Capítulo 13

Matteo narrando

Qué chica insolente... ¿Quién se cree que es para hablarme así? No me conoce, ¡no es posible!

Luna - ¡Hemos encontrado a nuestra chica!

Matteo - Debes haberte golpeado la cabeza, ¿verdad? Te caíste de la cama, ¿es eso? ¡Claro que no, esa mujer no es buena!

Luna - ¿Cómo podría no hacerlo? No le gustabas desde el principio y ¡eso es perfecto!

Matteo - No... ¡Ella no!

Luna - Deja de ser un niño... ¡Sólo tienes un mes para encontrar una mujer que no te meta en problemas después!

Matteo - ¿Quién puede garantizar que no se meterá en líos?

Luna - Por la expresión de su cara... Probablemente ni siquiera lo acepte kkk

Matteo - Eso es... ¡Olvídalo!

Emma - ¡Aquí, Sra. Luna!

Se acerca con la bandeja y pone el plato de Luna en la mesa con nuestro café...

Luna - Ahhh, por favor... ¡Sólo Luna!

Sonríe y durante dos segundos veo tristeza en sus ojos...

Mierda... ¿Por qué mi corazón late así?

Lo siguiente que recuerdo es que sacude la cabeza y mira a Luna, que me mira con una pequeña sonrisa...

Matteo - ¿Qué pasa?

Luna - ¡Nada! Lol

Sacudo la cabeza y bebo mi café... Luna tiene razón, esta mujer no parece que vaya a aceptar la oferta y eso es exactamente lo que necesito. ¡Pero no a ella!

Hablamos un rato y cuando terminamos, Luna se levanta...

Luna - Voy al baño... ¡Esperadme!

Matteo - ¿Hay un retrete en este vertedero?

Ella sonríe, sacude la cabeza y se va...

Emma narrando

Como si mi día no fuera una mierda... Este idiota viene a estresarme un poco más.

Odio a la gente engreída... Ese tipo de ambiente... ¿Puedes creerlo?

Entonces, ¿por qué has venido? ¡Pues vete a tomar café al quinto infierno!

Rosa - Srta. Emma... ¿Qué le pasa?

Emma - Nada, Sra. Rose... ¡sólo tengo la cabeza llena!

Doña Rosa es una señora muy dulce y simpática que viene al merendero todos los días a esa hora... Vive sola y viene aquí a charlar. También me ayudó mucho cuando murió mi madre. Siempre se sienta en el mostrador para que podamos charlar mientras yo trabajo...

Rosa - ¿Quieres hablar?

Respiro hondo y cierro los ojos. Cae una lágrima y ella me coge de la mano.

Rosa - ¡Cuéntame, cariño!

Le dedico una media sonrisa y la miro...

Emma - Ayer me enteré de que estoy embarazada...

Rosa - Ohhhh... Pero eso son buenas noticias, ¿no?

Emma - Es... Sí, lo es. Pero también me he enterado de que mi bebé tiene una enfermedad rara y, si no empiezo pronto el tratamiento, ¡podría morir!

Rosa - Ahhh no... ¡Entonces tienes que empezar el tratamiento!

Emma - Sí, pero es muy caro y no me lo puedo permitir.

Rosa - ¡Maldita sea!

Emma - Para colmo, nos han robado el dinero que mi novio y yo estábamos ahorrando para la boda y estoy desesperada.

Rosa - Ohhhh, chica... No seas así, ¡ya encontrarás la manera! Si tuviera dinero, te lo daría. Pero...

Emma - ¡Me basta con que me escuches!

Rosa - ¡Puedes contar conmigo!

Ella sonríe y yo le doy un abrazo por encima del mostrador...

Rosa - Mira. Tengo que irme, pero quédate tranquila... ¡Ya se nos ocurrirá algo para ayudarte!

Emma - Está bien. No quiero que te preocupes por eso.

Rosa - Tú y Asher sois mis hijos del corazón... ¿Cómo no voy a preocuparme?

Sonríe y se va... Empiezo a limpiar y a organizar algunas cosas en la encimera cuando veo que la señora Luna se me acerca...

Emma - Hola... ¿Necesitas algo más?

Luna - Sí... quiero decir, ¡no! Volvía del baño cuando te oí hablar con esa señora.

Emma - ¡Ah!

Luna - Mira, lo siento... Tengo una proposición para ti y puede parecer un poco incorrecto utilizar este momento que estás atravesando para convencerte, pero puedo ayudarte con la cuestión del dinero para el tratamiento de tu bebé.

Acabo frunciendo el ceño y la miro confundido...

Emma - Mire, Sra. Luna, yo...

Luna - Luna, ¡sólo Luna!

Emma - Luna... No sé de qué me hablas, pero la cantidad que necesito para el tratamiento es muy alta.

Luna - Ya veo. Pero quizás no me conozcas, soy abogado y el hombre que está conmigo es...

Emma - ¡Tu marido!

Luna - Kkk No... No es mi marido, es sólo un amigo. Es Matteo Cole, el mejor abogado del país.

Emma - Él es Matteo Cole... ¿El dueño del bufete de abogados cerca de aquí, en ese edificio de lujo?

Luna - ¡Exactamente!

Emma - Siempre supe que el dueño de todo eso era un idiota y un hijo de papá despreciable.

Luna - Puede que sea todo eso y un poco más...

Emma - Mucho más, ¿quieres decir?

Luna - Jaja, bueno... Pero el hecho es que él necesita tu ayuda para no perder la herencia que su madre le dejó.

Emma - ¿O sea... él me dará dinero para recibir dinero?

Luna - Básicamente eso... pero lo que realmente le importa es la casa que su madre adoraba tanto.

Emma - Mira, yo...

Luna - Solo son seis meses y todo lo que tienes que hacer es casarte con él.

Emma - ¿Casarme? No... Claro que no. Tengo novio y...

Luna - Como dije, solo son seis meses, nada más. Podrás casarte con tu novio cuando todo esto termine.

Emma - No puede ser tan sencillo...

Luna - Pero lo es... Si aceptas, firmarán un contrato de seis meses. Puedes poner las condiciones que quieras y pedir la cantidad que desees.

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