Pasado

Un carruaje en el camino con el escudo de Aragón, se detiene para que la duquesa descanse un poco.

-Que pasa?

-Estoy cansada.

-🙄 Bien, solo un rato.

-Te urge deshacerte de mí.

-Querida si quisiera eso vendrías con el divorcio firmado, quieres eso?

-No.

-Si estás aquí es para que reflexiones sobre tus actos, le has gritado a tu hijo que lo prefieres muerto, sabes cómo se sintió él, lo vas a culpar por tener ojos rojos y que te recuerde a alguien.

-De que hablas?

-Crees que no se que este matrimonio no lo querías.

-Mi padre lo acordó con tus padres.

-Si, pero tú querías al marqués no es cierto.

-No.

-La mirada de Dereck te recuerda a él, por eso no te gustan sus ojos, te recuerda al hombre que si amabas.

-La descendencia de los Michelob heredan los ojos rojos, en mi familia los ojos rojos son por la familia real, solo yo no herede el cabello plateado de mi abuela, pero Dereck despertó su magia, por qué tú lo sellaste cuando nació de haber estado presente jamás lo hubiera permitido.

-El nació con esos ojos y tenía mucho poder era un bebé que no podía controlarlo por eso lo hice, si no se hubiera muerto.

-Ya basta, estaras un tiempo con tu familia, piensa si en realidad quieres seguir con este matrimonio.

El Duque toma entre sus manos el rostro de la Duquesa, solo suspira al verla.

-Yo te amo, desde que te conocí, fui el hombre más feliz cuando nos casamos y cuando nacieron nuestros hijos, pero este amor tiene un límite, no voy a permitir que le hagas daño a MI hijo.

El duque ordena seguir ella sube al carruaje, al llegar a una mansión, un hombre mayor sale a recibirlos, se extraña, pero los deja entrar, el hombre mayor era el padre de la duquesa, ella se tensa al saludar, durante la cena el duque conversa con su suegro van a su despacho para explicarle bien.

-Paso algo?

-Si, la actitud de Elizabeth hacia nuestro hijo no ha cambiado y otras cosas, la dejaré aquí durante un tiempo, tiene muchas cosas que pensar, sobre todo si quiere seguir con este matrimonio.

-No pensarás en el divorcio, llevan más de 26 años juntos.

-Si, usted me mintió cuando me dijo que ella deseaba este matrimonio, mi padre hizo la petición y aquí estamos, de haber sabido que amaba a otro jamás hubiera aceptado.

-Era un capricho lo que ella sentía, el marqués ya tenía prometida, jamás vio a Elizabeth, él quería a su prometida, ellos ahora son los padres de la Emperatriz, eso era lo que Elizabeth quería ser la futura madre de la emperatriz, una locura.

-Pero debieron decirme, he pasado todo este tiempo intentando que ella me ame, pero por lo visto nunca lo hará.

-Ella era joven, la familia Michelob siempre fue cercana a nosotros, cuando Amelia se fue, el compromiso con Ricardo se rompió, pero en alguna generación debe haber una Emperatriz de esa casa noble, el poder de ellos no se puede perder, cuando la emperatriz Sofía dio a luz un niño, también nacía una niña de los Michelob, era lógico que esos dos se casarán, la princesa heredera está embarazada, rogamos a los dioses por qué se un niño, su poder será enorme.

-Eso es irrelevante para mí, se que el marqués jamás le dió esperanzas a Eliza, pero ella no ha cambiado.

La plática de los dos continuo, al día siguiente el duque regresa a casa, sin despedirse, algo que ala duquesa le molesto y le dolió, se daba cuenta de que estaría sola.

-Elizabeth ven a mi despacho.

-Si padre

-Estoy molesto, te advertí que esto podía pasar, acaso sigues amando al marqués, estás loca.

-Padre yo...

-Que él jamás te quiso, crecieron juntos, pero nunca te quiso, conoció a la baronesa en la academia, querías romper un compromiso, te di un matrimonio estable, con un hombre joven que desde que te vio se enamoró de ti, y tú sigues pensando en otro.

Por eso no te gusta la mirada de tu hijo, debería azotar tu espalda, pero eres una mujer casada, tu esposo ha sido muy pasiente pero ya llego a su límite, vete tienes prohibido salir, espero que pienses bien que vas hacer

-Eso está en el pasado, el marqués ahora será abuelo, jamás volví a hablar con él, incluso cuando iba a los banquetes en el palacio.

-Nada más eso te faltaba, Elizabeth estas perdiendo a tu esposo, por un amor que solo existió en tu cabeza.

-Padre yo solo me enamoré de él, crecimos juntos si tú hubieras hecho la petición él...

Su padre golpea fuerte su escritorio y ella salta del susto.

-No puedo creerlo, el viejo marqués jamás permitiría ese matrimonio, nunca obligó a su hijo a un matrimonio, no quería que sus hijos sufrieran lo que la princesa Amelia, él se casó por amor al igual que los príncipes, ahora tú causas problemas en tu casa, ya perdiste un hijo, quieres perder a tu familia.

-No.

-Entonces, el viejo marqués es primo de la princesa Amelia, por eso querías ese matrimonio, no era por el joven Márquez es por qué tú siempre quisiste estar cerca de la familia real, tu esposo es de esa línea no se en realidad que es lo que buscas.

Elizabeth sube a su cuarto llorando, todo empezó por qué su padre no quiso hacer un compromiso con el joven marqués, cuando él se fue a la academia conoció a su esposa, ella intento separarlo, pero antes de que cometiera una estupidez su padre la mando al Ducado de Aragón.

-Dios ahora pienso si hice lo correcto, esa niña era peligrosa, acaso no ha crecido.

Así la duquesa se queda ahí, su padre intentará que entre en razón, solo así espera que ella recupere su matrimonio.

Mientras eso pasa Aisha sale del Ducado, le ha pedido permiso a Beatriz para visitar a su familia en el Marquesado Michelob, la doctora no necesita tanta seguridad, el Duque se ha encargado de cuidar de ella personalmente.

-Al menos la doctora es feliz 😀

El viaje de Aisha fue rápido iba en caballo, sus abuelos la reciben con gusto y se alegran de conocerla.

-Eres igual a tu madre, eres hermosa.

-Gracias abuelo, me da gusto estar aqui.

-Puedes quedarte el tiempo que quieras, no te preocupes.

Aisha fue bien recibida, sus abuelos estaban felices y la llevaban a pasear por el pueblo y alrededores.

Ella lleva su vida normal, hoy monta a caballo para pasear, su abuelo le dice el camino donde encontrará el lago.

-La propiedad es segura además se que puedes defenderte mejor que nadie, te pareces tanto a mi prima también, por eso tu madre creció con ella, tu abuela casi se muere del susto cuando vio el poder de tu mamá, pero fue feliz cuando se casó y con un emperador.

-Te estoy escuchando, deja que mi niña se vaya, ha de estar aburrida de estar con unos viejos, pero en unos meses regresan mis nietos.

Aisha ríe y se va, sus abuelos son muy amables con ella, solo que ahí usa vestido, su abuela fue criada como una noble y comprometida con su abuelo desde muy joven, que ande de pantalones no le va a gustar, prefiere no causar problemas.

Ella llega al lago baja de su caballo y en una banca ve a una señora muy bonita que parece que está llorando.

-Quien eres?

-Señora, perdón no quise interrumpir, solo estaba paseando.

-Vienes del marquesado?

-Si soy Aisha de Draco Michelob.

-Draco, oh por dios!! Majestad!! Disculpa no sabía, soy Elizabeth, duquesa de Aragón

La Duquesa también había salido a pasear, lloraba por qué mando una carta al Ducado pidiendo volver y el duque le dijo que no, pero al ver a la joven se molestó hasta que dijo su nombre y tuvo que hacer reverencia.

-No es necesario que me diga a sí.

-Eres una princesa, entonces eres hija de Amelia, si la recuerdo poco, siempre jugando por ahí con una espada, como está ella.

-Es Emperatriz 😅 con mucho trabajo

-Si

Ambas se sientan a platicar y Aisha le cuenta sobre su madre, como es Draco y el motivo por el que se fue.

-Entonces rompiste tu compromiso, tu padre no se molestó.

-No, se alegró, ya después fui a la academia de Orión.

-Cuantos años tienes?

-Tengo 17 años.

-Eres joven debes buscar un joven guapo, te presentaré a mi hijo, pero me dijo que no le gustan las mujeres 🥲no se si será verdad.

-😅 Bueno debe entenderlo, no solo el sería infeliz, también la mujer con quién se case 😩

-Si, creo que tenés razón, eso me tomo de sorpresa 😅, bueno me voy me gustó conocerte, cuando gustes puede ir a visitarme.

-Usted también puede ir

-🤭 No, es una larga historia, es mejor que tu abuela no me vea.

-Entonces un día de estos iré a visitarla.

-Cuando gustes.

Así que ambas se van, Aisha entendió que la duquesa no se llevaba con sus abuelos, así que no dijo que la había conocido

Elizabeth llega su casa sonriente, algo que le extraña a su padre.

-Que te paso.

-Conocí a una princesa.

-Queee

-Si la hija de Amelia Michelob, Emperatriz de Draco está aquí, si tan solo pudiera presentarle a Dereck.

-Tal vez si no le hubieras gritado que estaría mejor muerto, vendría a ver a su madre.

-Padre mi hijo nunca va a perdonarme.

-No, bueno no se, vamos a cenar.

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