡Déjenme en paz! ¡¿Acaso no puedo tener privacidad?!–voceo. Estaba enojada, estos estúpidos no me dejan ni un minuto a solas.
Entré al baño a regañadientes y humedecí una toalla de papel que había tomado antes de cerrarle la puerta en la cara a la manada de imbéciles esos. puse aquella toalla en mi cuello y frente Para refrescarme
Tengo tanta sed, necesito un vaso de agua bien fría, para bajar los niveles de estrés.
Salí del baño con el humor hecho un martirio después de volver a ver los rostros de esos babosos, pensé que se habían ido, el día menos pensado me tocará bañarme y dormir con ellos, no me los aguanto.
Fui a la cantina, pedí mi vaso con agua y lo tomé de golpe.
Justo a mi lado se sentó una mujer muy bella de cabello castaño y ojos claros, su piel morena y su cuerpo delineado la hacen ver sexi, por su vestimenta me imagino que trabaja aquí, le pide al cantinero que le dé un tequila.
Jamás pensé intercambiar palabras con ella pero su pronto comentario me dejó extrañada.
–¿Tu que hacías detrás de Yusuf?–pregunta con un tono petulante y bebió de un sorbo su tequila.
No sé qué le pasa a esta mujer, me mira muy mal, no sé pero algo me dice que a ella le gusta el maldito de Yusuf, lo digo por la forma en cómo me reclamo.
–¡RESPONDE!–gruñe y tira el vasito del tequila al piso.
Emily por favor no vayas a coger rabia con esta engreída, respira profundo e ignorara (voz de conciencia) trate de ignorarla pero ella siguió hasta que me encontró.
–¡Oye! ¡Estúpida es contigo!–tomó con sus manos una gran cantidad de mi cabello y jalo de este. Mi cuerpo se inclinó debido al fuerte jalón que me proporcionó.
Coloco mis manos en la mesa del bar Para no caer al piso, logré estabilizarme y llevar una de mis manos hacia el rostro de esa mujer y de un rasguño hice que ella soltará mi cabello.
–Te voy a reventar, lo juro–vocifere. Tenía tantas ganas de matarla, de arrancar uno a uno sus cabellos, me levanté del asiento en el que estaba y la tomé por los pelos, ella cayó al piso junto con la silla en la cual estaba sentada, creo que el golpe que se dio contra el piso fue más fuerte que el jalón de pelos que le dí.
Estaba apunto de darle una buena golpiza cuando escuche la voz de Martin.
–¡Ya basta!–se encamino hacia mi, y me tomó por la mano–¿Que haces?.
–Ella me provocó–señaló a la chica que estaba tendida en el piso mientras sobaba su cabeza.
Martin abrió sus ojos como plato luego de ver a la chica. Trago grueso y soltó mi mano para ayudar a levantar a la chica.
–Gracias mi vida–Dijo ella medio sonriendo, y todavía sonríes luego del golpe que recibiste, que irónica.
Gracias a Dios las personas que estaban en el club no pusieron la más mínima atención en la pelea que habíamos plasmado, me imagino que este es el pan de cada día en este club.
–Cariño esa asquerosa mujer me golpeó muy fuerte, mira–le indica dónde le duele–él le pone mucha atención a lo que ella dice, parece que a Martin lo trae loco esta chica–¿No sé de dónde salió? es una fiera.
Miré a los hombres de Yusuf quienes estaban como postes mirando la escena, no fueron capaces de hacer algo, no se ni para que los contrató Yusuf.
Martin le susurra algo en la oreja a la chica y ella sonríe mientras me mira de arriba hacia abajo.
Miré a Martin muy molesta y me dirigí hacia la habitación privada donde estaba Yusuf. Sus hombres se quedaron afuera esperando.
Que loco todo lo que acaba de suceder, esa mujer me atacó primero, lastima que llegó Martín o de lo contrario estuviera en coma.
En la habitación no estaba Yusuf solo estaba el hombre llamado Armin, creo. Las stripper también se habían ido.
Él alemán ordenó que cerrarán las puertas, ya que al hablar algo en su idioma sus hombres hicieron caso.
Hay algo extraño aquí, ¿porque las puertas se están cerrando?, ¿Porque este tipo me mira así? Con lujuria en sus ojos.
Mi piel se pone de gallina y el tipo se acerca paso por paso hacia mi
Espero te haya gustado...
__No Te pierdas el próximo cap, Gracias
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Updated 98 Episodes
Comments
Gledys Hernandez
/NosePick//NosePick//NosePick/.
2024-03-03
0
María Antonia Ramírez Torres
asquito da
2023-08-08
1
María Antonia Ramírez Torres
yo le.contesto que mejor a kilómetros
2023-08-08
0