Capítulo 5 - El poder oculto
Las palabras de Selene me dejaron atónita. ¿Acaso había una alternativa a mi supuesto destino como la villana de esta historia? ¿Realmente podría ser yo la heroína que salvaría a este reino de la oscuridad que se cierne sobre él?
Sentí como si un peso inmenso se hubiera levantado de mis hombros. Durante toda mi vida, había sido atormentada por la idea de que estaba condenada a convertirme en la maldición de este reino, y ahora esta mujer aparecía con la promesa de una salvación que jamás habría imaginado posible.
—¿Cómo puedes estar tan segura de que yo soy esa heroína de la que hablas? —pregunté con cautela, aún reticente a dejar que la esperanza se apoderara por completo de mí.
Selene me miró con una sonrisa tranquilizadora y señaló los símbolos tallados en la antigua piedra.
—Estos jeroglíficos hablan de una princesa de cabellos oscuros, poseída por poderes mágicos capaces de traer tanto la destrucción como la redención —explicó—. Según la profecía, solo ella podrá enfrentar a la amenaza que se cierne sobre este reino y guiarlo hacia un futuro de luz y prosperidad.
Sentí que el corazón me latía con fuerza mientras escuchaba sus palabras. ¿Acaso esa princesa de la que hablaba la profecía era yo?
—Pero... ¿y si me equivoco? —murmuré con temor—. ¿Y si, a pesar de todo, termino sucumbiendo a la oscuridad?
Selene posó suavemente su mano sobre mi brazo, mirándome con comprensión.
—Tienes miedo, lo entiendo —dijo con calma—. Pero debes confiar en ti misma, Lilith. Tus poderes mágicos son una bendición, no una maldición. Solo tienes que aprender a dominarlos, a canalizar esa energía oscura hacia la luz.
Asentí lentamente, sintiendo cómo la determinación volvía a florecer en mi interior. Si realmente existía la posibilidad de redimir mi destino, no podía darme por vencida sin luchar.
—¿Cómo puedo hacerlo? —pregunté con urgencia—. ¿Cómo puedo controlar estos poderes y convertirme en la heroína que necesita este reino?
Selene esbozó una sonrisa enigmática y señaló los pasillos del templo.
—Este lugar está lleno de antiguos conocimientos y secretos perdidos —respondió—. Aquí encontrarás las respuestas que buscas y la guía que necesitas para dominar tus poderes.
Sin perder un momento, me sumergí en la exploración de los recónditos rincones del templo, descubriendo tesoros ocultos y aprendiendo a desvelar los misterios que encerraban los antiguos pergaminos y artefactos mágicos.
Bajo la atenta supervisión de Selene, comencé a comprender la verdadera naturaleza de mis poderes. Aprendí a canalizar la energía oscura que fluía por mis venas, convirtiéndola en un arma poderosa que podía utilizar para proteger a quienes amaba.
Día tras día, me sumergía en intensos entrenamientos, desafiando mis límites y explorando nuevas formas de controlar mi magia. Cada vez que lograba un avance, sentía cómo la confianza en mí misma iba creciendo, reemplazando al miedo y la duda que durante tanto tiempo me habían atormentado.
Mientras tanto, Selene se convirtió en una aliada invaluable, compartiendo conmigo sus conocimientos y acompañándome en cada uno de mis desafíos. Juntas, descubrimos antiguos hechizos y técnicas olvidadas, que me permitieron dominar con mayor precisión mis poderes.
Una noche, mientras meditaba bajo la luz de la luna, sentí una presencia familiar que se acercaba al templo. Conteniendo el aliento, me preparé para enfrentar a quien quiera que fuese, pero cuál fue mi sorpresa al ver a Endymion acercarse a mí con una expresión de alivio en su rostro.
—¡Lilith! —exclamó, abrazándome con fuerza—. ¡Gracias a los dioses que estás a salvo!
Correspondí a su abrazo, sintiendo cómo la tensión abandonaba mi cuerpo.
—Endymion —murmuré con emoción—. Me alegro tanto de verte.
Mi mentor se separó de mí y me observó con detenimiento, como si buscara alguna señal de que me hubiera ocurrido algo.
—Cuando Selene me envió el mensaje de que te había encontrado, no podía creerlo —dijo con seriedad—. ¿Cómo has estado? ¿Te han hecho daño?
Negué con la cabeza, esbozando una pequeña sonrisa.
—Estoy bien, Endymion. Selene me ha estado ayudando a comprender y dominar mis poderes.
Los ojos del anciano hechicero se abrieron con sorpresa y, por un momento, pude ver cómo la esperanza brillaba en su mirada.
—¿Entonces es cierto? ¿Tú eres la elegida de la que habla la profecía?
Asentí con determinación, sintiendo cómo la convicción se apoderaba de mí.
—Sí, Endymion. Soy yo. Y voy a hacer todo lo que esté en mis manos para proteger a este reino y a mi familia de la oscuridad que se avecina.
Mi mentor me miró con orgullo y, por primera vez desde que lo conocía, pude ver una sonrisa sincera en su rostro.
—Sabía que tú eras especial, mi niña —dijo, acariciando suavemente mi mejilla—. Y ahora que has abrazado tu destino, sé que serás una gran heroína.
Sentí que las lágrimas brotaban de mis ojos mientras lo abrazaba con fuerza. Después de tanto tiempo siendo rechazada y temida, tener el apoyo incondicional de Endymion y Selene era un bálsamo para mi alma.
—Gracias —murmuré con emoción—. Gracias por creer en mí.
Endymion se separó de mí y me miró con seriedad.
—Ahora debemos actuar con cautela —dijo—. Tu padre y tu hermano siguen buscándote, y no se detendrán hasta encontrarte.
Asentí con determinación, consciente de que debía estar preparada para enfrentarlos.
—Lo sé. Pero esta vez voy a demostrarles que no soy la amenaza que creen que soy.
Mi mentor me observó con orgullo y asintió.
—Entonces es hora de que vuelvas al palacio, Lilith. Es hora de que enfrentes a tu destino y reclaimes tu lugar como la princesa que eres.
Tomé una profunda respiración y, sin dudar, acepté su desafío. Era hora de enfrentar a mi familia y a todo el reino, y demostrarles que yo era la heroína que este lugar necesitaba.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 26 Episodes
Comments