Llego a casa luego de la reunión con Soledad. Tengo un humor de perros y no se bien por qué. Trato de engañarme, la realidad es que mi humor se debe a la negativa de ella. Porque se habrá negado? no puedo creerlo, no es que sea una deidad , pero tengo lo mío. Hace mucho nadie rechazada una invitación mía. Y eso hace que me cargue este humor. Debe ser el karma. Tantas mujeres que quisieron algo conmigo y luego de Valeria solo fueron rechazadas. Pero con Sole es distinto. Sole, hasta me atrevo a llamarla así. Quién lo diría. Parece que mis amigos tenían razón. Un día iba a llegar la que me hiciera cambiar. Aquella que con solo mirarla haga temblar mis piernas.
Pero enseguida llega Valeria a mi mente. Me destruyo de tal forma que ya no puedo confiar más en ninguna. Ya no podre amar más. Aunque mi amigo y mi familia no estén de acuerdo, ellos siguen diciéndome que ella es una basura, que no merece que arruine mi vida por ella, que no todas son iguales. Y yo solo siento frio en mí. Siento que ya no podré volver a ser el mismo. Y por otro lado la llegada de Soledad parece desestabilizar mi corazón.
Me meto bajo la ducha esperando que el agua se lleve mi mal humor y que por milagro aclare mis pensamientos y me dé respuesta, las que obvio no llegan. Me visto solo con bóxer y voy a la cocina a prepararme algo de cenar. Y pensar que si hubiese aceptado ahora estaría con ella. Basta, me digo a mi mismo en voz alta, pensando que de esa forma saldrá de mis pensamientos, a quien engaño.
Caliento unas porciones de pizza de la noche anterior y busco una serie para distraerme.
Abro los ojos sobresaltado y me doy cuenta que me quede dormido en el sofá. Son las 3 de la mañana, solo comí una porción de la pizza, me levanto y voy a mi habitación para poder descansar mejor, aunque mas no sea estas 3 horas que me quedan.
El despertador irrumpe mi sueño, y no tengo que aclarar con quien soñaba. Y tampoco el estado en que me encuentro, deberé tomar una ducha helada. No sé qué me pasa, o si…
Mi estómago protesta por el poco alimento que recibe, y sabiendo que nada hay en mi heladera, me dirijo a mi cafetería favorita que está a solo 2 cuadras de mi casa, luego de ponerme mí traje y tomar los papeles y la notebook. Todavía no son las 7 hs y ya hay gente desayunando, me alegro no ser el único que trabaja desde tan temprano. Hoy me espera un día complicado tengo que supervisar 2 obras. También ver cómo solucionar el tema de Esteban. Nunca imagine que fuera tomarse tantas atribuciones, tendré que ver bien que otras cosas piensa que puede hacer sin mi autorización. Quería golpearlo cuando dijo casi primos. Espero no haber cometido un error dejándolo en la empresa después de lo de Valeria.
Se acerca el camarero y le pido un café con una porción de mi torta favorita. Recibo un mensaje de German avisando que en media hora estará en la empresa con el auto. No puedo esperar de ver la cara de Cristina y su marido. Pago y me dirijo a la oficina.
Llego al estacionamiento y como es habitual me recibe Arturo.
- Buen día señor Carson – saludo con una sonrisa plena- llega muy temprano hoy.
- Buen día Arturo, si tenemos algo muy importante que hacer en unos minutos – digo mirando con una sonrisa
- Tenemos? – su cara confusa borro su sonrisa
- Si tenemos, va a ser mi cómplice, como en esos programas de sorpresas. Sabe de lo que hablo?
- Si señor Carson, mi señora es fanática de ellos. – dice con los ojos iluminados- y a quien sorprenderemos?
- A Cristina, ella ya llego?
- Cuente conmigo señor!! La señora Cristina es una excelente persona. Y contestando su pregunta todavía no llego.
- Bien, recuerda a mi amigo German? – el asiente con su cabeza- traerá un auto, lo dejaremos acá y cuando cristina y su esposo lleguen los traeré acá con alguna excusa. Indíquele a German que estacione el auto enfrente al elevador.
- Genial!! Cuente con ello. Y señor permítame decirle, su padre estaría orgulloso de usted. Se merece ser muy feliz, como diría mi esposa, todo vuelve y a usted le van a llover buenas cosas. –
- Gracias Arturo, no hago más que premiar el trabajo y la responsabilidad, y seguir con la tradición que tenía mi padre.
Me dirijo a la oficina. Saco los papeles de mi portafolio y cuando me dispongo a empezar a revisar los bocetos del nuevo edificio me llega un mensaje de German anunciando que dejo el auto en el lugar indicado y que debe irse ya que uno de sus hijos tiene reunión en el colegio. Quedamos en vernos después de la oficina. Ahora solo queda que llegue Cristina y Oscar. Veinte minutos después recibo el mensaje de Arturo que los vio llegar a la empresa. Llamo a Cristina y le digo que me esperen en la recepción, con la excusa de ir a desayunar y hablar con ellos en privado. Rio para mí mismo, creo que haber visto tantos programas con mamá tiene sus frutos.
Llego a recepción y los veo, se notan nerviosos y Cristina mira asustada a Oscar, sin dejar de sostenerse de su brazo.
- Buen día Cristina. Oscar un placer verte, - saludo mientras estrecho su mano. Sus manos tiemblan y están sudorosas, típico de los nervios que tiene.
- Buen día señor Carson- dice Cristina – no sé qué habrá pasado pero le juro que nosot... –no dejo terminar sus palabras
- Tranquila Cristina. no hay nada porque preocuparse. acompáñenme por favor. – les digo indicándole el camino al subsuelo donde se encuentran el estacionamiento. Una vez en elevador los miro sonrientes y pregunto – los niños fueron al colegio hoy?
- No señor, están con mi madre, como pidió vernos temprano no llegamos a tiempo-
- Que descortés de mi parte no haber pensado en ello! Mil perdones. Pero como solía decir mi padre no hay mal que por bien no venga, no? – ambos me miran sin entender y más cuando impido que las puertas del elevador se abran.
- Bien, no dilatemos más esto, se preguntaran que hacemos acá, y para que los necesito. Mi padre me dijo una vez que la clave del éxito en una empresa o negocio es reconocer y premiar la excelencia en el trabajo, y como ustedes saben se encargó de premiar a quienes se lo merecían - dejo abrir la puerta y nos encontramos con el auto. Ambos se giran varias veces intercambiando la mirada entre el auto, ellos y mi persona. con los ojos nublados por las lágrimas y el rostro de incredulidad Oscar logra preguntar
- Señor nos está dando un auto? Es eso?
- Si Oscar, el auto es de ustedes,
- Ohh por Dios!! Señor!!! Por Dios – exclama abrazando a una Cristina llorosa y paralizada- pero señor, no… pero porque… no no podemos…...-
- Si, si pueden Oscar. el auto es para ustedes, para compensarlos por la buena labor que hacen. Para agradecer a Cristina por todo su trabajo – ambos se abrazan y lloran emocionados – lo único que pido a cambio es, primero que lo disfruten en familia y segundo me gustaría que no se sepa mucho esto. No quisiera q alguien mal interpretara las cosas. Si bien mi padre ya lo hacía, el anonimato es lo que hace justa la premiación –
- Gracias señor, gracias gracias lo que usted necesite no tiene más que pedirlo. – logra decir una emocionada Cristina.
Luego de convencerlos de tomarse el día y disfrutar el auto con sus hijos. Me dirijo a mi oficina. Dos horas después ya estaba arrepentido de darle el día libre a Cristina. El teléfono no paraba de sonar. Como puede hacer todo Cristina?. Descuelgo todos los teléfonos, hecho llave a la puerta, me sirvo un café y me acomodo frente a la ventana. No dejo de maravillarme con la vista, es algo que me cautivo cuando vine por primera vez. La imagen de Soledad se cruza en mi cabeza. Que estará haciendo? Que era eso tan importante que no puedo ir a una cita conmigo? la viste solo 2 veces y ya pretendes ser todo para ella, me recuerda mi conciencia, si bien tiene razón, mi razón no lo entiende. Cierro los ojos y veo su sonrisa, su mirada, esos ojos que transmiten paz. La alarma de mi celular interrumpe mis pensamientos. El trabajo llama pero ella se niega a dejar mis pensamientos.
La tarde la ocupo supervisando dos de las obras que están en ejecución. Cuando estaba por irme, el capataz llama mi atención.
- Señor, perdone usted, quisiera saber si usted autoriza a una empresa de eventos, creo dijo Meraki a tomar unas fotos de la obra.
- Cuando se contactaron con usted?
- Llamaron antes del mediodía, la señorita dijo llamarse Jazmín, y que tenían que hacer un instu… algo que no entendí , perdón
- No hay problema. Un institucional y si están autorizadas. Manténganme al tanto solamente
- Bien señor, personalmente le informare. Que tenga buen día
- Buen día para usted también
Me dirijo en mi auto a la oficina nuevamente, pero me quedo atrapado en un embotellamiento. Genial, nótese mi sarcasmo.
Enciendo la radio. La música invade el auto. Y si bien no tengo una historia con Soledad, automáticamente comienzo a pensar en ella. Parezco un tonto adolescente. Debo parar con esto. No pasare otra vez por lo mismo. Pero no puedo evitar que este mi mente.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 21 Episodes
descargar
¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
Comments
Liliana Gimenez
M tiene atrapada. tan bien narrada. parece q estas en cada lugar.
2024-03-17
0
Liliana Gimenez
M tiene atrapada. tan bien narrada. parece q estas eb casa lugar.
2024-03-17
1