Capitulo 19 Apareció mi amor de juventud.

Narra Alejandro

Con Analia nos llevamos muy bien, que digo nos llevamos rebien. Nos coordinamos en armonía perfecta.

 Compartimos paseos, salidas. En el trabajo nos damos nuestras escapadas, más bien yo la llevo a mis escondites, la invito a hacer travesuras y ella se presta.

Angel se hace de tiempo para ir a jugar al ajedrez con mi padre. Esta muy entusiasmado en aprender directamente del maestro a quien él admira y nunca imagino conocer en persona.

Mi padre se sentía dichoso con los momentos compartidos con Angel, con los dulces que le llevaba Analia, me lo estaba malcriando. Notaba que tomaba más fuerza en su andar, se lo veía más animado y saludable.

"Me siento orgulloso de que me diste una nuera tan amorosa y un nieto que es un genio", me dijo mi padre en una de esas visitas, antes de despedirme.

Analia tuvo el juicio donde se discutía su divorcio y la custodia por Angel, todo salió a su favor, por ese lado se sentía más relajada.

Para celebrar armamos reunirnos en mi casa, me sentía de buen humor y había terminado el arreglo de la casa, por lo que era una doble celebración, que termine de arreglar la casa y su divorcio sea definitivo.

Logré que mi padre venga, hace mucho que trataba de traerlo a una comida y siempre tenia una escusa.

Me puse a hacer la comida temprano, mi padre se ocupaba de acomodar las bebidas, él preparaba los mejores tragos.

-Alejandro. Escuché la voz de la que espere años que diga mi nombre, me gire imaginando que solo era una ilusión, pero no, estaba ahí.

Su cabello largo negro, sus ojos color celeste como los gatos siamés, su piel morena, usando un vestido negro corto en seda.

-Maisa. La saludé.

-Hey Maisa... ¿Qué sorpresa?... ¿Qué te trae por aquí?. Le pregunto mi padre al verla.

-Señor Motter... Que bien que se lo ve... Vine por mi padre... Debe hacer unos tramites. Le comento ella de una manera pausada.

-Que bien. Le respondió mi padre.

-Hola...Hola. Apareció Analia junto a Mari y Angel.

Analia traía puesto un vestido suelto, blanco, el que usa sobre la bikini, habíamos quedado que iríamos a la playa después.

Se me aproximó dándome un beso intenso.

-Es por el que no pude darte está mañana... Debía traer el pastel. Me dice con ternura.

Nosotros pasábamos más en casa haciendo nuestras maratones de desenfrenada lujuria y respetabamos no hacerlo en su casa al estar Angel. Ella se había ido temprano a buscarlo y traer el pastel.

Aunque como ya salió el divorcio le propuse que se muden conmigo y vendan su casa o la pongan a alquilar, la quería cerca de mi de manera definitiva y logré que se estén mudando de apoco. Aunque sabía porque le costaba a ella despegarse de su casa, no quería perder los recuerdos que tuvo en ella con su hija.

-AQUI TRAEMOS LA MUSICA. Apareció Nico con Julián.

-QUE BUENO... MOVEREMOS EL ESQUELETO. Dice animada Mari.

Maisa miro suspiro hondo al ver como Analia me tenía abrazado.

-Permitanme presentarles a Maisa... Antes vivían a lado... Sus padres eran nuestros amigos. Le dice mi padre presentándola.

"HOLA", la saludaron en coro y siguieron en lo suyo acomodando todo.

-Asi que ustedes son pareja. Dijo Maisa aproximándose a nosotros.

-Si. Le dijo Analia dándome otro beso.

-Maisa... Y tú tienes pareja. Le consulto Mari.

-Me separé... Él era doctor... Y yo ingeniera... Cada uno siempre en sus ocupaciones... Y decidimos hacerlo. Comento.

-Que civilizados. Le dijo Marí en un tono irónico.

-Y tu... Eres pastelera. Le pregunta a Analia.

-Ja... Lo dices porque traje la torta ... Entonces lo serían la mayoría si fuera por eso... Soy profesora. Le responde Analia divertida.

-Es simpática... Muy distinta a vos. Me dice Maisa.

-Nos complementamos. Le dice Analia.

-Aqui están los tragos. Anuncio Nico aproximando la bandeja.

Sentía la garganta seca, por alguna razón no podía pronunciar nada, solo asentía y sonreía. Me prendí de uno absorbiendo como esponja.

-Espero les guste. Dijo mi padre.

-Si los preparo usted de seguro son deliciosos... Mis padres siempre admiraban sus cócteles. Le dice Maisa.

-Un brindis por la casa terminada. Dijo mi padre.

Todos elevan sus copas y a Maisa se le cae hacia el vestido de Analia su trago.

-Oh lo siento ... Soy torpe. Dijo a modo de disculpa. - Deja que te ayude.

-Descuida ... Iré a cambiarme. Le dice Analia.

-Tienes tus cosas aquí. Le dice Maisa.

-Si... Vivimos juntos. Le dijo Analia.

Se dirigió hacia la casa.

-Paso al baño... Me salpicó un poco a mi también. Dijo Maisa.

Al alejarse Mari se giro y me miro.

-Lo hizo a propósito... Y de seguro irá atrás de Analia. Me dijo mirándome directo.

Por lo que me dirigí a ver.

"SABES QUE ESTA CASA LA HIZO PENSANDO EN MI", escuché la voz de Maisa en un tono mas agudo que de costumbre, siempre hablaba suave.

"¿Y ESO NO TE OFENDIO?... AL SER ANCHA, Y TENER UNA ENORME ENTRADA... LO VERIA COMO UN MENSAJE... BAJA A LAS FRITURAS". Le respondió Analia.

"NO... NUNCA FUI GORDA... Y TU SI LO ERES... QUE OCULTAS BAJO ESE VESTIDO SUELTO", le grito Maisa.

"SUELTA" Le dijo Analia.

Me aproximó y veo como Maisa se lo arranco dejándola en bikini, Analia lo tenía puesto para la playa más tarde.

-Maisa... ¿Que haces?. Le pregunto.

-TU HICISTE ESTA CASA PARA MI... SIEMPRE ME TUVISTE PRESENTE... CRUZABAS LA CERCA POR MI... HASTA ESTUDIAMOS LA MISMA CARRERA... ¿QUÉ CAMBIO?... NUNCA FUE TU GUSTO UNA RUBIA AMANTE DE LOS ABDOMINALES POR LO QUE VEO... ME FUI POR LA SALUD DE MIS PADRE... REGRESO ENCONTRÁNDOTE CON ESTA IMITACION DE BARBIE. Grita Maisa.

Analia suspiro mirándome, porque no respondía, tomo su vestido y salió por la puerta.

-Ma ¿que paso?. Escuché que le pregunto Angel.

-Nada... Debo tomar aire. Le respondió.

Veo que Angel ingresa mirándome y tenía los puños cerrados, miro a Maisa.

-Alejandro... Te hice una promesa cierto. Me dijo y antes de poder responder algo me tumbo de una piña dejándome viendo estrellas, de verdad tenía fuerza.

-¿Qué haces?... Alejandro ¿estás bien?. Me preguntó Maisa. - Para colmo tiene hijo grande... Tan santa se ve que no es. Agrego Maisa.

-Dejame... Debes irte. Le dije serio limpiandome la sangre del labio.

Angel me había dicho que por cada lágrima de su madre me daría una piña, se ve que la vio largar una lagrima, porque así como me encajo una piña se fue.

-Quedate con nosotros. Escuché que le dijo Julián.

-Si... Vamos a casa. Le dijo Nico.

Ingreso mi padre serio.

-¿Qué paso ?. Me preguntó serio.

-Mejor me voy. Dijo Maisa volviendo a usar ese tono suave para quedar como víctima, tarde me di cuenta lo manipuladora que podía ser.

-No maduraste con los años... Siempre hay líos donde vas. Le dijo mi padre de paso.

-No se de que habla. Le dice ella.

-Se que te revolcaste con un profesor y fundiste una familia... Luego se tuvieron que mudar para evitar los chismes... Las úlceras de tu padre las causaron tus imprudencias. Le dijo mi padre.

Ella apretó los puños saliendo de la casa, sin retrucar lo que le dijo mi padre, al parecer era verdad.

-Busca a Analia... Es una gran mujer... No puedes perderla. Me dice mi padre, mirándome con enojo.

-No hice nada... Porque te enojas conmigo. Le digo, incorporándome apenas del piso donde quedé sentado.

-No es si hiciste o no... Debiste hablar... Presentarla oficialmente... Darle su lugar... Estuviste flojo... Además tiene un físico espectacular... Ahora entiendo porque siempre estás cansado. Me dice molesto.

-La vieron todos. Le consulto.

-Los vecinos están felices... Aplaudieron como foca al verla subir a su auto. Me responde.

-¿Se fue en su auto?. Le pregunto.

-Deja de preguntar lo obvio y ve tras de ella. Me empuja.

Al salir veo que Mari guardaba las cosas.

-Desde que la ví sabía que significaba problemas. Me dijo de paso.

-ANALIA ES IMPORTANTE PARA MI. Le asegure.

-A mi no debes decirme... A ella debes decirle. Me dijo girando a mirarme cuando se iba.

-Sabes donde puede estár. Le pregunto.

-Se llevo su celular ... Ella siempre tiene activado ese que comparte su ubicación. Me dice.

Cuando estaba subiendo a mi auto recibí una llamada.

📱HEY PRIMO... VINE PARA EL CUMPLE DEL TIO. Le escucho decir.

Miro mi celular para ver quién era y solo tenía el número.

📱SOY EL HIJO DE TU TIO LITO... EL HERMANO DE TU PADRE... PAPA ME DIO TU NUMERO... EL LLEGARA LA OTRA SEMANA. Me dice.

📱AH... MAX... HACE TANTO TIEMPO. Le respondo al recordar.

📱TE ACORDASTE... PASAS POR MI EN EL AEROPUERTO.

Me dice.

📱NO PUEDO... PIDE UN TAXI... TE PASO LA DIRECCION... PAPÁ ESTA EN CASA. Le comunico.

📱DE ACUERDO. Me dijo y cortó.

Le envié la ubicación antes de irme, para qué le llegué exactamente dónde estaba la casa y una vez que lo hice me puse en marcha fijandome donde podía estar Analia.

-AUN SIGUES AQUI. Me dice mi padre en el garach.

-Me llamo Max... El hijo de Lito... Viene en camino. Le aviso

-¿MAX?... ¿LITO?... Mi hermano. Me dice mi padre.

-SI... VIENEN PARA TU CUMPLE... LA OTRA SEMANA LLEGA LITO. Le aviso.

-Paso años desde la última vez que lo ví... Siempre fue anti familia. Dice mi padre reflexionando.

-Eso dijo. Le aviso, saliendo del garach.

Me fijé y note que Analia estaba en movimiento, por lo que tome la dirección hacia donde me marcaba.

La llamaba para hablar que me espere, pero no respondía.

Tenía razón mi padre, fui flojo, pero porque no hable, que me pasó, Analia es la mujer que quiero en mi vida.

Maisa en su momento significó algo, fue mi primer amor, fui ciego siguiéndola a ella, hasta que al descubrirla teniendo relaciones con otro, eso me hizo bajar de la nube donde estába y velar por mi.

Mi preparación, mis estudios de idiomas, todo apuntaba para irme a otro país.

Pero al empeorar mi padre de salud me quedé, me quedé por él, para que se recupere, y se que dije que ni bien lo hacía me iba.

Pero luego conocí a Analia, y ahora siento que me moriré si ella no está conmigo, no quiero presionarla pidiéndole matrimonio porque recién sale de un divorcio, y ella me había dicho que quería vivir esta etapa de noviazgo y enamoramiento, hacer locuras. Con su esposo no lo tuvo, a la primera se embarazo y se casaron, no pudo disfrutar nada, debía atender a un ser pequeño que dependía de ella, así que su enamoramiento pasó entre pañales, llantos y mamaderas.

Con gran esfuerzo terminó su carrera, adelanto materias al ser muy inteligente, hizo las practicas mientras pudo, pero después no ejerció.

Su vida siempre está marcada de sacrificios. Le jure que a mi lado no sufriría engaños, ni desepciones y le estába fallando.

Nunca le dije que la casa la construi pensando en Maisa.

Jamás le dije que toda mi vida la había amoldado pensando pasarlo con Maisa.

Pero ahora ya no me interesaba Maisa. Lo comprobé al tenerla de frente, ya no siento lo que sentía por ella, lo que no me explico porque no pude hablar, presentar a Analia como mi pareja.

Veo un control de oficiales de tránsito, mire mi guantera y tenía mis papeles, así que no había problema.

-Señor... Sus papeles... Carnet, seguro, DNI. Me pidió el oficial.

Se lo pase todo, se fue hacia atrás, miro mi matrícula, regreso al frente, comprobó la lámina impresa que indicaba cuando hice la revisión técnica.

Regreso hacia el lado del conductor.

-Tiene la luz derecha baja... Debe llevar que se le ajuste... Ahora le haré una prueba de alcohol... Así que debe soplar. Me dice enseñando el aparato.

Lo hice y al hacerlo recordé la copa que tome.

-Mmmm... Aquí me marca que bebió... No es mucho... Pero le haré una multa... Si toma, no conduzca. Me dice.

-Acaba de decir que no es mucho... Solo fue un brindis... Un sorbo. Le dije.

-Es la ley... Yo no la hago... Solo la cumplo. Me respondió entregándome la boleta.

La tome y me dió paso a seguir. Llegué dónde estába el auto de Analia, ví que una rueda estába baja y sus cosas adentro, pero de ella ni señal.

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