Capítulo 4

Hoje llega Danilo... Lo extraño tanto. Ya arreglé con Asher para salir una hora antes de que termine el trabajo... No le gustó mucho, pero sé que solo lo hace para molestar a Danilo.

Voy a preparar una cena especial para él... ¡Oh, estoy tan emocionada!

Asher - ¿Esa sonrisa tonta en tu cara es por ese idiota?

Emma - Es por Danilo... No conozco a ningún idiota que no seas tú jajaja

Asher - Ahhhh, Emma... Si no fueras como una hermana para mí, te despediría por causa justa jajaja

Emma - Jajaja ¿Y desde cuándo puedes vivir sin mí?

Asher - Desde siempre jajaja

Emma - ¡Sé muy bien que me amas y que no puedes vivir sin mí!

Asher - Pobre e ilusa, Emma.

Emma - ¡Entonces despídeme!

Asher - Debería hacerlo jajaja

Emma - ¿Y por qué no lo haces?

Asher - Porque eres mi única familia... No puedo despedirte jajaja

Me siento a su lado y le sonrío...

Emma - ¿Cuándo vas a perdonar a tus padres? ¡Sé que los extrañas!

Asher - No sé si seré capaz de hacer eso algún día... Pero está bien.

Emma - Asher... ¡Asher!

Asher - Ya puedes irte... Ve a tu estúpido novio y déjame aquí.

Emma - Jajaja deja de hacer drama.

Asher - Broma pequeña... ¡Ve a divertirte un poco!

Emma - Gracias... ¡Y cuídate!

Asher - ¡Soy cuidadoso! jajaja

Suelto una carcajada y voy al vestuario... Me cambio de ropa y paso por el mercado antes de ir a casa.

Compras hechas... Ahora es hora de preparar la sorpresa para mi amor.

Cuando llego a casa, preparo la cena y organizo la mesa... Dejo todo listo y me voy a duchar. Luego voy a la habitación y me pongo la ropa que elegí... ¡Un vestido azul que a Danilo le encanta!

Se seco el pelo y me maquillo ligeramente...

Lista y satisfecha... Voy a la sala a esperar a Danilo. Minutos después, suena el timbre y sé que es él. Me levanto sonriendo y abro la puerta emocionada.

Danilo - ¡Amor!

El me abraza por la cintura y me gira en el aire...

Emma - ¡Qué ganas tenía!

Danilo - Yo también... ¡Wow, estás preciosa!

Él me pone en el suelo y me besa con pasión...

Mi corazón se acelera... ¡Estaba loca por este beso!

Él me empuja contra la pared y sube mi vestido... Intento cerrar la puerta, pero es imposible mientras él me besa así...

Emma - ¡Amor... La puerta!

Sin dejar de besarnos, él cierra la puerta y vuelve a pegar nuestros cuerpos... Él me levanta y rodeo su cintura con las piernas.

Emma - ¡Extrañaba tanto tu calor!

Danilo - Ahora estoy aquí, mi amor, y voy a satisfacer todo ese deseo.

Él me lleva a la habitación y me arroja a la cama... En cuestión de segundos, estábamos amándonos intensamente.

Un tiempo después, caemos exhaustos en la cama y trato de recuperar el aliento...

Emma - No sé si podré soportar estar lejos de ti por mucho más tiempo.

Danilo - Casi estamos allí, amor... falta tan poco.

Emma - Lo sé...

Él sostiene mi rostro y me da un beso en los labios...

Danilo - Muy pronto, vamos a planear nuestra boda y ya no tendremos que vivir separados... Vi nuestras ahorros hoy, falta poco.

Emma - Sí... Lo veo todos los días jajaja

Danilo - Ahh, ¿sí?

Él se pone tenso y trata de disimular...

Emma - Sí... ¡La ansiedad jajaja!

Danilo - Ya entiendo... ¡Vamos a comer, estoy muriendo de hambre!

Emma - Claro... ¡Hice tu comida favorita!

Él me da un beso en los labios y se levanta, se pone ropa, toma su teléfono y se sienta en la cama... Voy al baño y entro en la ducha pensando que él también vendría... Un tiempo después, termino y voy a la habitación, ¡él no estaba!

Me pongo ropa cómoda y voy a la sala... Él estaba comiendo y mirando su teléfono.

Emma - Oh, amor... ¿No me esperaste?

Danilo - Oh, vida... ¡Tenía mucha hambre, te lo dije! 

Emma - ¿No podías esperarme?

Danilo - Lo siento, ven aquí.

Me hace sentar en su regazo y besa mi cuello... Su teléfono suena y él se detiene.

Emma - ¿Quién es?

Danilo - Del trabajo... Tengo que responder.

Me levanto y voy a buscar mi comida... Me siento en la mesa y él sigue escribiendo. Empiezo a comer y él sigue mirando su teléfono...

Emma - En serio, Danilo? 

Danilo - ¿Qué pasa? 

Emma - Estás de descanso y no te separas de ese teléfono... Pasaste 15 días fuera y cuando vuelves, apenas me miras. 

Danilo - Es mi trabajo... ¿Qué puedo hacer? 

Emma - Hiciste todo lo que tenías que hacer en 15 días... ¿No fue suficiente? 

Danilo - Sabes que las cosas no funcionan así. 

Emma - ¿Ah, sí? Estás de descanso, Danilo... Son dos días, dos días que tengo contigo cada 15 días... Y aún tengo que dividir ese tiempo con tu trabajo. 

Danilo - ¿No quieres casarte? 

Emma - ¡Pensé que era el deseo de ambos! 

Me levanto y me voy a la habitación... 

Danilo - ¡Emma! 

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