5. Un nuevo plan, un nuevo encuentro

...MAUDE:...

Tuve que escapar rápidamente cuando el noble que golpeé y dejé inconsciente, salió de la habitación gritando que una cortesana lo había agredido, alcancé a agarrar mis pertenencias y salté por una ventana.

Como ya era de noche, nadie notó que tenía esas prendas, me metí en un callejón y me cambié rápidamente, luego me dirigí a la parte más pobre de la capital, corriendo entre las sombras y saltando muros.

Me encontré con Roquer en un callejón, salió de las sombras y me detuve en seco.

— ¡No vuelvas a enviarme a ese maldito lugar! — Grité, lanzándole un puñetazo, lo esquivó y me tomó del brazo.

— ¿Qué rayos te pasa? ¡Cálmate!

— ¿Cómo quieres qué me calme? ¡Hice el ridículo, fue lo peor que he hecho, esos asquerosos nobles no dejaban de comerme con la mirada y tuve que golpear en las pelotas a un infeliz en una de las habitaciones!

Me soltó bruscamente y retrocedí.

— Espero que no hayas arruinado esta oportunidad — Dijo, era increíble que me dijera eso, que ni siquiera me preguntara si me tocaron.

— ¿Arruinado? ¿Qué rayos estabas pensado al enviarme a ese sitio? Jamás lograría acercarme a ese duque, por cierto, me confundí de persona al principio, por no saber la apariencia del infeliz — Gruñí, pateando un bote de basura, una rata salió disparada.

Mi hermano resopló — Te dije que debías actuar con cuidado, no que cometieras tales torpezas.

— ¿Torpezas? ¿Por qué no vas tú a ese maldito club? Usas un calzón y les bailas a esos cerdos, es increíble la falta de consideración que tienes hacia mí, solo te importa tú tonta misión — Gruñí, lanzándole una piedra que recogí de la calle y volvió a esquivar.

— ¡Cálmate, Maude, no estoy diciendo que no me preocupe, pero nuestro futuro depende del éxito de nuestro plan! — Se aproximó y me tomó de los hombros, me sacudí y lo volvió a hacer — Maude, tu futuro depende de esto ¿Quieres arruinarlo con una pataleta? Dime ¿Cuánto avanzaste?

— No demasiado, no pude cruzar palabras con el duque.

Si crucé, pero lo ofendí.

Tomó mi rostro con sus grandes manos.

— Ya se nos ocurrirá otro plan.

— De hecho, hay otro noble que podría acercarme más al duque — Dije y se quedó atento, me alejé, no me gustaba cuando se ponía cariñoso, yo no necesitaba mimos y más cuando mi hermano los usaba para mantenerme dócil.

— ¿Quién es ese hombre?

— Un tal lord Leandro Mercier, es prometido de la hija del duque y por lo que pude escuchar de boca de los otros caballeros cuando ambos se marcharon, son socios.

Mi hermano se frotó las manos — Interesante, no todo está perdido, esto nos permitirá matar a dos pájaros de un tiro.

— ¿Dos pájaros de un tiro? — Arqueé las cejas.

— Maude, si son socios, significa que ambos tienen mucha fortuna, lo que podría aumentar ese premio mayor, debemos quitarle todo a esos dos — Dijo, con tono ambicioso — Acércate a ese lord.

— Ni se te ocurra que voy a volver a ese club.

— No, eso ya no es factible, tienes que averiguar su dirección y presentarte — Sonrió abiertamente, sus dientes destellaron a la luz de la luna.

— ¿Con qué excusa? Si me presento en su propiedad con esta ropa y...

— No, te conseguiremos prendas de dama, bastante decente, de eso me encargo yo... Esos nobles tienen un negocio de textiles, intenta convencer al lord que eres una costurera, que te interesa trabajar para él...

Mi hermano me estaba dando en el clavo, mi sueño era diseñar ropas, tenía el talento de mi madre, me gustaba crear prendas, de hecho algunos de mis pantalones fueron creados por mí, ya que los de hombres eran demasiado anchos.

— Me reconocerá del club.

— Inventa cualquier mentira sobre tu salida del club, ruega si es necesario por una oportunidad, tranquila, averiguaremos esa dirección en poco tiempo.

Por dentro, no me agradó engañar a ese hombre.

No parecía mala persona y por lo que pude notar tenía problemas con que lidiar.

Sacudí mi cabeza.

Yo tenía muchos más problemas y complicaciones, no podía ponerme sentimental.

...LEANDRO:...

La cortesana se marchó.

No podía negar que su acercamiento me descontroló por completo, era inevitable no sentirse de esa forma con tan hermosa mujer, aunque al principio sus ojos me parecían similares a los de la ladrona, rechacé toda posibilidad de que fuesen la misma persona.

Aquella mujer era brusca, en cambio la cortesana era muy seductora.

Me había confundido con el duque, ya veía cual era el interés que tenía por mí.

Las cortesanas siempre buscaban los clientes con más riquezas.

Esa mujer parecía ser nueva en el club, jamás la había visto y los demás nobles parecían igual de impactados, casi podía ver el fuego de la excitación en sus miradas.

— ¿De dónde es esa dama? — Se preguntó el duque, un tanto irritado por su atrevimiento — Por sus rasgos, debe ser de un barrio bajo — Giró su atención a mí — Lord Leandro, espero que ya tenga una respuesta a mi proposición.

Asentí con la cabeza, con seriedad — Ese fue el motivo al acercarme, ya tengo una respuesta a su ofrecimiento.

Entrelazó sus manos — ¿Y bien?

— He tomado en consideración todo lo que ofreció, pero me parece muy poco ético que intente atarme con un compromiso matrimonial que no estoy buscando, lo siento, pero debo declinar su oferta — Dije, con firmeza.

El duque siguió con expresión dura.

— Me parece muy grosero de su parte acusarme de no ser una persona ética, intentaba facilitarle las cosas, muchos hombres matarían por mi ofrecimiento, pero usted lo desecha con arrogancia.

— No estoy siendo arrogante, solo tomé una decisión — Dije, manteniendo la calma.

— Lord Leandro Mercier, le dejaré en claro una cosa, mis negocios siempre estarán por encima de los del resto de los nobles, sin mi sociedad, no tendrá éxito, yo tengo mucha influencia y usted es un recién llegado, un noble de la costa... Fui generoso y le dí una oportunidad, no voy a permitir que me deje colgado, va a cumplirle a mi hija — Gruñó, sentenciando.

— Jamás hice una proposición abierta a su hija, no tengo ningún compromiso que cumplir.

— Ya lo tendrá — Se levantó y gritó — ¡Caballeros, Lord Leandro Mercier es el prometido de mi hija!

Jamás creí que el duque jugaría sucio.

— Espero que con eso, usted pueda reconsiderar mi proposición, no podrá escapar ahora, si deja mal a mi hija, lo pagará con un duelo o con su reputación completamente aplastada, ambos caminos son iguales a la perdición, sin mi sociedad, su negocio no llegará lejos, de eso me encargaré— Susurró cerca de mí antes de marcharse.

¿Qué rayos estaba jugando ese desgraciado? Tenía el ego tan alto que no quería verse opacado por mí y tampoco quería una competencia, mi madre tenía razón, ese sujeto solo me quería dejar a su sombra, él no deseaba que alguien lo superara en los negocios.

No iba a casarme, prefería el escándalo, no le temía, siempre estuve envuelto en él, aunque ya no estaba en la costa y los nobles de la capital eran mucho más prejuiciosos.

Lamentaba el día en que me acerqué a ese infeliz, pero no podía quedarme de brazos cruzados.

El único hombre que había manipulado mi vida y la de mi familia, ya no estaba.

Si quería guerra, guerra iba a tener.

Me levanté y bebí el vino de un solo trago.

La cortesana volvió a aproximarse, comentó algo sobre mi forma de beber.

Le contesté con grosería y no dudo en replicar.

No podía pagar mi rabia con la mujer.

— Lo siento, he tenido un mal día.

Me alejé, sin escuchar lo que dijo.

...****************...

— ¿Cómo te fue con el duque? — Preguntó mi madre al verme subir por la escalera de la mansión, estaba en el segundo piso.

— No aceptó mi decisión, planea seguir con esto pese a que no lo deseo... Incluso me amenazó de que sin su sociedad no iba a llegar lejos y que debía cumplir con mi palabra, cosa que es falsa, nunca hice una proposición a su hija... Gritó a toda voz que estaba comprometido con ella para dejarme acorralado — Resoplé mientras seguía subiendo las escaleras.

— Es un narcisista, pero descuida, no saldrá ganando, no te preocupes.

— Quiere competir, eso es lo que desea — Me detuve — No voy a permitir que interfiera en mis negocios.

— Por supuesto, no vas a dejar que ese hombre te manipule a su favor.

Intenté llegar a mi habitación — No has cenado, no vayas a acostarte sin comer.

— Madre, no tengo hambre...

— No me escuchas, tienes que comer — Insistió y tuve que girarme.

— Está bien, madre.

...****************...

Estuve todo el día en la mansión, en mi estudio, planeando mi próxima estrategia para entre meterme en el comercio de la ciudad, tenía planeado ofrecer mis telas a todo tipo de empresas y tiendas que trabajaran con telas.

No iba a rendirme y mucho menos permitir que el duque tomara delantera.

Escribí cartas a cada uno de los lugares que tenía en mi lista para proponer negocios.

Mi madre había ido de compras a la ciudad, al mismo tiempo, estaría ayudando para investigar posibles nuevos clientes, demostrando nuevamente que tenía su apoyo para lo que fuera.

La puerta se abrió.

— Disculpe mi lord, hay una dama afuera de la mansión que insiste en verlo — Dijo el mayordomo.

Seguí escribiendo con mi pluma.

— No conozco a ninguna dama, estoy ocupado, por favor has que se retire.

— Ella asegura conocerlo, dice que de un tal baile de Hilaria, que ella bailó con usted — Dijo, sin comprender nada.

Me desconcerté y elevé mi mirada, deteniendo la pluma.

¿Un baile de Hilaria?

El único baile de ese tipo era el de la...

¡Cortesana!

Me levanté ¿Qué hacía esa mujer aquí?

Me daba curiosidad.

¿Qué interés podía tener en mí una mujer como esa? Seguramente quería ofrecerme algún servicio privado o proponerme algo indecoroso.

Por ser un caballero, la tendría que volver a rechazar, no me apetecía convertir mi mansión en ningún cabaret.

— Hágale pasar y que espere en el salón.

El mayordomo asintió y se marchó.

¿Por qué estaba tan alterado?

Observé mis fachas, solo llevaba una camisa holgada mangas largas y los pantalones con tirantes.

Ni modo, esa mujer no llevaba más que dos trapos cubriendo sus vergüenzas cuando la conocí tan solo ayer.

Salí del salón y me peiné rápidamente el cabello con los dedos.

Me dirigí hacia el salón.

Entré y la dama se levantó del sillón en el que se hallaba.

La observé, no lucía como una cortesana.

Tenía un vestido color melón, de mangas largas hasta las muñecas, con un escote prudente que dejaba su piel café a la vista.

Su cabello estaba recogido en moño alto, pero los rizos negros de esa melena espesa se le escapaban, rozando su frente y su cuello.

Pude ver su rostro completo, era delicado, con cejas gruesas y lindas pestañas largas, sus ojos azabache estaban muy brillantes, tenía la nariz pequeña y respingona y pómulos elevados, sus labios eran muy gruesos.

El cuello delgado y delicado.

— Señora...

Se tensó.

— Dama...

No sabía como llamarla.

— Disculpe mi lord, sé que no esperaba mi aparición, teniendo en cuenta que nos conocimos en el club — Dijo, con esa voz tan melodiosa, pero clara y autoritaria, tenía un aire poderoso.

— Estoy bastante desconcertado sobre los motivos de su visita — Dije, tomando una postura firme.

— Es un tema largo de tratar, pero no se preocupe, no tiene nada que ver sobre el oficio que tenía de cortesana...

— ¿Tenía? — No pude evitar la curiosidad.

— Sí... Pero, antes de hablar sobre eso, es justo que sepa mi nombre... Soy Liseth Darling — Hizo una reverencia.

— Encantado de conocerla señora Darling.

Asintió con la cabeza — Me he tomado la molestia de venir porque necesito trabajar.

Me tensé — ¿Fue por mi causa? ¿La despidieron?

— No, no, no tiene nada que ver con eso, renuncié a ello, de hecho tengo otro oficio que si deseo retomar — Dijo, con un poco de vergüenza — Soy costurera y oí que usted tiene un negocio de textiles.

Me sentí desconfiado, primero su interés por confundirme con el duque y ahora venía a pedir trabajo.

— Usted me confundió con el duque, por eso tanto interés en mí.

Se sobresaltó — Solo buscaba una oportunidad de ofrecerme como costurera, se que usted tiene cercanía con él, es el prometido de su hija, también escuché que son socios... Perdone mi atrevimiento, pensé que usted sería más accesible y que podría escucharme.

Puras mentiras inventadas por los nobles y por el mismo duque.

No sabía que decir, pero si era costurera y acudió a mí, debía aprovechar.

Necesitaba alguien que hiciera modelos con mis telas para mostrarlas a los clientes.

— Si usted hace un vestido con las telas que confecciono, entonces le daré el trabajo, pero solo si apruebo su diseño — Dije y alzó sus cejas.

Más populares

Comments

Daiana Ibarra

Daiana Ibarra

multifacetica le salio ladrona cortesana ahora costurera diseñadora.

2025-03-14

1

Eva Mari♥️😍🌖🌊

Eva Mari♥️😍🌖🌊

ayyy no mi hermoso Leandro el viejo desgraciado ese te puso una trampa, no te dejes 😡😡

2025-03-14

0

Nena

Nena

Apenas está empezando y ya está muy buena

2025-03-14

1

Total
Capítulos
1 1. Daga en la garganta
2 2. La ladrona
3 3. El club de caballeros
4 4. Un desastre en plena misión
5 5. Un nuevo plan, un nuevo encuentro
6 6. En la mansión del lord
7 7. Piel morena
8 8. Provocaciones y juegos
9 9. Fijación por la cortesana
10 10. Absurdo comportamiento
11 11. Chispas de fuego
12 12. Salvada por la campana
13 13. Ataque de estupidez
14 14. Más que un robo
15 15. Acusaciones
16 16. Devolviendo el favor.
17 17. Sensaciones inquietantes
18 18. Cubriendo las espaldas
19 19. Inevitable descubrimiento
20 20. Proposición
21 21. La frágil Liseth
22 22. Cubriendo las espaldas
23 23. Jaque mate
24 24. El rapto
25 25. Ataques abruptos
26 26. Sin máscara
27 27. Nada oculto
28 28. Sorpresa del destino
29 29. Enemigos respirando el mismo aire
30 30. Enfrentamiento con el verdugo
31 31. Inconcebible
32 32. Siguiendo a la asesina
33 33. Dentro del palacio
34 34. El misterio del duque Jones
35 35. Reencuentro de hermanos.
36 36. La inspección
37 37. Solo en familia
38 38. La tienda
39 39. La condición del duque
40 40. La propuesta del rey
41 41. Las sospechas
42 42. El engaño
43 43. Apresados
44 44. Planes de contraataque
45 45. La sorpresa
46 46. Buscando las pistas en Marla
47 47. El intercambio
48 48. Las pruebas
49 49. La trampa
50 50. La trampa ll
51 51. En libertad
52 52. Libertad II
53 53. El casamiento.
Capítulos

Updated 53 Episodes

1
1. Daga en la garganta
2
2. La ladrona
3
3. El club de caballeros
4
4. Un desastre en plena misión
5
5. Un nuevo plan, un nuevo encuentro
6
6. En la mansión del lord
7
7. Piel morena
8
8. Provocaciones y juegos
9
9. Fijación por la cortesana
10
10. Absurdo comportamiento
11
11. Chispas de fuego
12
12. Salvada por la campana
13
13. Ataque de estupidez
14
14. Más que un robo
15
15. Acusaciones
16
16. Devolviendo el favor.
17
17. Sensaciones inquietantes
18
18. Cubriendo las espaldas
19
19. Inevitable descubrimiento
20
20. Proposición
21
21. La frágil Liseth
22
22. Cubriendo las espaldas
23
23. Jaque mate
24
24. El rapto
25
25. Ataques abruptos
26
26. Sin máscara
27
27. Nada oculto
28
28. Sorpresa del destino
29
29. Enemigos respirando el mismo aire
30
30. Enfrentamiento con el verdugo
31
31. Inconcebible
32
32. Siguiendo a la asesina
33
33. Dentro del palacio
34
34. El misterio del duque Jones
35
35. Reencuentro de hermanos.
36
36. La inspección
37
37. Solo en familia
38
38. La tienda
39
39. La condición del duque
40
40. La propuesta del rey
41
41. Las sospechas
42
42. El engaño
43
43. Apresados
44
44. Planes de contraataque
45
45. La sorpresa
46
46. Buscando las pistas en Marla
47
47. El intercambio
48
48. Las pruebas
49
49. La trampa
50
50. La trampa ll
51
51. En libertad
52
52. Libertad II
53
53. El casamiento.

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play